En la antigüedad, desde los tiempos babilónicos (siglo XVIII ac) se designaban los días por los astros más conocidos. Comenzando con el sol (el domingo),

Slides:



Advertisements
Presentaciones similares
PRIMERA COMUNIÓN Hoy vienes a apuntar a tu hijo para que aprenda a hacer comunión con Dios y con los hermanos, sobre todo con los más necesitados. No le.
Advertisements

LA SANTA MISA Estructura y partes.
INTRODUCCIÓN Cristo murió en la cruz para cumplir la ley y darnos vida en abundancia para que pudiésemos alcanzar la paz verdadera.
EL SACRAMENTO DE LA EUCARISTÍA
2º domingo de Pascua La Comunidad.
¿Sabéis de donde viene la MISA que celebramos cada domingo?
CREER EN LA PAZ QUE NOS TRAE JESÚS. Mayo 1 Juan 20,19-31 CREER EN LA PAZ QUE NOS TRAE JESÚS. Mayo 1 Juan 20,19-31.
Participar en el sacrificio de Cristo
CREER EN LA PAZ QUE NOS TRAE JESÚS.
Domingo 5º de Cuaresma Ciclo A Día 10 de Abril de 2011.
Mientras cenaban de T. L. de Victoria nos evoca el DON pascual que es la Eucaristía Mientras cenaban de T. L. de Victoria nos evoca el DON pascual que.
1.- Ritos Iniciales Son ritos introductorios a la celebración y nos preparan para escuchar la palabra y celebrar la eucaristía.   Llegamos al templo y.
Domingo tercero de Cuaresma
Domingo 2º de Pascua Día 19 de Abril de 2009.
Domingo 2º de Cuaresma Ciclo B Día 8 de Marzo de 2009.
noticia Por eso la Iglesia nos invita a la alegría. Y por eso tenemos esperanza en nuestra propia resurrección.
Domingo 6º de Pascua Ciclo B Día 13 de Mayo de 2012.
5 de Octubre Día del Camino
“Mientras cenaban” de T. L. de Victoria, evoca las Eucaristías pascuales “Mientras cenaban” de T. L. de Victoria, evoca las Eucaristías pascuales PASCUA.
Domingo 2º de Pascua Ciclo B Día 15 de Abril de 2012.
Jesús camina con nosotros…
La Solemnidad de Santa María Madre de Dios es la primer Fiesta Mariana que apareció en la Iglesia Occidental.
SEMANA SANTA … tras los pasos de JESÚS
2º domingo de Cuaresma Ciclo A Día 20 de Marzo de 2011.
EL ESPIRITU SANTO LLEGA A LA IGLESIA
NUESTRA SEÑORA DE LA SALUD
Una Iglesia Eucarística
2º Domingo de Pascua 2º Domingo de Pascua (instituido por Decreto de la Santa Sede de 23 de mayo de 2000 por indicación de Juan Pablo II) (instituido.
Texto: Extraído por D. Amundarain del libro de Joseph Ratzinger, «Jesús de Nazaret”. Desde la entrada en Jerusalén hasta la resurrección» y de otros. Presentación:
Conozca Su Biblia Lección 1. Conozca Su Biblia Lección 1.
Ciclo A Segundo domingo de PASCUA Segundo domingo de PASCUA Música: Aleluya, en arameo, de los primeros siglos del cristianismo.
Proyecto de Religión Educación Primaria.
Parte de la Santa Misa A.RITOS INICIALES
PARROQUIA NUESTRA SEÑORA DE LA SALUD
17 Catequesis sobre la Fe Mons. Esteban Escudero Obispo de Palencia.
«Lo que era visible en nuestro Salvador ha pasado a sus sacramentos»
PAN BAJADO DEL CIELO Agosto 13 Juan 6,41-51 JHS.
25 Catequesis sobre la Fe Mons. Esteban Escudero Obispo de Palencia
Dichosos los que creen Sin haber visto Juan 20,19-31
Eucaristía.
Todo Domingo es Día del Señor Resucitado. Viviendo aún el clima de Pascua, nos reunimos hoy en nombre de Jesús, para proclamar nuestra fe en la Resurrección.
