Regla de Oro
. Las acciones (+ o -) de los hombres afectan y se dirigen a otros seres humanos Las morales establecen ciertos preceptos para regular dicha relación Regla de oro
El hombre tiene, en su categoría de ser moral, deberes y derechos respecto a todo lo que hay (a otros seres)
La noción de prójimo es lo que evidencia nuestra condición moral.
Diversas formulaciones de la “Regla de Oro” “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” Levítico 19, vers.18 “Amareis al forastero, porque forasteros fuisteis vosotros en el país de Egipto” Deuteronomio 10, vers.19 “No hagas a otros lo que no quisieras que ellos te hicieran a ti” Hillel “Todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos, porque ésta es la Ley y los Profetas” (Mateo, 7, 12).
Hans Reiner Empatía Su base son nuestros deseos o temores “lo que tú mismo temas, no lo hagas a los demás, lo que deseas, hazlo a los demás” Equidad Su base son los juicios de valor “lo que reprochas a otros, no lo hagas tú mismo; debes actuar como juzgas que los demás deben hacerlo”
En la tradición hindú encontramos esta historia: Preguntó un gurú a sus discípulos si sabrían decir cuando acababa la noche y comenzaba el día. - Cuando vez a un animal a distancia y puedes distinguir si es una vaca o un caballo- dijo uno. -No –dijo el gurú. -Cuando ves un árbol a distancia y puedes distinguir si es un mango o un anacardo –dijo otro. -Tampoco –dijo el gurú. -Esta bien –dijeron los discípulos-. Dinos cuando es. -Cuando miras a un hombre al rostro y reconoces en él a tu hermano; cuando miras a la cara una mujer y reconoces en ella a tu hermana. Si no eres capaz de esto, entonces, sea la hora que sea, aún es de noche.
La regla se plantea en el orden de la acción. Posee justificaciones prácticas Haber sido forastero, no juzgar a otros, reconocerse como hermanos, etc.