Desarrollo, economía e inclusión para avanzar hacia la igualdad

Presentación del tema: "Desarrollo, economía e inclusión para avanzar hacia la igualdad"— Transcripción de la presentación:

1 Desarrollo, economía e inclusión para avanzar hacia la igualdad
Foro de Alto Nivel: Autonomía Económica de las Mujeres y Políticas Públicas. Hugo Beteta Director de la CEPAL Sede Subregional en México Agosto 2012 El papel del Estado en el desarrollo de la igualdad social es un tema que debe tratarse. La equidad de género es un concepto clave de una agenda de desarrollo compartida por los diversos actores de la sociedad y que, en el caso de las mujeres, supone además del reconocimiento de la titularidad de sus derechos como ciudadanas, aspectos como la incorporación al mercado de trabajo en condiciones iguales a las de los hombres, su participación plena en la toma de decisiones en todos los niveles de la sociedad, el respeto a su integridad física y el control sobre su propio cuerpo. El Estado, como también lo son otras instituciones como el mercado y la familia, no es neutro y refleja la configuración de cada sociedad. Dicho de otra manera, el Estado refleja las relaciones de poder y la capacidad de incidencia de distintos grupos sociales y corporativos representados en sus instituciones. Para que el Estado refleje el bien común es necesario que todos y todas tengan voz pública, representación y capacidad de negociación. Como saben, las relaciones de género son producto de las formas en que las instituciones se organizan y se reconstituyen con el paso del tiempo, y los mecanismos u organismos de formulación de políticas no son una excepción. Es preciso, entonces, desarrollar marcos analíticos de la desigualdad de género con base en la construcción institucional de las relaciones de género, teniendo en cuenta aspectos como la distribución de los recursos, las responsabilidades y cómo las disparidades de género son consideradas en los procesos operativos. Por ello, es importante tener en cuenta aspectos como ¿cuáles deberían ser las prioridades para la abogacía de políticas de género?, ¿qué mecanismos se usan?, ¿cómo deben ponerse en práctica estos mecanismos?, ¿qué buscan?, ¿cómo se hacen las cosas?, ¿qué es lo que se hace? ¿quiénes están dentro, quienes están fuera? Es por ello que en esta presentación trataré, mediante algunas pautas de mostrar el vinculo natural y necesario entre la perspectiva de género y el desarrollo económico y social de la región para el avance hacia una sociedad más inclusiva. Inicio con un panorama somero sobre el contexto económico y social en centro América. Después ejemplifico algunas de las brechas de género en los procesos de desarrollo, para terminar con algunas consideraciones sobre los mecanismos de igualdad de género y adelanto de la mujer en la región.

2 Indice Autonomías, Genero y Eficiencia Económica
2 Indice Autonomías, Genero y Eficiencia Económica Realidades socioeconómicas de CA y recomendaciones de Política Brechas de género en los procesos de desarrollo de la Subregión Caminos hacia la inclusión económica de las mujeres 2

3 Autonomias y “Derecho a las Libertades”
Autonomía económica Políticas que ayuden a superar disparidades de acceso a activos e insumos productivos, que eviten discriminación en los mercados de trabajo y que articulen el empleo con las responsabilidades por el cuidado familiar. Pacto social entre la economía productiva y la del cuidado, para incluir el aporte económico del trabajo reproductivo. Acceso a recursos materiales y simbólicos a infraestructura publica del cuidado. Autonomía Física Ejercicio de los derechos de las mujeres en un ambiente libre de violencia de género. Desarrollo de capacidades institucionales para combatir el feminicidio. Autonomía en Salud Sexual y Reproductiva Evolución de indicadores de mortalidad materna, de embarazo de adolescentes, acceso a planificación familiar. Superar enfoques penalizadores de las mujeres. Espacios de incidencia en el ciclo de políticas públicas.

4 AMÉRICA LATINA: FÁBRICAS, CIRCUITOS Y NÚCLEOS DUROS DE REPRODUCCIÓN DE DESIGUALDADES EN LOS MERCADOS LABORALES

5 Igualdad de Genero Igualdad de Genero tiene importancia intrinseca. El desarrollo es un proceso de ampliacion de derechos. La discriminacion de genero tambien genera grandes perdidas e ineficiencias economicas: Acceso equitativo entre hombres y mujeres a fertilizantes aumenta rendimientos de maiz entre un 11 y un 17% en Africa. FAO estima que igualar acceso a recursos productivos podria incrementar produccion agricola en paises en desarrollo entre un 2.5 y un 4%. Alentar la participacion laboral de las mujeres puede extender el bono demografico en nuestros paises

6 Condiciones SocioEconomicas
6 Condiciones SocioEconomicas Lucha por autonomía económica en un contexto de grandes transformaciones productivas, cambios demográficos y culturales. Mayor igualdad de género y lucha contra discriminación cruciales para revertir procesos de empobrecimiento, disminución de bienestar y cohesión social, y aumento de desigualdad en la subregión.

