“Jugadores de golf” Miguel-A.
Dos mujeres jugaban a golf una mañana soleada de primavera Dos mujeres jugaban a golf una mañana soleada de primavera. De pronto, vieron cómo la pelota, lanzada por una de ellas, se dirigía directamente hacia un grupo de hombres que jugaban en el siguiente hoyo.
La pelota golpeó a uno de los hombres quien, de inmediato, juntó ambas manos, las colocó en su entrepierna, y cayó al suelo rodando.
La mujer corrió hasta donde estaba el herido, y comenzó a pedir disculpas. Luego le explicó que era quiropráctica de profesión, y le ofreció su ayuda para eliminar el dolor: - Por favor, déjeme ayudarlo. Soy quiropráctica, y sé cómo quitarle el dolor, si usted me lo permite.
- ¡Ouch, auuuu!. ¡Noooo! -contestó el hombre mientras permanecía en posición fetal, tirado en el césped con las manos en su entrepierna-. ¡Estaré bien enseguida! ¡Ouch, auuuu! El dolor se me pasará en unos minutos. Ella insistió tanto que, finalmente, él le permitió ayudarlo.
Gentilmente, le separó las manos, le desabrochó los pantalones, puso sus manos dentro, y comenzó a masajear.
- ¿Se siente mejor ahora? -preguntó la dama. - ¡Me siento fantástico! -contestó el hombre-. ¡Pero la uña del dedo de la mano me sigue doliendo!.