Disciplina como generador de Autocontrol Psic. Cecilia Isaac Zapata Directora del Centro Neuropsicopedagógico para el desarrollo del Potencial. CENDEP

Ejercicio de Reflexión ¿Qué es la disciplina? ¿Para qué utiliza usted la disciplina en su familia? ¿Cómo aplica la disciplina con su(s) hijo(s)? ¿Qué es el autocontrol?

Disciplina La palabra disciplina viene del discípulo, el que aprende de un maestro. Desde pequeños, los niños requieren del ejemplo y disciplina para orientarse en su camino hacia la autonomía. Los niños necesitan y valoran la disciplina.

Los niños ponen a prueba a sus padres Los niños esperan de sus padres guía y que fijen límites. Las reglas claras y establecidas con respeto hacen que el niño se sienta protegido y seguro. Los niños se oponen a la autoridad de los padres, desobedecen y los ponen a prueba, para asegurarse de que sus padres son fuertes y se hacen cargo de su cuidado.

La falta de autoridad daña Si dejan que un niño haga lo que quiera ¿cómo aprenderá a fijarse metas y cumplirlas? Si el niño piensa que siempre se hace lo que él quiere ¿cómo sabrá relacionarse con otras personas? Si permite a su hijo que le falte al respeto y lo menosprecie ¿En quién se va a apoyar para obtener seguridad y guía? Si el niño es incapaz de ver el peligro, los padres tienen la obligación de cuidar su salud y seguridad.

La disciplina debe tener como meta que el niño aprenda a ponerse límites a sí mismo, a tomar decisiones y a marcarse metas.

¿Qué es el autocontrol? El autocontrol es la disciplina de la voluntad ¿Qué es mejor, dejarse llevar por los impulsos o controlarse?, ¿ser “natural” y espontáneo, o “educado” y comedido?, ¿nos conviene decir lo primero que se nos antoja, o debemos de hablar después de haber pensado mucho lo que vamos a decir?

¿Qué es el autocontrol? El autocontrol es la capacidad para poder dirigir la propia conducta en el sentido deseado. El niño de cero a seis años requiere del apoyo de sus padres (DISCIPLINA) para desarrollar el autocontrol de su conducta. El desarrollo del lenguaje también permite que el niño pueda autorregularse.

Desarrollo del autocontrol El niño pequeño primero aprende a subordinar motivos, por ejemplo, que si quiere jugar debe primero hacer su tarea. Luego el niño cumple lo que el adulto le dice por agradarlo, pero donde en realidad no hay aún la interiorización de la necesidad de hacerlo por el beneficio que esto le reporta a él y a los demás. Con una educación adecuada finalmente el niño logra esta interiorización, entonces sí es posible hablar de que existe un autocontrol.

Desarrollo del autocontrol Trabajar el autocontrol es necesario para preparar al niño para su ingreso a la escuela primaria, hay que enseñarle a que espere su turno en una fila, a no hablar todos a la misma vez. Es muy importante que aprenda a priorizar y cumplir algunas tareas y trabajos por encima de otras cosas más agradables para él, por ejemplo, el juego. También debe aprender a escuchar atentamente.

Actividades en familia que promueven el autocontrol Todos los juegos de mesa donde el niño deba aprender a esperar turnos, aprender a perder y así aprender a manejar el enojo como: lotería, memorama, dominó, etc. Platicar en familia y decidir actividades para realizar juntos, donde mamá o papá escojan en una ocasión y el niño en otra. Platicar sobre lo sucedido en cuentos o películas, ¿qué hizo el personaje?, ¿cómo resolvió el problema?, etc. Reglas claras y disciplina

Sugerencias para Padres Aplicación de consecuencias naturales y lógicas. Cuando el niño vive el efecto de su comportamiento, están aplicando una consecuencia. Los niños a quienes se les enseña a asumir el resultado de sus acciones aprenden a hacerse responsables, a tomar decisiones y a ajustar su conducta a lo que ellos mismos consideran justo y positivo.

Consecuencias Naturales Es dejar que el niño observe y viva las consecuencias de sus actos, que experimente la “realidad”. Los padres no deben intervenir. Si las consecuencias son agradables, el niño tiende a repetirlos (terminó temprano la tarea y tiene la tarde libre), y cuando son desagradables, es probable que las evite. Se necesita prudencia y sentido común para utilizar las consecuencias naturales, si el niño está en peligro, se debe evitar a toda costa. Si no se levanta temprano llega tarde a la escuela, si no quiere comer al medio día, deberá esperar hasta la noche.

Consecuencias Lógicas Si el efecto de la conducta del niño no resulta incómoda para él, pero sí daña a alguien más, hay que buscar otras consecuencias para aplicarlas a su comportamiento. Lo importante es que el niño entienda cómo sus acciones afectan a los demás y reflexione sobre la necesidad de cambiar su comportamiento. Las consecuencias lógicas tienen que ser positivas, es decir, algo útil para que el niño solucione el problema que causó. Ejemplo: entra a casa con zapatos sucios, tiene que limpiar lo que ensució.

Condiciones para aplicar las consecuencias lógicas Buena relación de amor y comprensión entre padres e hijos. Ambiente de respeto y afecto. Acuerdos entre los adultos que aplican las consecuencias. Elegir una consecuencia que tenga relación y corresponda a la magnitud de lo que hizo el niño. (Si tomó las herramientas deberá guardarlas en vez de ver tele, pero no es razonable que se quede toda la semana sin ver tele)

Tener cuidado de que la consecuencia no cause dolor excesivo en el niño (privarlo de ir a una fiesta que lleva mucho tiempo planeando) La serenidad es la clave para aplicar las consecuencias, combinando firmeza y cariño. Hablar poco y claro, evitar sermones o discursos. El niño puede escoger entre varias posibilidades (¿quieres bañar al perro o darle de comer?) Fijar límites y dejar que el niño decida: “cuando acabes la tarea puedes ir a casa de tu amigo. No la has hecho, no puedes ir”. No discutir ni dejarnos convencer. No juzgar al niño sino describir la acción. Ser constantes y congruentes. Aplicar las consecuencias siempre de la misma manera. Aplicarlas cuando acaban de suceder. Procurar que el niño aprenda de sus acciones.