Francisco Coll Francisco Coll Una vida asentada sobre roca firme
Mamá, quiero ser sacerdote!
Su alma grande albergaba siempre deseos sublimes.
Se fue forjando desde sus primeros años…
Ese pirineo agreste que le vio nacer,
… y se acostumbró a trabajar para su sustento …
Los días grises, no le hacían vacilar …
Su celo apostólico le devoraba …
Cuando la noche oscura le parecía interminable...