7 Crecimiento económico - PIB
Centroamérica. Tasa de crecimiento del PIB Bajas tasas de crecimiento económico que limitan el desarrollo inclusivo. Hay una correlación alta entre los países con mayores ingresos y las mujeres con contrato formal. Esto quiere decir que la disminución del PIB en tiempos de crisis, puede significar un efecto negativo sobre el porcentaje de mujeres asalariadas con contrato formal. (Bárcena, “Una Mirada hacia la crisis desde los márgenes”. Sonia Montaño, Coordinadora. CEPAL). Fuente: CEPAL

8 Evolución de la pobreza
8 Evolución de la pobreza Centroamérica. Porcentaje de pobreza e indigencia En América Latina, en el 2010 se recuperó la senda de reducción de la pobreza, aunque a un ritmo inferior al del sexenio previo ( ). Si consideramos sólo a países centroaméricanos el patrón es el mismo. La información al año 2010, disponible para algunos países de la región, revela variaciones de la pobreza con respecto al año previo: Honduras registró incrementos significativos en sus tasas de pobreza y de indigencia, de 1,7 y 1,0 puntos porcentuales. Panamá tuvo un incremento en la tasa de indigencia de 1,5 puntos porcentuales, mientras que El Salvador y República Dominicana, no registraron variaciones significativas en sus tasas de pobreza e indigencia. Se estima que el aumento de los salarios y el empleo han sido de los principales factores detrás de la reducción de la pobreza, o de su aumento, como en el caso de Costa Rica. No obstante, hay excepciones como Panamá, donde las transferencias fueron el factor predominante (las transferencias incluyen principalmente las jubilaciones y pensiones y los programas públicos de transferencias monetarias de superación de pobreza). Fuente: CEPAL

9 Desigualdad de ingresos
9 Desigualdad de ingresos Centroamérica. Participación porcentual en el ingreso por grupos Circa 2010 Los países de América Latina se caracterizan por tener distribuciones del ingreso altamente inequitativas. El 40% de la población con los ingresos más bajos capta, en promedio, el 15% del ingreso total nacional, mientras que el 10% de la población situado en el extremo superior de la distribución posee un tercio del ingreso total. Asimismo, el ingreso medio del quintil más rico supera en 18,3 veces al del quintil más pobre. Los países centroamericanos no se sustraen de esta tendencia. Por ejemplo, en Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Guatemala las participaciones en el ingreso de los cuatro deciles más pobres se sitúan por debajo del 15%. En Guatemala y Honduras, la participación del decil más rico bordea el 40%. No obstante, en años recientes se han observado cambios favorables hacia una menor concentración de los ingresos, que provienen principalmente de una mejor distribución de los ingresos laborales, así como del papel redistributivo del Estado a través de las transferencias monetarias. Fuente: CEPAL 9

10 AMÉRICA LATINA (15 PAÍSES): EVOLUCIÓN DE LA DESIGUALDAD, 2002–2010 a
La tendencia a la mejora distributiva, que se viene observando a partir de 2002 y se ha mantenido luego de la crisis económica. AMÉRICA LATINA (15 PAÍSES): EVOLUCIÓN DE LA DESIGUALDAD, 2002–2010 a Los años 2002 y 2003 representaron un punto de inflexión a partir del cual la desigualdad empezó a mostrar una tendencia decreciente en un conjunto amplio de países. En el periodo la mayor parte de las variaciones en el índice de GINI son hacia la baja. La tendencia hacia la mejora distributiva en la región no se ha visto alterada luego de la crisis económica, a diferencia de lo que ocurrió con la pobreza. Hasta el año , el índice de Gini se redujo a un ritmo de 1% o más por año en 10 países de América Latina, y solo aumentó de manera apreciable en Guatemala. Como mencioné las cifras para el 2010 (posterior a la crisis), indican que la desigualdad no se incrementó significativamente en ninguno de los países con información disponible. Al contrario, en algunos de ello, como El Salvador, el índice de Gini cayó a un ritmo superior al 1% por año. Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), sobre la base de tabulaciones especiales de las encuestas de hogares de los respectivos países. a Datos referidos a áreas urbanas en la Argentina, el Ecuador y el Uruguay. Los puntos de color celeste indican que la variación entre ambos años no es estadísticamente significativa. Los datos corresponden a los períodos en el caso del Brasil, en el de Chile, en el de Costa Rica y en los de El Salvador, el Perú y el Paraguay.

