Clase 4: El anhelo por el crecimiento espiritual

Presentación del tema: "Clase 4: El anhelo por el crecimiento espiritual"— Transcripción de la presentación:

1 Clase 4: El anhelo por el crecimiento espiritual

2 INTRODUCCIÓN Un deseo profundo de obtener mayores experiencias con Dios. La expresión de nuestra hambre espiritual. El apóstol Pablo siempre expresó sus deseos de alcanzar lo máximo que Dios tenía para él. Fil. 3:8-10: “Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo … a fin de conocerle...” Tiene que haber más. Debo creer que Dios tiene algo mayor para mi vida. ¿De qué tiene usted verdaderamente hambre? ¿Siente la Biblia aburrida? ¿Se aburre al orar? ¿Le cansa asistir a reuniones? Las motivaciones actuales. ¿Por qué vengo a la iglesia? ¿Por qué pertenezco?

3 a. La necesidad de una relación estrecha con el Espíritu Santo.
1. ¿Cree que Dios quiere que vivamos una vida poderosa? Si es así, ¿por qué la mayoría de los cristianos no muestran poder en su vida? 2. ¿Cree usted que estamos viviendo la vida abundante que Jesús vino a darnos? 3. ¿Ha sido su experiencia con Dios verdaderamente cautivadora o su intensidad ha disminuido a través del tiempo? 4. ¿Cómo debe ser el corazón de una persona que anhela una vida plena en Cristo?

4 ¿Por qué necesitamos experimentar al Espíritu Santo?
Ro. 8:26. Para conocer la voluntad de Dios. 2 Co. 12:9. Para vivir en victoria sobre nuestras debilidades. Ga. 5: Necesitamos ser llenos de… …amor para amar al insoportable, …gozo y paz para sobrellevar las pruebas más difíciles, …paciencia para saber esperar el tiempo oportuno de Dios, …bondad y benignidad para actuar como cristianos verdaderos, …fe para creer lo imposible, …mansedumbre para someter nuestro orgullo, …templanza para tener dominio propio. 2 Ti. 1:7-8. Para ser valientes a la hora de tomar decisiones en base a la Palabra de Dios. Hch. 1:8. Estamos naturalmente limitados y la obra de Dios es sobrenatural.

5 b. La búsqueda de experiencias con el Espíritu Santo.
El inicio para entrar en una relación más estrecha y profunda con el Espíritu. Lucas 11:9-13. Las tres actitudes esenciales para la búsqueda: 1. El que pide, recibe. Cómo y cuánto pedir. Jn. 3:34. 2. El que busca, halla. Persistencia en la búsqueda. 3. El que llama, se le abrirá. Valentía para golpear la puerta. Ej: Hno. Yabor, había que pedirle. ¿Cómo se siente al saber que Dios ha prometido darle todo lo que necesita para hacer lo que El pide?

6 c. Poniéndonos en acción.
¿Qué estamos haciendo o haremos para experimentar al Espíritu Santo? ¿Cómo podemos crecer en dependencia del Espíritu Santo?

7 Conclusiones Nuestra experiencia con Cristo está impulsada por el querer y la necesidad. Necesitamos el poder del Espíritu para ser transformados. No podemos cambiarnos a nosotros mismos. Una vida en el Espíritu es una vida plena, satisfecha, llena de gozo y confianza de que Dios tiene el control de todo.

8 Repaso – Verdadero o Falso
…… 1. Dios no da el Espíritu por medida; el que busca más tendrá más. V F …… 2. Las experiencias con el Espíritu Santo solo eran para los apóstoles. …… 3. Los ríos de agua viva los vierte el Espíritu Santo a los que le buscan con fe. V V …… 4. Cuando el Espíritu Santo llena a un creyentes con poder, nunca volverá a ser el mismo. …… 5. Debemos crecer no solo en llenura sino también en amplitud. V F …… 6. El Espíritu Santo no nos debe controlar a nosotros, somos nosotros los que debemos controlarlo a Él. V …… 7. Cuando tenemos experiencias con el Espíritu Santo nuestro carácter empieza a ser transformado y empezamos a manifestar el fruto del Espíritu. V …… 8. Hoy el mismo poder del Espíritu Santo que se manifestó en la Iglesia de Hechos está disponible para todo aquel que cree y lo busca.

9 Lucas 11:9-13: “Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá… Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”.