23 de OCTUBRE.- Pensamiento del día. También he aprendido a ser sincero. !Qué descanso! Ya no es necesario seguir escondiéndome. Ya no es necesario contar historias. Ya no es necesario pretender que soy lo que no soy. Mis cartas están sobre la mesa, listas para que las vea todo el mundo. Soy quien soy y eso es lo que soy. He tenido un pasado desagradable. Lo siento, es cierto; pero ya no puede cambiarse. Todo eso pertenece al ayer y ya pasó. Pero ahora mi vida es un libro abierto. Puede venir quien sea y verlo. Estoy tratando de hacer lo mejor que pueda. Con frecuencia fallaré, pero no seguiré excusándome. Me enfrentaré a las cosas tal como son, y no escaparé.- “¿Soy realmente sincero?”
Meditación del día. Aunque parezca una paradoja, debemos creer más en la fuerzas espirituales que no podemos ver que en las cosas materiales que podemos ver, si hemos de vivir verdaderamente. En último análisis, el universo consiste más del pensamiento o de la fórmulas matemáticas que de la materia, tal como la comprendemos. Entre hombre y hombre, solo las fuerzas espirituales bastarán para conservarlos en armonía. Conocemos estas fuerzas espirituales, porque podemos ver sus resultados, aunque no podemos verlas a ellas. Una vida transformada (una nueva personalidad) resulta de esas fuerzas espirituales que no se ven, operando en nosotros y a través de nosotros.
Oración del día. Ruego creer en lo que no pueda ver. Pido que quede convencido por los resultados que veo, realizados por Aquel que está oculto a los ojos humanos.