PLAN PASTORAL 2012-2015

PROGRAMA ORACIÓN LA COMPETENCIA ESPIRITUAL DAME LA PALABRA HACIENDO PRIORIDADES EL CAMINO A LA UNIDAD EXISTENCIAS COMPROMETIDAS

La competencia espiritual Historia Bases neurológicas Cómo la ven distintos autores y sistemas educativos Una pista para nuestras escuelas

LA PASTORAL IMPLÍCITA ANÁLISIS DE LA REALIDAD DE LOS CENTROS El camino a la unidad: ¿Dónde estamos? ¿Dónde pretendemos llegar?

DEFINIMOS La búsqueda de la verdad El camino a la unidad La experiencia del misterio La existencia comprometida

DAME LA PALABRA Confiar en la Palabra Proyectarse en la Palabra: Mc. 5, 24-34 Proyectarse en la Palabra: Hacer una creación a partir del texto Ponle título Mírala y escúchala Escribe lo que te dice Señala las palabras claves. Escribe lo que vives Recrear la Palabra Compartir mi creación y mi experiencia Oramos por cada uno a partir de su creación y su experiencia

ALGUNAS PISTA “Nadie llega a la verdad si no es a través de centenares de errores por el camino” (Meister Eckhart) “Un santo que puede fracasar de un modo que el héroe no se puede permitir, porque el fracaso de un santo revela el perdón y las posibilidades nuevas que Dios hace posible, y así este es solamente un pequeño personaje en una historia que siempre trata, fundamentalmente, de Dios” (Samuel Wells)

Facilitar experiencias de trascendencia Silencio. La Buena Noticia, cada uno de los evangelios en su inicio narra una experiencia de silencio. Nuestra pastoral debe comenzar con una experiencia de silencio, nuestra y la de aquellos a los que nos dirigimos para poder dar sentido a lo que viven/vivimos/está sucediendo. Dando tiempos y espacios para ser, para hablar o para estar, para darse a sí mismo y escuchar en el interior de cada persona lo que pasa, nos pasa y nos traspasa. Muchas personas se encuentran con la incapacidad de identificar, nombrar e integrar en su experiencia ordinaria la realidad que a través de esos destellos de trascendencia ha irrumpido en su vida. Diálogo: “En efecto, la verdad es el logos que crea diá-logos y, por tanto, la comunicación y la comunión” Benedicto XVI, Carta Encíclica Caritas in veritate n.4 “Imaginar un lenguaje supone imaginar una vida” (Wittgenstein)

Ayudar a descubrir en este mundo la PRESENCIA que lo habita Vivir en este mundo con toda intensidad, hasta descubrir en él la presencia que lo habita, el designio que lo guía y la fuerza de gravedad que lo atrae. El mundo de la belleza, el arte y la estética.

Interés por el hombre Experiencias humanas fundantes Experiencia del problema y misterio que somos para nosotros mismos. Atender a aquellos con quienes estamos Buscar a la gente. Reconocimiento de aquellos a quienes nos dirigimos.

El testimonio Compartir signos de que estamos vivos. Mostrar nuestra alegría: “Los discípulos de Cristo deberían tener más aspecto de redimidos” (Nietzsche) Fieles a nosotros mismos Descubrir que somos incompletos hasta que acogemos a los “extranjeros”, pues ellos forman parte de lo que somos en Cristo.

La fuerza de la comunidad “Una comunidad cristiana que poseía un sentido comunitario más fuerte que cualquier otro grupo. Sus miembtros quedaban unidos no sólo por unos ritos comunes, sino también por una forma común de vida...” E.R. Dodds ”De no haber sido por esto, el mundo seguiría siendo pagano. Y el día en que esto se acabe, el mundo volverá a serlo:” Festugière

Definición para tener un lenguaje común para cada uno de los elementos que integran el plan pastoral. Dividos en grupos cada grupo hace la definición de un elemento del plan. Los demás grupos añaden, subrayan, la definición de base. Redacción definitiva y presentación

Establecimiento de prioridades y líneas de acción a partir del trabajo del encuentro de noviembre. Trabajo en grupo sobre documento y puesta en común.

EXISTENCIAS COMPROMETIDAS Cierre de las jornadas y acercamiento a las figuras de Madre Rafols y Juan Bonal Cada uno establece a partir de su vivencia de estos días, de sus preocupaciones, etc... Un diálogo con Madre Rafols y Juan Bonal...

Y del texto de Dietrich Bonhoeffer: “No nos toca a nosotros predecir el día – pero este día vendrá – en que de nuevo habrá hombres llamados a pronunciar la palabra de Dios de tal modo que el mundo será transformado y renovado por ella. Será un lenguaje nuevo, quiza totalmente arreligioso, pero liberador y redentor como el lenguaje de Cristo... Hasta entonces, la actividad de los cristianos será oculta y callada; pero habrá hombres que rezarán, actuarán con justicia y esperarán el tiempo de Dios. Que tú seas uno de ellos y que alguna vez pueda decirse de ti: “Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto” (Prov. 4, 18)”

¡Ojalá tu seas uno de ellos!