11 Evolución demográfica
11 Evolución demográfica Centroamérica. Distribución de la población por grupos de edad La tasa global de fecundidad en América Latina y el Caribe pasó, de estar por encima del promedio mundial, a estar por debajo desde Para mediados de la década de 1960, las mujeres de la región terminaban su período fértil con cerca de seis hijos por mujer, esto es, un hijo más que el promedio mundial y el doble de lo observado en los países más desarrollados. A partir de entonces, el descenso de la fecundidad en la región ha implicado un considerable acortamiento de tales diferencias: hacia el 2015 la tasa global de fecundidad de América Latina y el Caribe será de 2,1 hijos por mujer, frente a 1,7 de los países desarrollados. Este descenso de la tasa de fecundidad ha sobrepasado las previsiones. Reducciones de esta magnitud implican no solo cambios significativos en términos macroeconómicos sino que también transformaciones radicales en la vida de las familias, en las cargas familiares, y en la organización misma de la sociedad. Sin embargo, como es de esperar en una región de grandes desigualdades económicas y sociales, los momentos de inicio y los ritmos del descenso han sido bien diferentes entre países. El bono demográfico describe la fase de la transición demográfica en que la proporción de personas en edad activa (15 a 59 años) aumenta en relación a la de personas en edad de dependencia económica (la suma de 0-14 años y 60 y más años de edad). Esto implica una fase oportuna para desarrollar capacidades, incrementar la productividad y fortalecer sistemas de protección social. El bono demográfico tiene un carácter temporal, y se extingue con el incremento proporcional de la población adulta mayor. La mayoría de las países centroamericanos están inmersos en el bono demográfico , pero éste aún no inicia en países como Honduras y Guatemala, y Nicaragua recién ingresó a esta fase, lo que presenta una oportunidad adicional de mayor aprovechamiento al considerar el diseño de políticas encaminadas a su aprovechamiento. Fuente: CEPAL

12 Crece la población en edad de trabajar
12 Crece la población en edad de trabajar CRI SLV GTM HON PAN NIC Los procesos demográficos y productivos en América Latina, y en Centro América en particular, están relacionados con la generación y reproducción de desigualdades. La traslación de ambos a los mercados laborales arrastran añejas desigualdades y generan nuevas también. La intervención del estado puede operar en forma muy relevante para reducir las desigualdades estructurales que se acarrean a los mercados laborales. Su ausencia y sus sesgos tienen, por tanto, gran responsabilidad en la explicación en los mecanismos de desigualdad que se dan en la articulación entre mercados laborales y familias; y en el eje central de esta articulación la desigualdad de género juega un rol clave. La distribución de roles entre hombres y mujeres, las ecuaciones entre trabajo remunerado y no remunerado, la discriminación y las roles de dominación atraviesan la articulación entre estados, mercados y familias, consolidando e incrementando los mecanismos estructurales de la desigualdad. Guatemala, Costa Rica y Honduras son de los países que han registrado las más elevadas expansiones de su fuerza laboral en los últimos 20 años, a tasas medias de crecimiento cercanas o superiores al 3% anual. Por su parte, el crecimiento más lento de esta tasa tuvo lugar en El Salvador. En el caso de las mujeres, en los años recientes se ha incrementado su participación en el mercado laboral, lo que plantea el reto de lograr también su incorporación a dicho mercado con empleos de calidad, temo que recuperaré más adelante. Fuente: CEPAL

13 Formalidad e informalidad
13 Formalidad e informalidad Centroamérica. Porcentaje de empleados asalariados La heterogeneidad productiva, evidente entre los países de la región, conduce a mercados laborales y sectores productivos segmentados. En Centroamérica existen diferencias de productividad entre estratos y sectores productivos, asociados al bajo ritmo del progreso técnico y a la desigualdad con los sectores se apropian y hacen uso de él. En Centroamérica, la participación del empleo asalariado (formal) en la ocupación total no ha tenido variaciones marcadas a lo largo de las últimas dos décadas. En el periodo , sin embargo la participación del empleo asalariado sufrió un ligero estancamiento con respecto al porcentaje de la ocupación total, aunque en años posteriores se retomó la tendencia a la alza, para situarse en 2010 en su mayor nivel en las últimas 2 décadas Fuente: CEPAL