EL DOMINGO Historia Teología Tareas pastorales.  La celebración del misterio de Cristo en el curso del año, aunque gira en torno a la máxima solemnidad.
Coment. Evangelio Jn Pentecostés Ciclo A. 8 Junio Jesús Sanz Montes. Arzobispo Oviedo Música: BSO Braveheart for the love Montaje: Eloísa.
“Haced esto en memoria mía”
2º DOMINGO DE PASCUA ¡Señor mío y Dios mío!.
¿AQUIÉN SEGUIR? TEXTO:2 TIM.3:
CREER EN LA PAZ QUE NOS TRAE JESÚS.
¿Alguien sabe qué sucedió después de esos 40 días?
“Mientras cenaban” de T. L. de Victoria, evoca el DON pascual que es la Eucaristía “Mientras cenaban” de T. L. de Victoria, evoca el DON pascual que es.
Mi carne es verdadera comida Y mi sangre es verdadera bebida
Cincuentena Pascual Pastoral para la religiosidad popular.
19 de Mayo de 2013 SOLEMNIDAD DE PENTECOSTÉS Evangelio: Juan 20,
Semana Santa En la Semana Santa se celebran los misterios de salvación realizados por Cristo en los últimos días desde su entrada mesiánica en la ciudad.
Tema 1 El cristianismo, ¿mensaje universal?
¡Sí, en verdad, ha RESUCITADO!
Música: “Dei Genitrix” sXIII
Por el Espíritu, besemos las llagas del Resucitado “Mientras cenaban” de T. L. de Victoria nos evoca la Eucaristía Pascual.
Los Apóstoles fueron discípulos de Jesucristo, escogidos por El para ser testigos de su predicación y de sus milagros, depositarios de su doctrina, investidos.
Antes de ser inmolado en la cruz el Viernes santo, Jesús instituyó el sacramento que perpetúa su ofrenda en todos los tiempos. En cada santa misa, la.
Tercer Mandamiento Santificar las fiestas
Coment. Evangelio Dom. Pentecostés Ciclo B. 24 mayo Jesús Sanz Montes. Arzobispo Oviedo Música: Música Instrumental para orar Montaje: Eloísa DJ.
Sacramentos 57 Eucaristía 27 Misa 17 Después de la Comunión.
Por el Espíritu, besemos las llagas del Resucitado “Mientras cenaban” de T. L. de Victoria nos evoca la Eucaristía Pascual “Mientras cenaban” de T. L.
Después de morir, Jesús resucitó de entre los muertos al tercer día: viernes, sábado, primer día de la semana judía.
Es memorial de un acontecimiento: del paso salvador de Dios por la historia de la humanidad. LA LITURGIA: diálogo entre Dios y el hombre,
Tercer Mandamiento: Santificar las Fiestas Padre Marcelo Rivas Sánchez Cumaná, El Domingo no es obligación sino necesidad.
Ascensión del Señor Jesús se va al cielo, pero se queda con cada uno de nosotros, está con su Iglesia hasta el fin del mundo. Jesús quiere que contagiemos.
Entremos en el Cenáculo de nuestro interior escuchando la música de Arvo Pärt II de PASCUA Monjas de Sant Benet de Montserrat.
2º domingo de Pascua La liturgia nos muestra que la COMUNIDAD CRISTIANA es un espacio privilegiado de "Encuentro" con Jesús Resucitado. Todo Domingo.
PARROQUIA NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN PALMIRA II DOMINDO DE PASCUA.
Transcripción de la presentación:

En la antigüedad, desde los tiempos babilónicos (siglo XVIII ac) se designaban los días por los astros más conocidos. Comenzando con el sol (el domingo), seguían la Luna, Marte, Mercurio, Júpiter, Venus y Saturno. Este último día, por influencia de los judíos, había pasado a llamarse sábado, por el Sabbat o día de descanso. En cuanto al tiempo litúrgico tratamos ahora lo correspondiente a la semana.

