Lectio divina del Salmo dominical Domingo III de Pascua Hch 3,13-15.17-19: Matasteis al autor de la vida, pero Dios lo resucitó de entre los muertos.

Slides:



Advertisements
Presentaciones similares
Escúchame cuando te invoco, Dios, defensor mío;
Advertisements

HIJO, TODO LO MÍO ES TUYO HIJO, TODO L0 MÍO ES TUYO Evangelio de Lucas
+ La experiencia personal de los favores recibidos (v + La experiencia personal de los favores recibidos (v. 2b) ha suscitado en el salmista una inalterable.
ESTE ES MI HIJO, ESCÚCHENLO
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical Nm 6,22-27: Invocarán mi nombre sobre los israelitas y los bendeciré. Sal 66, : El Señor tenga piedad y nos.
Lectio divina del Salmo dominical Domingo V de Cuaresma Año A
Lectio divina del Salmo dominical
¡Resucitó de entre los muertos! Domingo de Resurrección.
Evangelio según San Juan
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical Dedicación de la Basílica de Letrán
Lectio divina del Salmo dominical
Viernes Santo Is 52,13-53,12: Él fue traspasado por nuestras rebeliones. Sal 30, : Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu. Hb 4,14-16;
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical Jueves Santo
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
Hacer click para continuar Cantos sugeridos: Danos tu luz; Oración de unidad.
19 de abril 2015 III Domingo de Pascua. Primera lectura Hch 3,
Dichosos los que creen Sin haber visto Juan 20,19-31
Tema 6 CREO EN JESUCRISTO QUE PADECIÓ BAJO EL PODER DE PONCIO PILATO, FUE CRUCIFICADO, MUERTO Y SEPULTADO.
Lectio divina del Salmo dominical
Tema 7 CREO EN JESUCRISTO QUE AL TERCER DÍA RESUCITÓ.
Lectio divina del Salmo dominical
19 de abril de 2015 Domingo 3º de PASCUA Música: “Cantate Domino” d’A. Pärt.
30 abril de 2006 III Domingo de Pascua –B- Salm 4 Haz brillar sobre nosotros el resplandor de tu rostro. Haz brillar sobre nosotros el resplandor de.
22 de abril de 2012 III Domingo de PASCUA Música: “Cantate Domino” d’A. Pärt.
Aleluya Domingo 3 PASCUA.
3º DOMINGO DE PASCUA Vosotros sois testigos de esto .
Lectio divina del Salmo dominical Is 56,1.6-7: A los extranjeros los traeré a mi monte santo. Sal 66, : Oh Dios, que te alaben los pueblos, que.
Domingo VI de Pascua Hch 10, : El don del Espíritu Santo se ha derramado también sobre los gentiles. Sal 97,1.2-3ab.3cd-4: El Señor revela.
Lectio divina del Salmo dominical Ez 2,2-5: Son un pueblo rebelde, sabrán que hubo un profeta en medio de ellos. Sal 122,1-2a.2bcd.3-4: Nuestros ojos.
Ascensión del Señor Domingo VII de Pascua Hch 1,1-11: Lo vieron levantarse. Sal 46, : Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de.
III Domingo de Pascua Lucas 24, de Abril 2015.
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical Os 11,1b.3-4.8c-9: Se me revuelve el corazón. Lectura sálmica: Is 12,2-3.4bcd.5-6: Sacaréis aguas con gozo de las fuentes.
ORAMOS con el SALMO Pasionistas SALMO 4 CONFIANZA en el SEÑOR.
Lectio divina del Salmo dominical
Acción de gracias Pase automático Madre Teresa de Calcuta Escúchame cuando te invoco, Dios, defensor mío;
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical
II Domingo Tiempo Ordinario
Lectio divina del Salmo dominical Sb 2, : Lo condenaremos a muerte ignominiosa. Sal 53, : El Señor sostiene mi vida. St 3,16-4,3: Los que.
Lectio divina del Salmo dominical
Evangelio según San Lucas
Lectio divina del Salmo dominical Nm 11, 25-29: ¿Estás celoso de mí? ¡Ojalá todo el pueblo fuera profeta! Sal 18, : Los mandatos del Señor.
Lectio divina del Salmo dominical Dt 4, : No añadáis nada a lo que os mando..., así cumpliréis los preceptos del Señor. Sal 14,2-3a.3bc-4ab.5: Señor,
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical Ap 7, : Apareció en la visión una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de toda nación, raza, pueblo.
Lectio divina del Salmo dominical
Lectio divina del Salmo dominical So 3,14-18a: El Señor se alegra con júbilo en ti. Sal: Is 12,2-3.4bed.5-6: Gritad jubilosos: «Qué grande es en medio.
Lectio divina del Salmo dominical Gn 3, : Establezco hostilidades entre tu estirpe y la de la mujer. Sal 97,1.2-3ab.3c-4: Cantad al Señor un cántico.
Lectio divina del Salmo dominical Jr 33,14-16: Suscitaré a David un vástago legítimo. Sal 24,4bc-5ab : A ti, Señor, levanto mi alma. 1Ts 3,12-4,2:
Lectio divina del Salmo dominical Is 62,1-5: El marido se alegrará con su esposa. Sal 95,1-2a.2b-3.7-8a.9-10a.c: Contad a todos los pueblos las maravillas.
Lectio divina del Salmo dominical Nm 6,22-27: Invocarán mi nombre sobre los israelitas y los bendeciré. Sal 66, : El Señor tenga piedad y nos.
Lectio divina del Salmo dominical Is 6,1-2a.3-8: Aquí estoy, mándame. Sal 137,1-2a.2bc c-8: Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor. 1Co 15,1-11:
Lectio divina del Salmo dominical Gn 15, : Dios hace alianza con Abrahán, el creyente. Sal 26,1.7-8a.8b-9abc.13-14: El Señor es mi luz y mi salvación.
Lectio divina del Salmo dominical Is 43,16-21: Mirad que realizo algo nuevo y apagaré la sed de mi pueblo. Sal 125,1-2ab.2cd : El Señor ha estado.
El rey David dictando los salmos a los escribas (Museo del Louvre). Orar con los Salmos Salmos Orar con los Salmos Salmos La oración de la Iglesia Hno.
LECTIO DIVINA III DOMINGO DE PASCUA 2012 CICLO B.
Lectio divina del Salmo dominical Domingo IV de Pascua Hch 13, : Sabed que nos dedicamos a los gentiles. Sal 99,2.3.5: Somos su pueblo y ovejas.
Lectio divina del Salmo dominical Pr 8,22-31: Antes de comenzar la tierra, la sabiduría fue engendrada. Sal 8, : Señor, dueño nuestro, ¡qué.
Lectio divina del Salmo dominical Ez 34,11-16: Yo mismo apacentaré mis ovejas, yo mismo las haré sestear. Sal 22,1-3a.3b-4.5.6: El Señor es mi pastor,
Transcripción de la presentación:

Lectio divina del Salmo dominical Domingo III de Pascua Hch 3, : Matasteis al autor de la vida, pero Dios lo resucitó de entre los muertos. Sal 4,2.7.9: Haz brillar sobre nosotros la luz de tu rostro, Señor. 1Jn 2,1-5a: Él es víctima de propiciación por nuestros pecados y también por los del mundo entero. Lc 24,35-48: Así estaba escrito: el Mesías padecerá y resucitará de entre los muertos al tercer día.

Haz brillar sobre nosotros la luz de tu rostro, Señor.

Escúchame cuando te invoco, Dios, defensor mío; tú que en el aprieto me diste anchura, ten piedad de mí y escucha mi oración.

Haz brillar sobre nosotros la luz de tu rostro, Señor.

Hay muchos que dicen: «¿Quién nos hará ver la dicha, si la luz de tu rostro ha huido de nosotros?»

Haz brillar sobre nosotros la luz de tu rostro, Señor.

En paz me acuesto y en seguida me duermo, porque tú solo, Señor, me haces vivir tranquilo.

Haz brillar sobre nosotros la luz de tu rostro, Señor.

Lectio Ahora leemos el salmo entero, despacio… Salmo 4 [ 1 Del maestro de coro. Para instrumentos de cuerda. Salmo. De David.] 2 Escúchame cuando te invoco, Dios, defensor mío; tú que en el aprieto me diste anchura, ten piedad de mí y escucha mi oración. 3 Y vosotros, ¿hasta cuándo ultrajaréis mi honor, amaréis la falsedad y buscaréis el engaño? 4 Sabedlo: el Señor hizo milagros en mi favor, y el Señor me escuchará cuando lo invoque. 5 Temblad y no pequéis, reflexionad en el silencio de vuestro lecho; 6 ofreced sacrificios legítimos y confiad en el Señor. 7 Hay muchos que dicen: "¿Quién nos hará ver la dicha, si la luz de tu rostro ha huido de nosotros?" 8 Pero tú, Señor, has puesto en mi corazón más alegría que si abundara en trigo y en vino. 9 En paz me acuesto y en seguida me duermo, porque tú sólo, Señor, me haces vivir tranquilo. Si quieres escuchar el original hebreo pincha aquí.

