VIVIR LA SANTA MISA: UN ENCUENTRO DE AMOR Tercera sesión D. Alfredo Fernández Giménez

LITURGIA DE LA PALABRA Imagen inicial: Después de haber preparado el ambiente, el clima, el padre de familia se dispone a relatar a todos los hijos reunidos en torno al hogar la historia de la familia, su propia historia, que es para todos los que le escuchan fuente de esperanza y de gozo.  Texto inicial: Éx 12: Preparación de la Pascua

Ideas o reflexiones previas 1. Todo lo que hemos celebrado hasta ahora, los ritos introductorios, han dispuesto a la Asamblea para acoger adecuadamente la Palabra de Dios. 2. La Liturgia de la Palabra y la Liturgia Eucarística están tan estrechamente unidas entre sí que constituyen un solo acto de culto (Cf. IGMR, 28).

Estructura de la Liturgia de la Palabra Es una estructura muy cuidada, podríamos llamarla “sinfónica”, nada está así al azar o por casualidad. Tres “escuchas”, las tres lecturas: 1ª, (generalmente del A.T.), seguida del Salmo responsorial 2ª (propia de la liturgia dominical, siempre del N.T.); 3ª Evangelio, reservado al Ministro Sagrado. Tres “respuestas” o intervenciones de la Asamblea: Homilía; Profesión de fe bautismal, CREDO; Plegaría universal o peticiones.

¿Por qué las lecturas tienen que ser siempre de la Biblia? Las “escuchas” ¿Por qué las lecturas tienen que ser siempre de la Biblia? Porque la Eucaristía es siempre acto de la Iglesia, de toda la Iglesia, reunida por el Espíritu Santo. En ella, Cristo, Verbo Eterno del Padre, nos otorga la palabra de Dios contenida en la Sagrada Escritura. ¿Por qué tres lecturas? El número y la vinculación entre las lecturas pone de manifiesto la estructura misma de la Revelación: es Trinitaria y en ella la Palabra de Dios en su totalidad resuena como una sinfonía espiritual en la que cada armónico (lectura) es necesario para hacer percibir la armonía, la belleza y la significación del conjunto. Las diversas lecturas explicitan el diálogo de Dios con su pueblo que comenzó ya en la misma creación del mundo. 1º Lectura (y 2ª lectura): Dios habla a los hombres (a su Iglesia). Salmo responsorial: respuesta de los fieles a la Palabra de Dios. Evangelio: El Verbo Eterno se hace palabra de vida, palabra eficaz, en el aquí y el ahora de la celebración.

La homilía: bíblica, brillante, breve. Las “respuestas” La homilía: bíblica, brillante, breve. La profesión de fe: es el símbolo, aquello por lo que nos reconocemos y nos reconocen. La oración de los fieles: paradigma > la del Viernes Santo. Ha de ser universal, eclesial y equilibrada

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