El sacramento de la Penitencia, o Reconciliación, o Confesión, es el sacramento instituido por Nuestro Señor Jesucristo para borrar los pecados cometidos.

Slides:



Advertisements
Presentaciones similares
En el capítulo anterior vimos:
Advertisements

INTRODUCCIÓN Cristo murió en la cruz para cumplir la ley y darnos vida en abundancia para que pudiésemos alcanzar la paz verdadera.
Para Salvarte Jorge Loring n. 69 Colaboración de Ignacio Olivera
Sacramento de la penitencia o de la reconciliación
Colaboración de Alejandro Portillo
Vida Sobrenatural nn. 41 a 43 Por Martín A. Sosa B.
LOS SACRAMENTOS DE CURACIÓN
LOS SIETE SACRAMENTOS DE LA IGLESIA
EL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO
22. LA PENITENCIA (I).
EL SACRAMENTO DE LA EUCARISTÍA
Para Salvarte P. Jorge Loring Vida Sobrenatural.
Trigésimo tercer programa
NÚCLEO VIII: LA RECONCILIACIÓN.
El Sacramento del Perdón
El sacramento del Perdón
CCE 1849: “El pecado es una falta contra la razón, la verdad,
CREER EN LA PAZ QUE NOS TRAE JESÚS. Mayo 1 Juan 20,19-31 CREER EN LA PAZ QUE NOS TRAE JESÚS. Mayo 1 Juan 20,19-31.
LA PENITENCIA (confesión)
LOS SACRAMENTOS DE LA IGLESIA
LOS SACRAMENTOS.
LOS SACRAMENTOS de Curación PENITENCIA O RECONCILIACIÓN
¿Cómo recibir el Sacramento de la Reconciliación?
Domingo 2º de Pascua Día 19 de Abril de 2009.
El sacramento de la Penitencia
PALABRA DE VIDA Abril 2014.
Jesús nos enseñó que Dios es padre de todos nosotros.
Contemplar es mirar con detenimiento… Dejando que lo que contemplamos nos hable hoy.
Sacramento de la Penitencia *de la confesión,
Semana I Tema I Espiritualidad y Unidad del Cristiano.
Proyecto de Religión Educación Primaria.
JHS La Eucaristía es la culminación de todos los Sacramentos. El misterio de la comunión es tan perfecto que conduce a la cúspide de todos los bienes.
Un concepto equivocado sobre Jesús Marcos 10: de octubre 2014 Pastor Wilson Carrero.
llamado y espiritualidad
OBJETIVOS FUNDAMENTALES
Los Sacramentos.
Articulo #10: Creo en el perdón de los pecados
El sacramento del Bautismo
El pecado.
Tema 17 SACRAMENTO DE LA PENITENCIA.
CURSO “LA FE DE JESÚS” LO QUE LA BIBLIA ENSEÑA ACERCA DEL BAUTISMO
LAS PARÁBOLAS DE LA MISERICORDIA
Bits Sobre la confesión (Material de Primera Comunión) (Parroquia de Santa Elena – Arquidiocesis de San Salvador)
Si Adán nos dejó en herencia el pecado Jesús nos deja la salvación.
Creo en el perdón de los pecados 21. Compendio del Catecismo 201. ¿Por qué la Iglesia tiene el poder de perdonar los pecados? La Iglesia.
6 LA SEXUALIDAD, DON DE DIOS ❶_El cuerpo y el alma son dones de Dios
Catecismo de la IGLESIA CATÓLICA
De la oscuridad a la luz Las columnas de nuestra salvación
Oimos o no oimos la voz de Dios
CREER EN LA PAZ QUE NOS TRAE JESÚS.
Significado El Miércoles de Ceniza marca el principio de la Cuaresma
LA PENITENCIA.
Los Sacramentos.
LOS SACRAMENTOS.
Foro de reflexión y estudio sobre el Youcat P. Juan Antonio Ruiz, Lc Roma 65ª Sesión 20/05/2013.
Cuando no hay sacerdote para confesarse y se está en pecado mortal
PRIMERA Y SEGUNDA CONVERSIÓN
El Sacramento del Perdón
están conformadas por leyes para que su vida sea plena,
PADRE NUESTRO.
Algunas razones por las que tenemos
Grupo 2 Langellotti, Julieta Gonzalez, Santiago Quiroga, Nicolás Buissa, Laura Parapugna, Ivo.
LA EUCARISTÍA ¿ QUÉ ES LA EUCARISTÍA ?
Para confesarnos bien debemos: 1
1 Examen de conciencia, es una revisión de la vida para darse cuenta lo que estaba bien o mal y se lo hace meditando los mandamientos. 2. Arrepentimiento.
Cristianismo Victorioso Lección 24:.
Misericordiosos como el padre
1.Presencia real Eucarística Dios esta presente en su Iglesia de múltiples maneras (sacramentos, fieles, pobres)pero sobre todo está presente en las especies.
Efectos del Bautismo Los efectos principales son la purificación de los pecados y el nuevo nacimiento en el Espíritu Santo.
PARROQUIA NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN PALMIRA II DOMINDO DE PASCUA.
Transcripción de la presentación:

