Buceando en el universo personal…

Presentación del tema: "Buceando en el universo personal…"— Transcripción de la presentación:

1 Buceando en el universo personal…
María Josefa Larraga

2 Mi centro… ¿Dónde está el centro, dónde mi centro,
dónde está el centro del cosmos? Desciendo a lo hondo de mi alma, y allí está el centro… Proyecto la mirada al corazón de la tierra, Alzo mi corazón a la inmensidad del firmamento, Comparto mi realidad relacional con todos los seres humanos, Me sumerjo en las profundidades de la oración, El centro polariza, absolutiza, totaliza mi alma y mi existencia. Comparto mi realidad relacional con todos los seres humanos, y allí está el centro… Me sumerjo en las profundidades de la oración, El centro polariza, absolutiza, totaliza mi alma y mi existencia. En él vivo, soy, siento y deseo morir… ¡En Jesucristo! Mi centro…

3 Me duele la noche… ¡Cómo me duele la noche y cómo la noche fascina
mi corazón enamorado! Miro la oscuridad y siento el vértigo del vacío; contemplo el vacío y siento la sinrazón de la nada… Me duele la noche… Pero contemplando la noche siento, también, la nostalgia del amor, de la verdad y de la libertad. Porque la noche reunifica las fuerzas del alma… ¡Me duele la noche Y me fascina la noche! Toda la unidad soñada desde la profundidad del ser, esta en la noche, en su misterio y en su nostalgia… Me duele la noche, me duele la infinita cercanía en la distancia ancestral…

4 Tierra virgen… Soy tierra virgen cuando amo; y tierra virgen
cuando siento; cuando recuerdo; cuando contemplo; cuando dialogo; cuando busco la verdad; cuando me dejo encontrar por ella… Soy tierra virgen, pascua de resurrección, flor de almendro y rocío en la mañana, viento suave y agua clara ¡Tierra virgen soy!... Tierra virgen soy, condición de tierra recién estrenada, virginidad original de amor, libertad virginal de un amor que me recrea ¡tierra en sazón!

5 Contemplación… Sumergirme en la contemplación
es el mayor de los placeres del alma: soñar junto al amor, amar en el amor, vivir en el amor, dejarme herir por el amor… En el acto pasivo de la contemplación amante, todo mi ser se unifica en el centro vivo de mi vida y de mi muerte… Yo misma soy contemplación, espacio de amor compartido en la fidelidad amante de quien me mira, encuentro de amor y agua cristalina de sus fuentes… Allí soy yo, allí encuentro la razón de mi vida, la razón del sentimiento amenazado de mi muerte…

6 Sentido de la relación…
Encontré en la relación la luz y la oscuridad, la verdad y la mentira la vida y la muerte… La relación reveló a mi vida más que ninguna otra realidad esencial, la bipolaridad de mi ser, y la tierra virgen donde todo crece… Hoy, cuando he sufrido y llorado, amado y mimado la relación, comprendo que, si la vida es relación y la relación camino de libertad amante, donde no existe relación no existe más que muerte. Creo en la relación porque me ayuda a morir en cada instante… La relación es tierra virginal donde mi vida y la vida del cosmos encuentran su razón de ser.

7 Escuchar la vida… La ternura de la vida conduce mi existencia
a escuchar con el corazón… Quiero escuchar con profundidad, con coherencia, con sabiduría, Con simplicidad y con amor agradecido a la vida misma… Escuchar dejando penetrar en mí la riqueza y la pobreza, la vulnerabilidad de los seres y la explosión de bondad, belleza y hermosura de cuanto existe… Quiero dejarme invadir, inundar, enriquecer, transformar y sanar, escuchando la vida: Profunda en su esencia, original en su amor e inmensa en la totalidad a donde nos lleva…

