SEGUIRÁ SIEMPRE AL LADO DE LOS DÉBILES Lectio divina Domingo X T. O. Corpus Christi Ciclo B. 30 Mayo 2015 Secretariado Dioc. Cádiz y Ceuta Música: Ubi Caritas Montaje: Eloísa DJ Avance Manual

Oración inicial Gracias Señor, porque tu amor hacia nosotros no tiene límites, no cesas de demostrarnos tu amor y tu cercanía, no te cansas de ser el Dios cercano que nos amas de manera gratuita. Por amor, te has quedado en la Eucaristía, y siempre nos estás esperando para transformarnos, para que encontremos en Ti el amor y la paz.

TEXTO BÍBLICO Mc.14.12-16, 22-26 El primer día de los Ácimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dijeron a Jesús sus discípulos: «¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua?». Él envió a dos discípulos diciéndoles: «Id a la ciudad, os saldrá al paso un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidlo, y en la casa adonde entre, decidle al dueño: “El Maestro pregunta: ¿Cuál es la habitación donde voy a comer la Pascua con mis discípulos?”. Os enseñará una habitación grande en el piso de arriba, acondicionada y dispuesta. Preparádnosla allí». Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había dicho y prepararon la Pascua.

Después de cantar el himno, salieron para el monte de los Olivos. Mientras comían, tomó pan y, pronunciando la bendición, lo partió y se lo dio diciendo: «Tomad, esto es mi cuerpo». Después tomó el cáliz, pronunció la acción de gracias, se lo dio y todos bebieron. Y les dijo: «Esta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos. En verdad os digo que no volveré a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios». Después de cantar el himno, salieron para el monte de los Olivos.

lectura ¿Qué dice el Texto?

Jesús creó un clima especial en aquella cena de despedida que compartió con los suyos. Sabía que era la última. Quería dejar bien grabado en su recuerdo lo que había sido su vida: pasión por Dios y entrega total a todos.

Para Jesús era el momento de la verdad Para Jesús era el momento de la verdad. En esa cena se reafirmó en su decisión de ir hasta el final en su fidelidad al proyecto de Dios.

Seguiría siempre al lado de los débiles, moriría enfrentándose a quienes deseaban otra religión y otro Dios olvidado del sufrimiento de la gente. Daría su vida sin pensar en sí mismo. Confiaba en el Padre. Lo dejaría todo en sus manos.

Reafirmarnos en nuestra opción por vivir siguiendo sus pasos. Celebrar la eucaristía es hacer memoria de este Jesús, grabando dentro de nosotros cómo fue Él hasta el final. Reafirmarnos en nuestra opción por vivir siguiendo sus pasos. Tomar en nuestras manos nuestra vida y compromisos para intentar vivirlos hasta las últimas consecuencias.

Celebrar la eucaristía es, sobre todo, decir como Él: Ésta vida mía no la quiero guardar exclusivamente para mí. No la quiero acaparar sólo para mi propio interés. Quiero pasar por esta tierra reproduciendo en mí algo de lo que Él vivió. Celebrar la eucaristía es, sobre todo, decir como Él:

Sin encerrarme en mi egoísmo, contribuyendo desde mi entorno y mi pequeñez para hacer un mundo más humano, donde Dios sea conocido y amado.

Es fácil hacer de la eucaristía el centro de la vida, si te acercas con la convicción clara de recibir al mismo Jesucristo, hecho pan compartido, para alimentar nuestra vida.

Esto solo es posible si te acercas desde la fe, no desde el cumplimiento, la rutina… Hoy es posible vivir la eucaristía, si antes te preparas para ello leyendo y meditando las lecturas.

No lo dejes para otro momento. Empieza ya.

¿Qué me dice el Señor en el Texto? meditación ¿Qué me dice el Señor en el Texto?

¿Agradeces esta entrega de Jesús? La Eucaristía es la donación total de Jesús, más allá de la muerte, para todos los tiempos, para todas las personas. ¿Agradeces esta entrega de Jesús? ¿Eres conscientes y vives que tu seguimiento a Jesús debe ser una entrega generosa para el bien de los demás?

