LA PREHISTORIA en la Península Ibérica - El Paleolítico. - El Neolítico. - La Edad de los Metales.

La Prehistoria, es la primera y la más larga etapa de la Historia. En la Península Ibérica, transcurre desde hace un millón de años, cuando aparece el ser humano, hasta hace unos 3.000 años, que aparece la escritura

La Prehistoria, se divide en tres etapas: el Paleolítico, el Neolítico, y la Edad de los Metales.

En el Paleolítico, vivían: - al aire libre, - en cuevas, en sencillas cabañas, hechas de ramas y pieles.

En el Paleolítico, se alimentaban de lo que encontraban en la naturaleza: recolectaban frutos y raíces, pescaban peces y moluscos, cazaban todo tipo de animales…

De todos estos recursos obtenían: pieles para abrigarse, huesos para fabricar utensilios. tripas y tendones para coser,

Los humanos que vivían en el Paleolítico eran nómadas, se trasladaban de lugar al escasear los alimentos en la zona donde se asentaban.

Vivían agrupados en tribus (alrededor de 30 miembros) formadas en familias, que tenían repartidas las tareas de: recolectar,

cazar, pescar,

fabricar utensilios

La esperanza de vida no superaba los 20 años, debido a: - las enfermedades, las heridas o caídas, con roturas de huesos…, - la escasez de alimentos, la climatología, con temperaturas extremas, mucho frío o mucho calor.

Las herramientas y utensilios estaban hechas principalmente de dos materiales: piedra tallada, que se obtenía golpeando una piedra con otra. huesos, que se obtenían de los animales que cazaban y pescaban.

Estas herramientas y utensilios los utilizaban para: Cazar: Puntas de flechas Cortar: Puntas de lanza Raspador Bifaces o hachas Cuchillo

Coser: agujas y punzones. Pescar: arpones y anzuelos.

También pintaron el interior de las cuevas (paredes y techos). Pintaban animales.

Pintaban con las manos, con plumas, con pelos de animales, con ramas y huesos. La pintura la conseguían machacando diferentes minerales que mezclaban con grasa de animales.

También se han encontrado pequeñas esculturas, en piedra o en hueso, que representan a figuras femeninas, se cree que estaban relacionadas con ritos o creencias sobre la fertilidad.

En el Neolítico, hace 7.000 años, aparecen dos nuevas ocupaciones: La agricultura. Los hombres y mujeres observaron que, cuando recolectaban frutos y caía alguna semilla al suelo, después crecía en ese lugar una nueva planta, por lo cual decidieron enterrar ellos mismos esas semillas, apareciendo los primeros cultivos y los primeros agricultores…

Y la ganadería. Al empezar a cultivar, necesitaban no alejarse demasiado del lugar del cultivo, así empezaron a construir cercados para retener y guardar a algunos animales, que les proporcionaban alimento y otros materiales, como: cabras, ovejas, bueyes, aves… Empezaron a surgir los primeros ganaderos…

Las nuevas ocupaciones les obligaron a permanecer en el mismo lugar, con lo cual empezaron a hacerse sedentarios, creando las primeras aldeas y poblados, cerca de ríos o lugares accesibles al agua.

Además de producir alimentos, tuvieron que almacenarlos y defenderlos frente a otras tribus. Para proteger y defender las aldeas, construyeron empalizadas y muros de piedra. Empezaron a dividirse el trabajo: mientras unos, producían los alimentos o cuidaban el ganado; otros, los defendían y cazaban. Los demás podían dedicarse a la artesanía, realizando utensilios y herramientas, sin preocuparse por su alimentación, ya que el resto de la tribu se la proporcionaba.

Estos artesanos hacían herramientas de piedra más elaboradas, es la edad de la piedra pulimentada, más resistente que la piedra golpeada del Paleolítico. Fabricaron azadas, hoces, hachas, molinos de mano.

Y aparecieron más inventos: La cerámica, fabricaban objetos con barro modelado con las manos y cocido en una hoguera. La cestería, tejiendo fibras vegetales. Así elaboraron vasijas, platos, cuencos, cestos…, para guardar la comida, cocinar, beber en ellos…

También empezaron a fabricar tejidos, con lana de los animales, que tejían en telares muy sencillos.

Las pinturas del Neolítico evolucionaron con respecto a las del Paleolítico. Ahora pintaban escenas de caza o de recolección e incluso grupos bailando. Las figuras eran muy esquemáticas y utilizaban un solo color.

También siguieron elaborando figuras con piedra y hueso, así como otros objetos.

Hace unos 6.000 años, los seres humanos aprendieron a fabricar objetos de metal. A este período se le conoce como Edad de los Metales. Primero emplearon el cobre, más tarde el bronce y, finalmente, el hierro. Con todos estos metales hacían: armas, como espadas y hachas; adornos, como broches y, herramientas, como azadas y hoces. Estos objetos eran más resistentes que los fabricados en piedra.

Como los metales no se encontraban en todas partes, se dedicaron a buscarlos y obtenerlos. Así las aldeas situadas en las zonas ricas en metales, empezaron a crecer, por los trueques que se realizaban en ellas. Consecuencias: Aparece el comercio. Las ciudades crecen, hay una nueva organización, con un jefe, murallas y guerreros que las protegen. - Surgen nuevos oficios, más especializados.

En la Edad de los Metales se producen tres inventos de gran importancia: La rueda, que permitió trasladar mercancía más pesadas en carros. El arado, arrastrado por animales, que permitió arar grandes extensiones y a mayor velocidad.

Y la vela, que hizo posible que los barcos se movieran gracias a la fuerza del viento, pudiéndose hacer más grandes para llevar a más personas y a más mercancías.

En la Edad de los Metales, aparecen los primeros monumentos construidos con enormes piedras llamadas megalitos (esta palabra procede del griego: “mégas”, que significa grande y “líthos”, que significa piedra). Estos monumentos reciben el nombre de monumentos megalíticos, todavía existen muchas hipótesis de cómo fueron construidos.

Hay distintos tipos de monumentos megalíticos: El menhir es una piedra alargada, clavada verticalmente en el suelo.

El dolmen son grandes piedras verticales cubiertas por una losa. Dolmen de Menga en Antequera, provincia de Málaga (España)

El crómlech son grandes piedras colocadas en forma de círculo. Stonehenge, en Amesbury (Reino Unido)

La naveta es una construcción funeraria colectiva, con grandes piedras, sin argamasa, con forma de una nave invertida, de ahí su nombre. Naveta funeraria en Es Turons, en la isla de Menorca (España)

Para el nivel de 5º de primaria. Agradecimientos a los autores de las fotografías y dibujos obtenidos en la Red. Presentación realizada por: Mª del Pilar Moraleda Díaz, maestra del CEIP Antonio Checa Martínez de Torre del Mar (Málaga)