8 Perfume enamorado de los tilos…
He mirado los tilos con la mirada del alma en su verdor, y en la espléndida figura de su esencia… Los tilos me acercan al origen de mis días, a los amores más puros y a ternuras del corazón joven de mi abuelo, siempre importante en mi vida… Perfume derramado de tilo, esencia enamorada de mi ser para mi Señor, desde los recuerdos ancestrales de mi infancia… Los tilos han perfumado mi vasija, y en perfume enamorado para mi Señor han convertido, a las cinco de la tarde, mi vida serena y sencilla…

9 Verdes y cristalinas aguas…
que en vuestra esencia más pura traéis hoy para mí frescura y transparencia, posos de relación en vuestros cauces y, recuerdos vivos, del alma… Verdes y cristalinas aguas… Hay lugares que forman y conforman nuestra vida, los sentimientos más puros y las motivaciones más hondas… Recordamos, como los discípulos, el lugar, el día,y la hora de los sentimientos más grandes, de los encuentros más puros, de las determinaciones más claras… Verdes y cristalinas aguas, con vosotras, y en vosotras, soy verdad de amor, relación esencial y encuentro vivo. ¡Gracias porque sois tan claras!

10 Mi universo personal… En el fondo sin fondo de mi alma,
en el hondón de cuanto soy, está mi universo personal. Mi universo personal… El universo personal es mi lugar de relación íntima, de presencia serena del amor, y de la serena armonía del amor originario… El universo personal, que soy yo misma, en mi originaria intimidad y en la vulnerabilidad existencial de cuanto soy, es el espacio de mi felicidad y da sentido a mi búsqueda… En mi universo personal soy feliz ¡porque existo! Mi universo personal es testigo de la unificación existencial que busco y que quiero vivir. Es espacio para Dios y para todos…

11 El misterio de una vida…
Hoy, he cogido entre mis manos el MISTERIO de mi vida… he acariciado entre mis manos he orado entre mis manos El misterio de una vida… Hoy, he dejado en las manos de Dios el MISTERIO de mi vida… soy feliz… Hoy, he sentido la profunda soledad del despojo, y la profunda plenitud del encuentro…

12 Descubro tu rostro… Te descubro en la mañana,
cuando el sol besa mi corazón enamorado de ti y de la vida… Te descubro en la verdad escondida y sedienta de tu búsqueda, de la búsqueda que tú tienes sobre mí, del encuentro amoroso que siempre me regalas… Descubro tu rostro… Y allí, como luz proyectada en mi sombra enamorada, veo tu rostro, el rostro del amor, ¡tu rostro! oh amor…. Te descubro, oh amor, en las veredas polvorientas de mis días, allí donde mis pasos, en la oscuridad te buscan…

13 No te asustes, corazón mío…
del caparazón de polvo que nuca desaparece de ti… No te asustes de esas migajas que cubren tu suelo, por más esfuerzo que tú pones en tenerlo limpio y brillante… No te asustes cuando buscas la vida al margen de su centro… ¡porque eres barro! Eres vasija virgen y humus donde el amor asienta su misterio, pero eres barro también, ¡no lo olvides! No te asustes, corazón mío… ¡No pierdas de vista ese camino de polvo! Allí donde tú dejas de ser misterio de amor, dios es misterio de perdón, de libertad y de encuentro…

14 Un día te esperaré… Un día te esperaré en el olvido de todo,
en la plenitud de cuanto existe y en la nostalgia escondida, de un deseo… Un día te esperaré, en la presencia, en la nostalgia y en la permanencia del amor… Yo te esperaré, responde una voz desde la profundidad de todos los cielos y desde la cercanía confiada de la fe, yo, tu Señor, te esperaré a ti. Un día te esperaré, dice el AMOR, allí, en el camino de la desnudez total, en los límites de la ausencia y en el camino de la plenitud de tus deseos…

15 Volveré en la tierra… Volveré en la soledad de la tierra
y en su olor cálido y penetrante… Volveré en la fertilidad de la tierra y en su renacer constante… Volveré cuando la tierra sea germen sea trigo de cosecha y promesa, cada tarde… Volveré en la tierra, en esa criatura vulnerable pisada por todos, y alabanza siempre…