En cuanto a la liturgia en la semana tenemos un día especial dedicado al Señor, que llamamos precisamente “el día del Señor”. En latín se dice: “Dies Domini”. De aquí se derivó la palabra: Domingo. El día más grande para el cristianismo es el de la resurrección del Señor. Por eso quiere la Iglesia que lo celebremos todas las semanas en el día del domingo. Y si lo celebramos es porque Cristo vive resucitado entre nosotros.

"La Iglesia, desde la tradición apostólica que tiene su origen en el mismo día de la resurrección de Cristo, celebra el misterio pascual cada ocho días, en el día que se llama con razón “día del Señor” o domingo" (SC 106). Dice el conc. Vat II:

El domingo es el día por excelencia de la Asamblea litúrgica, en que los fieles "deben reunirse para, escuchando la palabra de Dios y participando en la Eucaristía, recordar la pasión, la resurrección y la gloria del Señor Jesús y dar gracias a Dios, que los “hizo renacer a la esperanza viva por la resurrección de Jesucristo de entre los muertos” (SC 106). Sigue diciendo:

“El día del Señor, el día de la Resurrección, el día de los cristianos, es nuestro día. Por eso es llamado día del Señor: porque es en este día cuando el Señor subió victorioso junto al Padre. Si los paganos lo llaman día del sol, también lo hacemos con gusto; porque hoy ha amanecido la luz del mundo, hoy ha aparecido el sol de justicia cuyos rayos traen la salvación”. Decía san Jerónimo:

Automático

que hoy a todos nos invita

que hoy a todos nos invita

El amor que nos reúne y nos une en comunión

que nos llena de esperanza en la paz de su perdón.

que nos llena de esperanza en la paz de su perdón.

Es domingo nuestra fiesta y la fiesta del Señor,

que hoy a todos nos invita al banquete del amor.

Hacer CLICK

Porqué y cómo comenzó en la Iglesia el día del domingo. Algunos se preguntan por qué el domingo es el día de fiesta, cuando en el Antiguo Testamento Dios había mandado celebrar el sábado.

Parece que el mismo Señor quiso cambiar el día de fiesta en la semana, pues la religión cristiana no es para un pueblo determinado sino que está destinada a todas las naciones, razas y culturas. No sólo resucitó el “primer día de la semana”, sino que tuvo un acto especial festivo con sus discípulos. Y no lo volvió a tener hasta “ocho días después”.

Pero también les dio una misión: “Como el Padre me envió, así os envío yo a vosotros”. Y les infundió el Espíritu Santo dándoles el poder de perdonar, porque en esta vida no puede haber una reunión festiva religiosa si no va acompañada de perdón. En aquella primera reunión festiva Jesús les habló y comió con ellos.

Este resaltar en el evangelio estos dos encuentros festivos de Jesús resucitado quizá sea porque, cuando se escribía el evangelio, ya se celebraba especialmente el domingo en la primitiva comunidad cristiana. Tal es el acontecimien- to central de la historia de la salvación, que marcó para siempre el “primer día de la semana”.

En aquellas dos reuniones festivas Jesús, mostrando a sus discípulos sus llagas gloriosas, sitúa la cruz en el centro de la reunión ritual de los cristianos y, exigiendo la fe a Tomás, requiere que esta asamblea sea de fieles creyentes. Así comenzó a celebrarse el domingo, día del Señor.

San Pablo en la 1ª carta a los corintios, por el año 57, relaciona con la reunión de la semana la colecta por los hermanos de Jerusalén. Dice: “Que cada uno de vosotros aparte el primer día de la semana lo que haya podido ahorrar”. En los Hechos de los Apóstoles se expone alguna larga homilía de san Pablo en la reunión de la “fracción del pan” del domingo.

