Taller de Pastoral Vocacional

¿Qué es la Pastoral Vocacional?

Por mucho tiempo se pensó que la Pastoral Vocacional era “reclutar” a jóvenes para la vida sacerdotal o consagrada. Nos llamaban los “roba chicos”

Desde esa perspectiva, la Pastoral Vocacional era cosa de unos pocos y la comunidad parroquial no tenía nada que ver en esto.

Desde hace algunas décadas, la Iglesia se ha ido renovando y ahora descubre aspectos nuevos de la Pastoral Vocacional

La Pastoral Vocacional entiende que su misión es anunciar la entera vocación del hombre

Esto significa: a) Ayudar a que cada hombre redescubra su dignidad como persona, creado a imagen y semejanza de Dios.

b) Que todos encuentre los medios para que lleguen a una opción libre y alegre en su servicio.

c) Que los hombres redescubramos nuestra relación con el mundo como señor, con los hombres como hermanos y con Dios como hijos, para poder vivir dentro del amor Trinitario.

Los Obispos nos dicen ahora que la Pastoral Vocacional “es la acción de toda la comunidad cristiana, en favor de todas las vocaciones, a fin de que la Iglesia sea edificada según la plenitud de Cristo y conforme a la variedad de los carismas de su Espíritu”.

Ahora toda la comunidad tiene la tarea de promover las tres vocaciones específicas, la laical, la religiosa y la sacerdotal.

Aunque la Pastoral Vocacional promueve todas las vocaciones, de manera especial busca suscitar, promover y acompañar las vocaciones sacerdotales y religiosas, por ser estas urgentes para la Evangelización.

La comunidad parroquial es como el “vivero” donde van a florecer las vocaciones que la Iglesia necesita.

¿Qué ambiente hay en el vivero para que una planta florezca? ¿Qué ambiente necesitamos en una comunidad para que una vocación florezca?

Nuestros Pastores nos enseñan que la Pastoral Vocacional es de TODOS, y toda acción pastoral debe ser vocacional.

El Papa Juan Pablo II nos pedía al iniciar este nuevo milenio, que todas la Iglesias del mundo tuviéra-mos una pastoral vocacio-nal amplia y capilar, que fuera capaz de llegar a las parroquias, a los centros educativos y a las familias. Con esto se buscaría provocar una reflexión atenta sobre nuestra vida y la respuesta que desde ella le damos a la llamada Dios.

Nuestro Arzobispo, Don Francisco Robles Ortega, en su orientación pastoral Jesucristo, Camino, Verdad y Vida, toma esta cita de su Santidad y nos invita a trabajar decididamente en el fortalecimiento de la Pastoral Vocacional Diocesana. Ésta también viene siendo una de las opciones pastorales que hace nuestro Plan de Pastoral Orgánica.

El cuarto problema eclesial que nos presenta el Plan dice: “Falta una mayor conciencia vocacional que nos permita valorar el llamado de Dios a la vida cristiana, y a responder con sentido eclesial y generosidad, según los carismas y en el estado de vida al que El nos llama para el servicio de la comunidad eclesial”

Por esta razón el Centro Vocacional de Monterrey ha propuesto la formación de los Equipos Parroquiales de Pastoral Vocacional (EPPV)

De esta forma podremos servir a todos, aún a los más alejados Haciendo que el mensaje de Cristo fecunde la vida de todo cristiano

Los EPPV trabajarían en tres líneas: La oración vocacional La animación vocacional La promoción vocacional

Las vocaciones en la Iglesia madurarán como fruto de un paciente camino espiritual.