EN DEMOCRACIA, TODOS DECIDIMOS. EL SISTEMA ELECTORAL

Para cumplir estos fines, todo sistema electoral consta, al menos, de tres elementos, muy importantes: La Circunscripción electoral es el conjunto de electores sobre el cual se realizan las diferentes operaciones electorales. La Fórmula electoral es el procedimiento matemático utilizado para distribuir los escaños entre las candidaturas que se han presentado a la elección. La Barrera mínima es un requisito que se exige a las candidaturas para tener derecho a participar en la distribución de escaños.

LAS ELECCIONES GENERALES (CONGRESO Y SENADO) La Constitución de 1978 ha establecido que las Cortes Generales estén formadas por el Congreso de los Diputados y por el Senado. La norma vigente ha fijado el número de miembros de la Cámara. Para garantizar que todas las provincias tengan Diputados, la ley electoral asigna dos escaños a cada una de ellas y uno a cada una de las ciudades de Ceuta y Melilla. Y los 248 escaños restantes se distribuyen proporcionalmente entre todas las provincias según su numero de votantes censados = 248

DEMOCRACIA REPRESENTATIVA Y PARTIDOS POLÍTICOS.

En un sistema democrático representativo, los partidos políticos constituyen una de las modalidades más extendidas y organizadas de participación ciudadana en el poder. La justificación de su existencia reside, precisamente en el sufragio universal, en las elecciones periódicas y en el sistema parlamentario, que son elementos que caracterizan a los regímenes democráticos. Los partidos políticos constituyen medios de expresión de la opinión pública, que buscan obtener el poder político para lograr a través de él determinados objetivos que son compartidos por una parte más o menos importante de la población. Dos características de los partidos son su condición de asociaciones permanentes y la existencia en un programa ideológico, expresado y concretado.

La participación en los partidos políticos va desde ser un miembro pasivo, que se limita a votar, ayudar durante las elecciones en labores de propaganda política, hasta aquellos que participan en sus organismos directivos y son nombrados candidatos para desempeñar un cargo público. En los partidos políticos destacan estas funciones: Institucionalizar y organizar la participación popular en los procesos electorales. Permiten sumar los intereses de grupos muy distintos entorno a unas ideas generales acerca de cómo organizar la sociedad y hacer frente a sus problemas. Favorecen el reclutamiento y selección de élites políticas, de las que salen los futuros gobernantes. Cuando están en la oposición, son instrumentos de fiscalización y control de la función gubernativa del partido que gobierna