Esta celebración festiva del domingo era una realidad a finales del siglo I. San Ignacio de Antioquía, hacia el año 107, decía: “Los que vivían conforme al antiguo orden de cosas han venido a la nueva esperanza, no observando ya el sábado, sino el domingo, día en que alboreó nuestra vida por Cristo y por su muerte”.

Hay otro escrito cristiano de principios del siglo II, la Didajé, que habla sobre la asamblea de los fieles. Hasta un autor pagano, Plinio el joven, declara por el año 112 sobre los cristianos que se reunían el día primero de la semana. Por lo tanto parece ser ya un día fijo para los cristianos.

Poco después san Justino, muerto en el año 165, tiene un texto clásico en la historia de la misa: “El día que se llama del sol (el domingo), se celebra una reunión de todos los que viven en las ciudades o en los campos, y se leen los recuerdos de los Apóstoles o los escritos de los profetas, mientras hay tiempo”. Y comenta cómo se desarrolla la misa, semejante a la actual en sus pasos generales.

“Celebramos esta reunión general el día del sol, por ser el primero, en que Dios, transformando las tinieblas y la materia, hizo el mundo; y también porque es el día en que Jesucristo, Nuestro Salvador, resucitó de entre los muertos; pues hay que saber que le entregaron en el día anterior al de Saturno (sábado), y en el siguiente, que es el día del sol, apareciéndose a sus Apóstoles y discípulos, nos enseñó esta misma doctrina que exponemos a vuestro examen. San Justino explica porqué celebramos especialmente el domingo:

Por lo tanto la fiesta del domingo no es algo que se hayan inventado los papas más o menos modernos, sino que viene de Jesucristo, los apóstoles y sus sucesores. Y eso que al principio, cuando la mayoría eran judíos o vivían en Palestina era un problema por ser día de trabajo, ya que la fiesta semanal era el sábado.

Al principio, cuando se convertían los que eran judíos, seguían celebrando el sábado por respeto a su pueblo, pero también celebraban el domingo en honor a Nuestro Señor. Sin embargo, cuando comenzaron a estar en Roma, lo tenían un poco más fácil, pues los romanos celebraban al sol, cuya fiesta es el domingo, “día del sol”.

Los emperadores celebraban el “día del sol”, aunque propiamente no era día de descanso. Los cristianos, en tiempos de persecuciones, se reunían en las catacumbas para celebrarlo dignamente. Hasta que llegó Constantino. No era cristiano, (su madre sí, era santa Helena), pero estimaba a los cristianos. Como muchos no entendidos en religión mezclaba Cristo con el sol.

Fueron el papa y los obispos quienes promovieron el culto a Cristo, como el verdadero sol. Entonces el emperador Constantino, el año 321, dio una ley ordenando el descanso el “día venerable del sol”. Con ello los cristianos pudieron celebrar con libertad y solemnidad el día del Señor.

Ha habido cierta confusión en algunos, como si la fiesta que los judíos celebraban (y celebran) el sábado, los cristianos la hubiésemos trasladado al domingo. Ya san Ignacio de Antioquía, a principios del siglo II, decía que no se pueden hacer componendas, no hay continuidad. Decía: el sábado se celebra una cosa y nosotros el domingo celebramos otra cosa.

El sábado consistía en una cesación del trabajo; y el valor religioso lo recibía por la relación a la alianza de Moisés. El domingo consiste esencialmente en la conmemoración presente de la resurrección del Señor y en la espera de su retorno. Por eso se llama día del Señor, como ya lo dice el Apoca- lipsis.