14 Ingresos formales vs. informales
14 Ingresos formales vs. informales Países seleccionados de Centroamérica. Relación entre los ingresos de los trabajadores informales y los informales 1998 y 2010 En general, en Centroamérica las personas insertas en el mercado formal laboral perciben mayores ingresos. La evolución de este indicador en los últimos diez años es heterogénea entre países. Por ejemplo, en el caso de Honduras, la brecha entre los salarios de los trabajadores informales y formales casi se duplicó entre 1998 y 2010, mientras que en Panamá esta diferencia de salarios se redujo, aunque no de manera significativa Fuente: CEPAL

15 Áreas de acción Publica
Heterogeneidad estructural y la desigualdad de genero como fabricas de desigualdad. En este mapa el Estado ocupa un rol central: Intervenir en la cadena de reproducción de desigualdades en el mercado laboral: Política industrial para consolidar encadenamientos productivos Políticas de acceso a la innovación y tecnología Políticas de apoyo financiero y tecnológico a pymes Facilitar apropiación de ganancias de productividad por parte de trabajadores de menores ingresos Desligar el acceso a la protección social de la posición de las personas en el mercado laboral Políticas activas para facilitar acceso al primer trabajo Sistemas nacionales públicos de cuidado

16 Brechas de género en los procesos de desarrollo
16 Indice Brechas de género en los procesos de desarrollo

17 Feminidad de la pobreza
17 Feminidad de la pobreza Centroamérica. Índice de feminidad de la pobreza e indigencia En general, en la región el índice de feminidad de la pobreza está por encima de 100, lo que indica una mayor incidencia de este fenómeno entre mujeres que hombres. Esto es particularmente más drástico en Panamá y Costa Rica. Caso contrario ocurre en El Salvador y Honduras, donde este índice está por debajo de 100. Fuente: CEPAL 17

18 Brecha de género en enseñanza primaria
18 Brecha de género en enseñanza primaria Centroamérica. Relación entre niñas y niños en la enseñanza primaria A nivel primaria, las brechas tienden a cerrarse. Sin embargo hay que considerar que esta equiparación puede tener algunos asegunes. Por ejemplo, durante crisis económicas se ha observado la respuesta de las familias más pobres es sacar a sus hijos de la escuela, siendo las más afectadas las niñas. En México, por ejemplo, la probabilidad de que una niña abandonara la escuela durante la crisis fue 1.5 veces mayor que un niño cuando el padre perdía el empleo. Fuente: CEPAL 18

19 Brecha de género en enseñanza secundaria
19 Brecha de género en enseñanza secundaria Centroamérica. Relación entre niñas y niños en la enseñanza secundaria Las brechas también se han cerrado entre mujeres y hombres en secundaria. Inclusive, en la mayoría de los países centroamericanos la relación favorece a las mujeres. Fuente: CEPAL 19

20 Brecha de género en enseñanza superior
20 Brecha de género en enseñanza superior Países seleccionados de Centroamérica. Relación entre mujeres y hombres en la enseñanza superior La equiparación en número de años de escolaridad entre mujeres y hombres ha tenido avances relevantes también. Países con información disponible muestran una creciente matriculación de mujeres en niveles terciarios de estudios, en varios casos superior a las de sus contrapartes varones. Fuente: CEPAL 20

21 Mayor participación laboral de la mujer
21 Mayor participación laboral de la mujer Centroamérica. Proyección media del porcentaje de los empleados que serán mujeres en los años recientes se ha incrementado su participación en el mercado laboral, lo que plantea el reto de lograr también su incorporación a dicho mercado con empleos de calidad. La proyección media del porcentaje de los empleados que serán mujeres es de alrededor del 40 por ciento del total. Fuente: CEPAL 21

22 Brecha de género en empleos remunerados
22 Brecha de género en empleos remunerados Países seleccionados de Centroamérica. Proporción de mujeres entre los empleados remunerados en el sector no agrícola Aun hay brecha en empleos remunerados La precariedad de mecanismos compensatorios públicos, la falta de atención de las actividades de cuidado de niños y ancianos, la distribución inequitativa de dichas actividades entre hombres y mujeres y una menor preparación educativa son algunos de los factores que inciden en la resistencia a cerrar estas brechas. Fuente: CEPAL 22

