Razones por las que tres personas rechazaron a Cristo Jesús

Hoy quiero hablarles de tres personas quienes tuvieron una clara oportunidad para creer en Dios, para recibir a Cristo en su corazón, para ser salvos... y rechazaron esa oportunidad.

Quiero mostrarles cuáles fueron esas razones que los mantuvieron lejos de Dios para toda la eternidad, y quiero invitarles a pensar en vuestra propia situación.

Hechos 24:24-25; 25:13-22; 26:19-28.

En estos tres pasajes encontramos a tres personas diferentes, enmarcados en situaciones diferentes, pero tomando todos una misma decisión: rechazar a Jesucristo como Salvador.

Haz a un lado todos los obstáculos y recibe hoy a Jesucristo como tu Salvador personal.

¿Cuáles fueron los obstáculos que enfrentaron los tres personajes de nuestra historia? ¿Cuáles fueron las razones que les impidieron aceptar a Jesucristo como su Salvador personal? ¿Cuáles fueron los obstáculos que enfrentaron los tres personajes de nuestra historia? ¿Cuáles fueron las razones que les impidieron aceptar a Jesucristo como su Salvador personal?

Los obstáculos que enfrentaron estos tres personajes son iguales a los que enfrentan las personas hoy en día.

A. ¿Cómo llegó Pablo a Félix? B. Mensaje de Pablo a Félix 1.Pabló narró su testimonio de salvación 2.Pablo predicó de nuevo a Félix y a Drusila C. La respuesta de Félix A. ¿Cómo llegó Pablo a Félix? B. Mensaje de Pablo a Félix 1.Pabló narró su testimonio de salvación 2.Pablo predicó de nuevo a Félix y a Drusila C. La respuesta de Félix

A. ¿ Cómo llegó Pablo a Festo ? B. Mensaje de Pablo a Festo C. La respuesta de Festo A. ¿ Cómo llegó Pablo a Festo ? B. Mensaje de Pablo a Festo C. La respuesta de Festo Dice el verso 20 “Yo, dudando en cuestiones semejantes...” Dice el verso 20 “Yo, dudando en cuestiones semejantes...”

¿Decidiste ya qué fue lo que impidió a Félix aceptar a Cristo como su Salvador personal? ¿Y qué me dices de Festo? ¿Qué fue lo que le impidió confiar en Jesucristo? Piensa y pregúntate: ¿Acaso soy como Félix o Festo? Vayamos rápidamente a nuestro tercer personaje, que es: ¿Decidiste ya qué fue lo que impidió a Félix aceptar a Cristo como su Salvador personal? ¿Y qué me dices de Festo? ¿Qué fue lo que le impidió confiar en Jesucristo? Piensa y pregúntate: ¿Acaso soy como Félix o Festo? Vayamos rápidamente a nuestro tercer personaje, que es:

A. ¿Cómo llegó Pablo a presentar su caso a Agripa? B. Agripa conocía las costumbres judías C. Pablo narra su testimonio. D. La pregunta de preguntas. “¿Crees, oh rey Agripa, a los profetas? Yo sé que crees”. “¿Crees, oh rey Agripa, a los profetas? Yo sé que crees”. E. La respuesta de Agripa. A. ¿Cómo llegó Pablo a presentar su caso a Agripa? B. Agripa conocía las costumbres judías C. Pablo narra su testimonio. D. La pregunta de preguntas. “¿Crees, oh rey Agripa, a los profetas? Yo sé que crees”. “¿Crees, oh rey Agripa, a los profetas? Yo sé que crees”. E. La respuesta de Agripa.

Estos tres hombres están actualmente sufriendo en medio de llamas y de crujir de dientes en el lugar que la Biblia llama “el infierno”. ¿Tienes las respuestas?

Yo creo que en el caso de Félix fue su amor por el pecado y los placeres lo que le impidió buscar a Dios. Además de eso, prefirió posponer las decisiones difíciles. Jamás fue salvo. Murió y se fue al infierno.

¿Y tú, harás algo al respecto ¡ahora!? ¿O decidirás esperar hasta una mejor oportunidad? ¿Actuarás como Félix, posponiendo las decisiones vitales? Yo espero que no. Yo espero que hagas a un lado ese obstáculo y te decidas a arrepentirte de tu pecado y recibas a Cristo en tu corazón.

¿Y el caso de Festo? A mí me parece que podemos señalar a la duda, la falta de fe y, en cierto aspecto, al temor a las personas que lo rodeaban lo que hizo que Festo decidiera en forma equivocada.

¿Y tú, estás decidido a creer que Jesucristo es el Hijo de Dios, el que entregó su vida por ti en la cruz del Calvario, tu único y suficiente Salvador? ¿O todavía dudas? ¿Todavía crees que puedes encontrar salvación en alguien o en algo más? ¿No te parece confiable el mensaje de la Palabra de Dios?

¿Y Agripa? A mí me parece que Agripa es típico del “ya merito”. El dijo, “...por poco me persuades...”, pero no se persuadió. “Casi” salvo es igual a totalmente perdido.

Tú no puedes ser salvo si estás “casi” decidido a ser cristiano. Necesitas eliminar el “casi” y venir al Señor y entregarte a Él ¡TOTALMENTE!

¡Félix! ¡Festo! ¡Agripa! Estos tres hombres están actualmente sufriendo en medio de llamas y de crujir de dientes en el lugar que la Biblia llama “el infierno”. Fueron sus propias decisiones las que los llevaron allá.

El primero de ellos simplemente pospuso demasiado su decisión. El segundo dudó hasta que se perdió. El tercero rechazó abiertamente la salvación. Si tu pudieras hablar con ellos de seguro les dirías, “¿Por qué no se decidieron a aceptar a Jesucristo como su único y suficiente Salvador?”

Y yo te hago a ti la misma pregunta. Si has escuchado este mensaje con atención mi pregunta ahora es: “¿Por qué no te decides a ser salvo? ¿Qué es lo que te impide venir a Cristo? ¿Vale la pena aferrarse a lo que tú te estás aferrando y perderse para siempre?