“Día del Señor”, como dije, proviene de la palabra latina: “Dies Domini” o “dominicus”. De aquí proviene la palabra: domingo, dimanche, domenica, etc. Desde el siglo V todos lo llamaban día del Señor; pero aún no era fiesta obligatoria. Fue en el siglo VI cuando se decretó como obligación: el descanso y la misa dominical. El Conc. Vat II lo ha reafirmado, para que se celebre dignamente el día del Señor.

Es vivir la presencia de Cristo resucitado en la Eucaristía, participando en la caridad al reunirse la asamblea; pero al mismo tiempo es una espera en su retorno, que vivimos en esperanza. Por todo ello es una fiesta, fiesta grande. Celebramos, por lo tanto, la resurrección del Señor en una espera de su retorno.

es el día del Señor. Automático

en la mesa de Jesús.

Dios no quiere caras tristes, no, no.

Dios sí quiere más sonrisas sí, sí;

Dios no quiere desunión.

Dios sí quiere más amor.

Hoy es fiesta, fiesta grande, es el día del Señor.

en la mesa de Jesús. Hacer CLICK

– Para el sábado había división de opiniones. En algunos lugares era como fiesta preparando la del domingo; pero en otros lugares prevalecía el sentido de penitencia como mejor preparación. Y como el domingo es fiesta grande dentro de la semana, ya desde muy antiguo el oficio dominical que recitaban (y recitan) los monjes y otras personas comienza con las primeras vísperas.

Ya por el siglo X el sábado era un día dedicado a la Santísima Virgen. Y así ha quedado, de modo que en la liturgia, cuando en el sábado de tiempo ordinario no hay una memoria obligatoria, en muchos sitios se dice la misa en honor a María, como una preparación para el día del Señor. También era una tradición rezar un oficio de horas especial en honor a María.

Pero sobre todo el viernes, debido al recuerdo de la Pasión de Jesucristo, para unirnos a Cristo que murió por nosotros en la cruz. También los primeros viernes como reparación al Corazón de Jesús, reparación a ese amor que se manifestó sobre todo por su muerte. Dentro de la semana había dos días que tradicionalmente eran más de ayuno o de penitencia: el miércoles y el viernes.

Había ayunos preceptuados y días de abstinencia. Hoy la vida social ha cambiado mucho en comparación de cuando la mayoría se dedicaba a la agricultura. La idea y los sentimientos deben ser los mismos: necesitamos hacer penitencia y aumentar en el amor. Las formas cambian. Todavía quedan, especialmente los viernes de cuaresma como abstinencia, para que recordemos la necesidad de hacer penitencia para ir a Dios.

Va exponiendo varias cosas de esto que hemos dicho y pide a los católicos, no sólo que celebremos el domingo, sino que lo santifiquemos. Esto es porque para muchos es un día de diversión, pero no lo toman como un día santo, para que nos santifique. El papa Juan Pablo II escribió una carta pastoral sobre el día del Señor, sobre la santificación del domingo.

Debemos recordar que el domingo es para manifestar nuestra fe; manifestarla gozosamente porque celebramos a Cristo resucitado; manifestarla en solidaridad con todos los demás. Ciertamente que debe ser un día de descanso, pues hay gentes que se cansan más con lo que hacen el domingo.

Lo celebramos en la mesa del Cuerpo del Señor en ese encuentro fraterno. Quizá vamos porque es un precepto, pero debemos ir sobre todo porque es una exigencia de la vida cristiana. Dios nos invita. Y una señal eran y pueden ser las campanas de la parroquia. El domingo es para manifestar todos juntos que somos peregrinos que vamos hacia Dios. Por eso nos reunimos en el templo, que es la casa del Señor.

Automático Hay una casa muy cerca en mi barrio. Es la casa del Señor.

Tiene las puertas abiertas, un sagrario y un altar, señal de amor.

Los domingos en la torre las campanas din, don, dan,

Din, don, dan, din, don, dan; el convite va a empezar.

Los domingos los amigos nos juntamos a rezar,

a rezar, a cantar, a vivir en hermandad.

AMÉN