23 Centroamérica. Tasas de desempleo abierto según sexo en zonas urbanas.
23 Desempleo por sexo Centroamérica. Tasas de desempleo abierto según sexo en zonas urbanas. Los factores expuestos en la lámina anterior también tienen efectos en la sobre-representación de las mujeres entre la población desempleada, aunque en los últimos años esta sobre representación ha ido acortándose... Fuente: CEPAL 23

24 Participación/ocupación por sexo
24 Participación/ocupación por sexo Centroamérica. Tasa de participación de hombres y mujeres en la actividad económica La participación también es desigual De acuerdo a las encuestas de uso de tiempo, las mujeres de la región participan en menor grado que los hombres en la actividad económica y están mucho más involucradas en el trabajo no remunerado, con la consecuencia de tener más horas de trabajo, ingresos menores y muy escasa protección social en comparación con los hombres. Fuente: CEPAL 24

25 Empleo asalariado de las mujeres
25 Empleo asalariado de las mujeres América Latina (11 países): PIB y porcentaje de mujeres asalariadas con contrato formal La OIT asevera que las mujeres han logrado acceder a más empleos, sin embargo éstos son de una calidad cuestionable (OIT, 2009, pag. 19). Por añadidura está bien documentado que las mujeres perciben mayoritariamente salarios más bajos que los hombres al desarrollar los mismos trabajos. Fuente: Una mirada a la crisis desde los Márgenes. CEPAL 2011 25

26 Ocupación de la mujer en sectores de baja productividad
26 Ocupación de la mujer en sectores de baja productividad América Latina (14 países): PIB y mujeres ocupadas en sectores de baja productividad Hay un claro predominio de las mujeres ocupando sectores de baja productividad en la región. Las causas están relacionadas entre otros factores a la falta de preparación, pero también a las tareas domésticas y al cuidado de los niños y los ancianos, trabajo que implica más horas laboradas, pero sin remuneración ni protección social. Fuente: Una mirada a la crisis desde los Márgenes. CEPAL 2011 26

27 Brecha de ingresos propios
27 Brecha de ingresos propios Países seleccionados de Centroamérica. Porcentaje de hombres y mujeres sin ingresos propios Hombres Mujeres Las brechas de ingresos propios son dramáticas. Hay clara dependencia económica de las mujeres NOTA: No se diferencía entre ingresos de trabajo formal o informal. Fuente: CEPAL 27

28 Brecha de género en las instituciones
28 Brecha de género en las instituciones Centroamérica. Proporción de escaños ocupados por mujeres en los parlamentos nacionales La participación equitativa en las instituciones es asunto pendiente. La firma de tratados internacionales como la Convención sobre los Derechos Políticos de la Mujer, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) y las Conferencias Mundiales en El Cairo y Beijing han ocasionado cambios en las políticas públicas y legislación de algunos países de la región. Sin embargo, a pesar de que la participación de las mujeres en los escaños parlamentarios ha crecido considerablemente en algunos países de la región, todavía se obervan diferencias notables en cuanto a la participación de hombres y mujeres. Fuente: CEPAL 28

29 Políticas para enfrentar Discriminación Económica de Mujeres
29 Políticas para enfrentar Discriminación Económica de Mujeres Las mujeres se concentran desproporcionadamente en actividades de mas baja productividad, en el sector informal y en empleos autónomos. Algunos factores determinantes para autonomía económica: 1) las mujeres y los hombres tienen responsabilidades muy diferentes en el cuidado del hogar y la familia. Patrones muy diferentes de USO del TIEMPO que condicionan sus libertades para emplearse y actividades económicas. 2) Las mujeres tienen acceso limitado a activos e insumos productivos 3) Las mujeres reciben trato diferenciado por instituciones y mercados Estos factores subyacentes no terminan con el crecimiento económico: requieren intervenciones de políticas publicas