El sacramento de la Penitencia, o Reconciliación, o Confesión, es el sacramento instituido por Nuestro Señor Jesucristo para borrar los pecados cometidos después del Bautismo. Es, por consiguiente, el sacramento de nuestra curación espiritual, llamado también sacramento de la conversión, porque realiza sacramentalmente nuestro retorno a los brazos del padre después de que nos hemos alejado con el pecado. Sólo Dios perdona los pecados (cf Mc 2,7). Porque Jesús es el Hijo de Dios, dice de sí mismo: "El Hijo del hombre tiene poder de perdonar los pecados en la tierra" (Mc 2,10) y ejerce ese poder divino: "Tus pecados están perdonados" (Mc 2,5; Lc 7,48). Más aún, en virtud de su autoridad divina, Jesús confiere este poder a los hombres (cf Jn 20,21-23) para que lo ejerzan en su nombre. Padre Marcelo Rivas S. Saberse perdonado es brillar en misericordia

Al cometer pecado grave, todos, sin excepción, deben confesarse. Cristo quiso que toda su Iglesia, tanto en su oración como en su vida y su obra, fuera el signo y el instrumento del perdón y de la reconciliación que nos adquirió al precio de su sangre. Sin embargo, confió el ejercicio del poder de absolución al ministerio apostólico, que está encargado del "ministerio de la reconciliación" (2 Cor 5,18). El apóstol es enviado "en nombre de Cristo", y "es Dios mismo" quien, a través de él, exhorta y suplica: "Dejaos reconciliar con Dios" (2 Co 5,20). Al cometer pecado grave, todos, sin excepción, deben confesarse. ¿Qué se requiere para hacer una buena confesión? Para hacer una buena confesión se necesita: hacer un cuidadoso examen de conciencia, tener dolor de los pecados cometidos y firme propósito de no cometerlos más (contrición o atrición), decir los otros pecados al sacerdote (confesión), y cumplir la penitencia (satisfacción) ¿Es posible obtener el perdón de los pecados mortales sin la confesión? Después del Bautismo no es posible obtener el perdón de los pecados mortales sin la Confesión. .Penitencia: Mt. 18, 18; Jn. 20, 23. Saberse perdonado es brillar en misericordia

El examen de conciencia es la diligente búsqueda de los pecados cometidos después de la última Confesión bien hecha. El dolor de los pecados es el sincero pesar y la repulsa de los pecados cometidos. El dolor es de dos tipos: dolor perfecto (o contrición) y dolor imperfecto (o atrición). Para la validez de la confesión es suficiente arrepentirse de todos los pecados mortales, mas para el progreso espiritual es necesario arrepentirse también de los pecados veniales. El arrepentimiento ciertamente mira hacia el pasado, pero implica necesariamente un empeño hacia el futuro con la firme voluntad de no cometer jamás el pecado. La confesión es la manifestación humilde y sincera de los propios pecados al sacerdote confesor. Estamos obligados a confesar todos y cada uno de los pecados graves, o mortales, cometidos después de la última confesión bien hecha. Saberse perdonado es brillar en misericordia