¿Qué es la Eucaristía para ti? ¿Qué lugar ocupa en tu vida? Es el hambre de vida, hambre de amor, hambre de eternidad. Jesús nos da este alimento, es Él mismo el pan vivo que da la vida al mundo. El hombre lleva en sí un hambre que no puede ser saciado con el alimento ordinario. ¿Qué es la Eucaristía para ti? ¿Qué lugar ocupa en tu vida?

El comulgar, el recibir el Cuerpo del Señor, ¿lo vives, como un momento especial y único? ¿Cómo te preparas? ¿Cómo es tu acción de gracias?

“…habíale dado el Señor tan viva fe, que cuando oía decir a algunas personas que quisieran ser en el tiempo que andaba Cristo en el Mundo, veía entre sí, pareciéndole que teniéndole tan verdaderamente en el Santísimo Sacramento como entonces, que más se les daba”. Medita este pensamiento de Santa Teresa y pídele que te ayude a vivir tu fe en la Eucaristía:

¿Qué respondo al Señor que me habla en el Texto? oración ¿Qué respondo al Señor que me habla en el Texto?

Hoy lleva a la oración estas palabras del Papa Francisco. El Cuerpo del Señor hace de nosotros una cosa sola, una sola familia, el pueblo de Dios reunido en torno a Jesús, Pan de vida.

Si adoráis a Cristo y camináis detrás de Él y con Él, vuestra Iglesia diocesana y vuestras parroquias crecerán en la fe y en la caridad, en la alegría de evangelizar.

Si adoráis a Cristo, seréis una Iglesia en la cual padres, madres, obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos, consagrados, catequistas, niños, ancianos y jóvenes caminan juntos uno a al otro, se sostienen, se ayudan, se aman como hermanos, especialmente en los momentos de dificultad.

María, nuestra Madre, Mujer Eucarística, os ayude siempre a permanecer unidos a fin de que, por medio de vuestro testimonio, el Señor pueda seguir dando la vida al mundo.

¿Cómo reflejo en mi vida lo que me dice Dios en el Texto? contemplación ¿Cómo reflejo en mi vida lo que me dice Dios en el Texto?

En la Eucaristía se comunica el amor del Señor por nosotros: un amor gratuito, siempre a disposición de toda persona hambrienta y necesitada de regenerar las propias fuerzas.

Vivir la experiencia de la fe significa dejarse alimentar por el Señor y construir la propia existencia no sobre los bienes materiales, sino sobre la realidad que no perece: los dones de Dios, su Palabra y su Cuerpo.

Si miramos a nuestro alrededor, nos damos cuenta de que existen muchas ofertas de alimento que no vienen del Señor… dinero, éxito, vanidad, poder, orgullo… El alimento que nos ofrece el Señor es distinto de los demás, ¿dónde quieres alimentarte? ¿buscas el alimento en la mesa del Señor?

Contempla a Jesús en la mesa con los discípulos, celebrando la fiesta de la Pascua… El amor de Jesús nunca defrauda, porque Él no se cansa de amar, de perdonarnos, no se cansa de abrazarnos. Jesús nos amó, nos ama, a cada uno de nosotros hasta el extremo.

La fiesta del Corpus Christi es la fiesta en la que la Iglesia alaba al Señor por el don de la Eucaristía. Cuando la adoración del Señor es sustituida por la adoración del dinero, del poder…, se abre camino al pecado, al interés personal y al abuso. Cuando no se adora a Dios, al Señor, se llega a ser adoradores del mal.

acción ¿A qué me comprometo?

Cada Eucaristía es la actualización sacramental e incruenta de la entrega de Jesús. Cuida tu vivencia de la Eucaristía y prepárate conscientemente para recibir a Jesús.

La Eucaristía es “acción de gracias” La Eucaristía es “acción de gracias”. Procura que haya momentos del día que sean actos de agradecimiento al Señor por quedarse con nosotros.

Lleva a alguna persona el pan de la Palabra y ayuda a alguna que lo necesite. No te conformes con la ayuda del pan material. Haz todo lo posible para que también se alimente del Pan que da la Vida eterna.

Procura que a los enfermos, necesitados e impedidos nunca les falte el Pan de la Eucaristía. Avisa en tu parroquia para que les lleven la Sagrada Eucaristía. FIN