30 Políticas de Acceso a Activos e Insumos
30 Políticas de Acceso a Activos e Insumos Acceso al crédito: requerimientos de garantía compatibles con distribución desigual de tierra, establecimiento de historial de crédito para mujeres, nuevos productos financieros para mujeres en sector servicios. Derechos de propiedad entre mujeres Poder a mujeres en entidades publicas encargadas de prestar servicios económicos (crédito publico, extensión agrícola, innovación, servicios de información) Desde los años 70 muchos esfuerzos se han realizado para incorporar la perspectiva de género en la política de desarrollo. Sin embargo, es un hecho que no hay una sola forma de hacer un análisis de género, y que los diferentes marcos de género proveen a los responsables y diseñadores de las políticas distintas formas de observar las distintas realidades, aunque hay algunos elementos básicos en torno a las diferentes maneras de incorporar una perspectiva de género en las políticas públicas, como la cuestión de que el fracaso de un gran número de iniciativas de desarrollo se correlaciona con la ausencia o suposiciones erróneas de las funciones y actividades que las mujeres y los hombres tienen en un contexto específico dentro de la sociedad, es decir, por una ceguera de género. La institucionalización de género en el Estado ha enfrentado desafíos. En general, los mecanismos de igualdad interpelan las ideas y los comportamientos tradicionales de relaciones sociales que no respetan los derechos y la autodeterminación de las personas, así como las concepciones sobre los modelos de desarrollo, la democracia y la gobernabilidad. Cuando los mecanismos de igualdad se crean en sociedades muy desiguales o fragmentadas, con Estados débiles, poco democráticos o ineficientes, estos se enfrentan a mayores resistencias al cambio en las concepciones que sustentan las políticas, la cultura organizacional y las formas de gestión, e incluso hacen frente también a escenarios con escasez de personas calificadas para la tarea. Las acciones y resultados que los mecanismos de igualdad puedan tener en cada país dependen de las características de los Estados, de las relaciones entre los poderes del Estado, de la legislación y de los procedimientos administrativos, de las concepciones que sustentan las distintas políticas y, sobre todo, de la legitimidad, el conocimiento especializado sobre el tema y la autoridad política al respecto. No obstante, ha habido progreso. En los últimos años, han aumentado los países que cuentan con leyes de igualdad y mecanismos institucionales para la transversalización de la perspectiva de género, y desde los años noventa se han creado mecanismos nacionales para el adelanto de la mujer y se han creado espacios formales para ellos en el aparato del Estado.

31 Políticas para Mejorar la disponibilidad de Tiempo para Mujeres
Políticas para compensar a las mujeres por los costos del cuidado familiar. Servicios públicos de guarderías: aumentan el numero de horas trabajadas por mujeres y facilitan acceso a empleo formal. Prolongar jornada escolar o reducir edad de ingreso al sistema escolar. Reducir tiempo que dedican mujeres a buscar energía o agua, especialmente en áreas rurales. Opciones de transporte publico para reducir costos de tiempo relacionados al trabajo fuera del hogar, especialmente para obreras que residen en la periferia.

32 Reducir discriminación en el Trabajo
32 Reducir discriminación en el Trabajo Políticas activas en el mercado de trabajo que permitan ingresar o reingresar a la fuerza de trabajo. Acción afirmativa para impulsar empleo asalariado de mujeres hasta un umbral critico. Eliminar trato discriminatorio en leyes y normas laborales Los mecanismos nacionales de adelanto para las mujeres o de igualdad han mostrado liderazgo en el posicionamiento y consecución de la agenda de género. Sin embargo, la voluntad política ha sido desigual y los recursos destinados tampoco han sido los suficientes. Esto ha limitado los esfuerzos y su capacidad de desarrollo para lograr mayores impactos. En general, estas instancias han hecho hincapié en la adopción de reformas a la ley, aunque hay evidentes esfuerzos hacia prácticas concretas y estrategias de implementación, desarrollo de capacidades, la socialización de la información, la prevención y los esfuerzos hacia el empoderamiento de las mujeres. Cuando se inició la puesta en marcha de los programas de igualdad había diferencias considerables entre los distintos países y subregiones, en términos de los mecanismos nacionales creados. Esta diferencias no sólo radicaban en la ubicación de la oficina en cuestión y el rango dentro de la estructura gubernamental, sino también en términos del reconocimiento del que gozaban como una entidad legítima de gobierno y de los roles, mandatos y responsabilidades que les fueron encomendadas. Muchos de los mecanismos nacionales han sido capaces de consolidar su presencia en los espacios públicos, pero todavía no se borran del todo algunos factores de riesgo, como las amenazas de una disminución de los recursos o la fusión con otros ministerios o subdivisiones políticas, y la existencia de amplios espacios públicos y privados no sensibilizados en materia de igualdad de género.

33 Gracias