¿Qué es
Cierto día entré apurado y con mucho apetito a un restaurante. Escogí una mesa bien alejada del movimiento, porque quería aprovechar los pocos minutos que tenía ese día, utilizarlos para comer y concretar algunas ideas de programación, de un sistema que estaba desarrollando; además tenía ganas de planear mis vacaciones, que desde hace mucho tiempo no sé lo que son.
Pedi un filete de salmón con alcaparras en mantequilla y ensalada con jugo de naranja, pues al final de cuenta, ‘hambre es hambre’ y ‘régimen es régimen’, ¿no? Abrí mi notebook y al mismo instante me llevé un susto, cuando escuché una voz bajita detrás de mí...
-”Señor, ¿me da unas monedas?” -”No tengo, pequeño”. -”Señor, ¿me da unas monedas?” -”No tengo, pequeño”. - “Sòlo una monedita, para comprar un pan”. - “Está bien, te compro uno”. - “Sòlo una monedita, para comprar un pan”. - “Está bien, te compro uno”.
Mi casilla de correos estaba llena de s. Quedé distraído leyendo poesías, lindos mensajes, riendo de esas locas bromas. Ahhh... esa música me llevaba a Londres, recordando un hermoso tiempo pasado.
Ahí, en ese instante, tuve la mayor prueba de ‘virtualismo’ insensato en que vivimos todos los días, en cuanto a la cruel realidad y hacemos de cuenta que no la percibimos!