Las faltas objetivamente mortales más frecuentes son (siguiendo el orden de los mandamientos): practicar de cualquier modo la magia; blasfemar; perder la Misa los domingos sin un grave motivo; tratar mal de manera grave a los propios padres o superiores; matar o herir gravemente a una persona inocente; procurar directamente el aborto; buscar el placer sexual en solitario o con otras personas que no sean el propio cónyuge; para los cónyuges impedir la concepción en el acto conyugal; robar una suma revelante, incluso sustrayéndose en el trabajo; murmurar gravemente del prójimo o calumniarlo; cultivar voluntariamente pensamientos o deseos impuros; faltar gravemente el propio deber; acercarse a la Sagrada Comunión en estado de pecado mortal; callar voluntariamente un pecado grave en la confesión. Si uno olvida un pecado mortal obtiene igualmente el perdón, pero en la confesión siguiente debe confesar el pecado olvidado. Si uno, por vergüenza o por otros motivos, calla un pecado mortal, no sólo no obtiene ningún perdón, sino que comete un nuevo pecado de sacrilegio, el de profanación de una cosa sagrada. Saberse perdonado es brillar en misericordia

La confesión es un derecho y un deber La confesión es un derecho y un deber. Derecho de todo cristiano que necesita ser escuchado, aconsejado y perdonado. Es un deber de cada sacerdote que expresa con este sacramento el amor de Dios en su infinita misericordia. El confesor debe dar siempre la absolución si el penitente está bien dispuesto, es decir, si está sinceramente arrepentido de todos sus pecados mortales. Son muchos los que se niegan a confesar repitiendo lo siguiente: Quien confiesa es un hombre como todos. Lo más grande de este sacramento es el regalo maravilloso que Dios nos ha dejado. Entregado al Sacerdote (pecador) Siempre digo lo mismo. No hace falta cometer otros pecados mayores para confesarse. Siento vergüenza. Aquí, jamás el penitente es condenado, sino perdonado Además, La confesión es un medio extraordinariamente eficaz para progresar en el camino de la perfección. El penitente después de la absolución debe cumplir la penitencia que le ha sido impuesta y reparar los daños que sus pecados hubiesen eventualmente causado al prójimo /por ejemplo, debe restituir lo robado). Saberse perdonado es brillar en misericordia

Aclaremos … Los que se acercan al sacramento de la penitencia obtienen de la misericordia de Dios el perdón de los pecados cometidos contra El y, al mismo tiempo, se reconcilian con la Iglesia, a la que ofendieron con sus pecados. Ella les mueve a conversión con su amor, su ejemplo y sus oraciones (L. G. 11) Sacramento de la Conversión porque realiza sacramentalmente la llamada de Jesús a la conversión (Mc 1,15), la vuelta al Padre (Lc 15,18) del que el hombre se había alejado por el pecado. Sacramento de la Penitencia porque consagra un proceso personal y eclesial de conversión, de arrepentimiento y de reparación por parte del cristiano pecador. Sacramento de la confesión porque la declaración o manifestación, la confesión de los pecados ante el sacerdote, es un elemento esencial de este sacramento. Sacramento del perdón porque, por la absolución sacramental del sacerdote, Dios concede al penitente "el perdón y la paz" Sacramento de reconciliación porque otorga al pecador el amor de Dios que reconcilia. Saberse perdonado es brillar en misericordia

Resumen … Jesús se mostró a sus discípulos y les dijo: "Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos" (Jn 20, 22-23) Quien peca lesiona el honor de Dios y su amor, su propia dignidad de hombre llamado a ser hijo de Dios y el bien espiritual de la Iglesia.. Volver a la comunión con Dios, después de haberla perdido por el pecado, es un movimiento que nace de la gracia de Dios, rico en misericordia y deseoso de la salvación de los hombres. Es preciso pedir este don precioso para sí mismo y para los demás. Está constituido por el conjunto de tres actos realizados por el penitente: arrepentimiento, la confesión o manifestación de los pecados al sacerdote y el propósito de realizar la reparación y las obras de penitencia y por la absolución del sacerdote. Sólo los sacerdotes que han recibido de la autoridad de la Iglesia la facultad de absolver pueden ordinariamente perdonar los pecados en nombre de Cristo. Saberse perdonado es brillar en misericordia

La Madre Teresa de Calcuta, Juan Pablo II se confesaban cada 8 días La Madre Teresa de Calcuta, Juan Pablo II se confesaban cada 8 días. Bien podría usted decir. ¡Eran buenos pecadores! Pero no. Ellos descubrieron en la confesión la fortaleza para el camino. Como una norma de vida y una respuesta a la necesidad, se recomienda confesarse mensualmente e incluso acusar los pecados veniales para que no crezcan y estropeen la vida que empieza a crecer. Saberse perdonado es brillar en misericordia