Ana Laura Martínez Baranda Samantha Sánchez Martínez Octavio Mejía Cortez.

Presentación del tema: "Ana Laura Martínez Baranda Samantha Sánchez Martínez Octavio Mejía Cortez."— Transcripción de la presentación:

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2 Ana Laura Martínez Baranda Samantha Sánchez Martínez Octavio Mejía Cortez

3  Para usar este cuento necesitas:  Cada vez que te encuentres un botón con una decisión, presiona el que quieras para ir a un final diferente en la historia.  Si quieres volver a leer el cuento, presiona el botón de la casita al final.

4 Comienza con una niño llamada Mario al que todos querían, era listo, amable y tan simpático que incluso los maestros lo quería mucho. Un mal día el niño murió y lógicamente todos estaban muy conmocionados. Un día un estudiante gritó que Mario no estaba muerto, que estaba bien y vivo, sus demás compañeros comenzaron a seguirlo y a darle la razón, inclusive el maestro. Al terminar el año escolar, el maestro se las arregló para que le dieran su lugar en la foto de generación, pero al ver la foto se dieron cuenta de que ahí estaba Mario. Más pálido que los demás, pero igual sonreía. Después de esto, años más adelante cuando comenzaban las clases, se dieron cuenta de que siempre faltaba un asiento y había alguien más en la lista; y cada mes, alguien de la clase moría. Los alumnos intentaron solucionar esta calamidad haciendo como si una persona no existiera, y les estaba funcionando hasta que…

5 Un día un chavo nuevo entró a la escuela y le tocó en de clase número 3, donde estaba la maldición.

6 Arturo empieza a hablarle a una chava extraña a la que nadie más le hablaba. Esta chava llamada Carolina tenía un parche en un ojo. Arturo intenta ser amigo de ella, pero ella le dice que no debería acercársele, mientras que todos sus otros compañeros lo veían raro.

7 Como Arturo le hablaba normal a la chava, las muertes empezaron. Arturo tenía que elegir entre ignorar a Carolina o seguir a su lado. Era una decisión difícil puesto que si decidía seguir hablándole, la gente moriría, o ignorar a la chica que amaba… ¿Qué hago? Seguir hablándole a Carolina Ignorar a Carolina

8 Arturo decidió seguir hablando con la chica que amaba y por tal motivo continuaron las crueles muertes. Regresar a decisión

9 Al seguir las muertes, los chicos del salón, tenían que encontrar una solución y esta era encontrar a la persona sobrante en el salón o de otra forma las muertes continuarían. Esa persona sobrante ya está muerta. Encontrar la solución solos Pedir ayuda para encontrar la solución

10 Los estudiantes decidieron seguir buscando a la persona muerta en el salón sin ayuda de nadie.....al ser así continuaron las muertes. A fin de año descubrieron que ninguno de ellos era el que causaba las muertes, era alguien más de afuera, pero tampoco supieron nunca quién era. Al final terminó el año y terminó la maldición con él, pero nunca lograron detenerla. FIN Volver a decisión

11 La amiga de Arturo, Carolina, se quitó el parche para ayudar a sus compañeros a encontrar a la persona muerta, ya que ella tenía un poder especial en su ojo de ver cosas sobrenaturales. Volver a decisión No encontrar nada con el ojo Encontrar algo con el ojo

12 Por desgracia al quitarse el parche, Carolina no pudo ayudarlos del todo, ya que no se veía nada raro en el salón y supusieron que la persona muerta no era de ahí. Prefirieron dejar así las cosas e ignorar a alguien más. Terminó el año y los alumnos que sobrevivieron ese ciclo se sintieron aliviados, al fin había terminado esa maldición para ellos. FIN Volver a la decisión

13 Con la ayuda de Carolina pudieron encontrar a la persona muerta, que resultó ser la tía de Arturo, que trabajaba como maestra en el colegio.

14 A la tía de Arturo la dejaron descansar en paz, por fin, llevándola de regreso a la muerte. Resultó que nunca faltó una banca en el salón de clases, falto una banca pero en la sala de profesores. Vivieron felices y tranquilos los estudiantes de ese salón por el resto de sus vidas. FIN

15 Arturo se pone a pensar en el bienestar de todo el salón, y aunque le duele mucho decide dejarle de hablar a Carolina para que la muertes pararan. En ocasiones, Carolina y Arturo se encontraban saliendo de la escuela camino a su casa, Arturo solo la veía con tristeza y se alejaba. Después de unos días, el salón volvió a la normalidad. Al siguiente mes, las muertes pararon y los alumnos siguieron con sus clases y sus vidas normalmente. Así continuó el año escolar, hasta que terminó. Al terminar el año, Arturo se sintió muy feliz, pues podía volverle a hablar a la chica que amaba. Desde aquel día Carolina y Arturo nunca más se volvieron a separar FIN