Lectio ¿Qué lugar ocupa este salmo en el salterio? Según el P. Ramón Ribera, monje de Montserrat, y otros estudiosos, el orden de los salmos no se debe al azar sino que hay toda una estructura interna.

Nuestro salmo se encuentra en la primera parte del salterio, dedicado a las súplicas a Dios, formada por los libros: 1º: salmos º: salmos º: salmos º: salmos Y 3º: salmos Salmo 4: Acción de gracias. Lectio ¿Qué lugar ocupa este salmo en el salterio? Dentro del primer libro, los salmos 3-31 constituyen la 1ª Colección de David. David es el protagonista de estos salmos y todos traen su nombre en el título (aunque esto no quiere decir que los haya escrito él). Toda esta colección está organizada en 4 septenarios que corresponden a Para los hebreos el nº 14 es el equivalente numérico de las letras de la palabra “David.” El Salmo 4 se encuentra en el primer septenario (salmos 3-9).

El salmo 4 es un salmo difícil de clasificar: en él se intercalan la súplica y la profesión de confianza. Lo podemos estructurar en tres partes: a)El orante suplica el auxilio de Dios y recuerda sus beneficios (v.2) b)Interpela a sus enemigos, esos “nobles”, con una retórica apasionada, acumulando preguntas e imperativos, exhortándolos a la conversión, citando para ellos a sus amigos y ofreciéndoles su testimonio ejemplar (vv. 3-6) c)Vuelve al diálogo con Dios, exponiendo de nuevo su confianza en Él que es fuente de alegría y de paz. (vv. 7-9) No sabemos si era una oración vespertina (cf. vv. 5. 9) ya que no hace falta interpretar a la letra estos versículos, sin embargo, éstos han motivado el uso del salmo en la Liturgia de las Horas que lo proclama en las Completas del Domingo tras las primeras Vísperas. Lectio ¿Qué dice el texto?

“Haz brillar sobre nosotros el resplandor de tu rostro” Cristo resucitado, abre nuestro corazón y nuestro entendimiento a la Luz de tu resurrección. ¡Tú eres el Mesías anunciado por los profetas que tenía que padecer! Haz que nuestro corazón, “labrado” por su profecía, dé en nosotros frutos de conversión. Meditatio Lo propio de este paso es meditar qué me dice a mi el texto. Esto es algo muy personal por ello aquí para ayudar a esta meditación relacionamos el salmo con las lecturas del domingo.

“Tú que en el aprieto me diste anchura…” Escuchemos la voz de Cristo: el Padre lo resucitó sacándolo de la angostura de la muerte y ahora vive para siempre y nos llama a la Vida en las anchas praderas de su Reino.

“El Señor hizo milagros en mi favor” Celebramos la maravilla de las maravillas: la Resurrección de Cristo. Él durmió el sueño de la muerte y en paz se acostó porque sabía que su vida estaba en las manos de su Padre y ahora vive por los siglos de los siglos. ¡Aleluya!

Oratio ¿Qué me hace decirle a Dios este salmo, la liturgia de este domingo? Gracias, Padre, porque nos has iluminado con la claridad de tu Cristo, porque en el aprieto nos has dado anchura. Que la celebración de la Resurrección de tu Hijo amado siga sosteniendo nuestra esperanza y confianza en Ti porque Tú sólo Señor nos haces vivir tranquilos. Amén. ¡Aleluya!

“¿Quieres ser feliz? Si lo deseas, te muestro lo que te puede hacer feliz. Continúa leyendo: ¿Hasta cuándo tendréis pesado el corazón? ¿Por qué amáis la vanidad y buscáis la mentira? Sabed. ¿Qué? Que el Señor ha engrandecido a su santo. Vino Cristo a nuestras miserias: sintió hambre, sufrió sed, se fatigó, durmió, hizo cosas maravillosas, sufrió males, fue flagelado, coronado de espinas, cubierto de salivazos, abofeteado, crucificado, herido por la lanza, colocado en el sepulcro; pero al tercer día resucitó, acabada la fatiga, muerta la muerte. Tened vuestros ojos fijos allí, en su resurrección, puesto que el Señor ha engrandecido a su santo, resucitándolo de entre los muertos y otorgándole el honor de sentarse en el cielo a su derecha.” (S AN A GUSTÍN, Sermón 231,5)S AN A GUSTÍN Contemplatio Miro y me dejo mirar… En esto los Padres de la Iglesia son maestros…

Tú sólo, Señor, me haces vivir tranquilo Actio ¿Qué me hace vivir el Señor a partir de esta Palabra? Es el momento de la “obediencia de la Fe”…