LAS ESTRELLAS DE MAR.

Slides:



Advertisements
Presentaciones similares
El actuar pedagógico de Dios en nuestra historia personal
Advertisements

UNA BUENA LECCIÓN Visita:
Cuenta la historia que en un amplio océano en un maravilloso palacio vivía un Rey con sus cinco hijas. La sirenita.
HUELLAS EN LA ARENA.
Conectados en el alma ¿Qué es la Solidaridad? Cierto día, mientras descansaba en una playa prácticamente solitaria, observé a otra persona en la lejanía.
Almuerzo con Dios Un niño pequeño quería conocer a Dios.
UNA BUENA LECCIÓN AvanzaPorMas.com.
Un día, cuando era estudiante de secundaria, vi a un compañero de mi clase caminando de regreso a su casa. Se llamaba Kyle. Iba cargando todos sus libros.
Copyright © 2008 Tommy's Window. All Rights Reserved Enciende tus parlantes Enciende tus parlantes HAZ CLIC PARA AVANZAR.
Porque eres mujer. Si eres hombre seguro conoces alguna mujer para hacérselo llegar, o transmitirle el mensaje. Creo que ustedes también deben recibirlo.
PARA TOMAR EN CUENTA.
Como el lápiz   El niñito miraba al abuelo escribir una carta.  En un momento dado, le pregunto: -    ¿Abuelo, estás escribiendo una historia que nos pasó.
”¿Qué opinas de mi?...” pregunté.
La paloma y la rosa.
”¿Qué opinas de mi?...” pregunté.
SNAS18 EL TENEDOR.
...es parábola de la vida....
Cuando veo lo que no se ve
Conectados en el alma ¿Qué es la Solidaridad? Cierto día mientras descansaba en una playa prácticamente solitaria, observé a otra persona en la lejanía.
Huellas en la arena.
"El secreto del éxito en la vida del hombre consiste en estar dispuesto para aprovechar la ocasión que se le depare." Benjamin Disraeli Que tengas un.
LAS ESTRELLAS DEL MAR.
¿POR QUE LOS HOMBRES HACEN PIPI DE PIE
HUELLAS EN LA ARENA.
UNA BUENA LECCIÓN. Un estudiante universitario salió un día a dar un paseo con un profesor, a quien los alumnos consideraban su amigo debido a su bondad.
El pez más bello de todos los océanos
Hay un estanque en Jerusalén llamado en hebreo Betesda
Ilumina ¡oh, Dios! mi tiempo Que ando perdido en la noche Noche oscura del mundo. Desierta quedó la playa Donde entre el agua y la arena Trazaba esquemas.
*NO ME PUEDO AGACHAR !!!*.
Las estrellas de mar Cierto día, caminando por la playa reparé en un hombre que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena y lo lanzaba al mar.
Cambio de diapositivas automático
Dicen que a cierta edad las mujeres nos hacemos invisibles, que nuestro protagonismo en la escena de la vida declina y que nos volvemos inexistentes para.
LAS ESTRELLAS DE MAR LAS ESTRELLAS DE MAR Cierto día, caminando por la playa reparé en un hombre que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena.
Un frío invierno….
Es nuestro único hogar!..... Qué harás por ella hoy? C on A mor l o S alvaremos (Con sonido)
♫ Enciende los parlantes ♫ Enciende los parlantes HAZ CLIC PARA AVANZAR Copyright © 2008 Tommy's Window. All Rights Reserved Visita:
Una gaviota ahogándose en el mar, mientras aleteaba tratando de Salir, pasa un pelicano que observando a la desvalida gaviota decide ayudarla.
¿Qué hace hoy la Iglesia católica en la sociedad?
Ya vasta esta es una injusti cia. Es cierto mi mami dice que esto esta muy mal, y yo estoy de acuerdo con ella Es cierto hijo.
HISTORIA DE UNA TORTUGA.
Un amigo nuestro iba caminando al atrardecer por una playa desértica
EL CIEGO.
HUELLAS EN LA ARENA.
Dedicado a personas maravillosas
Un día tuve un sueño... Soñé que estaba caminando por la playa con el Señor y a través del cielo pasaban escenas de mi vida. Por cada escena que pasaba,
¿Qué te pasó? ¿Cómo te hiciste ese moretón? dijo Rafael muy sorprendido mientras se acercaba a Ramiro. La clase de educación física había terminado, y.
LA VASIJA AGRIETADA Un cargador de agua de la India tenía dos grandes vasijas que colgaban a los extremos de un palo y que llevaba encima de los hombros.
UN CONTRABANDO EN EL CIELO
SENDAS ÉL HARÁ Nº 70 EL LEPROSO SANADO UNA VEZ QUE JESÚS PASABA POR UN PUEBLO, DIEZ LEPROSOS LO ESTABAN ESPERANDO. HABÍAN OÍDO QUE QUIZÁS EL PASARÍA.
Las estrellas de mar Cierto día, caminando por la playa reparé en un hombre que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena y lo lanzaba al mar.
Matrimonios y algo más Casarse es como ir a un restaurante con amigas, pides lo que deseas y cuando ves lo que la otra tiene, te gustaría cambiar. Tienes.
LAS ESTRELLAS DE MAR.
*Un rapidín?.
SENDAS ÉL HARÁ Nº 123 DESAYUNO JUNTO AL MAR EN OTRA OCASIÓN, JESÚS SE LES APARECIÓ A LOS DISCÍPULOS EN EL MAR DE GALILEA. UNA TARDE, PEDRO LES DIJO.
NO ME PUEDO AGACHAR !!! Una mañana, al estar admirando su cuerpo frente al espejo, un hombre, notó que había logrado un bonito bronceado por todo su cuerpo...
Almuerzo con Dios Un niño pequeño quería conocer a Dios.
“SEFER SHMOT” (PRIMEROS PRAKIM).
La importancia de la amistad
Quiero Compartir Una Bonita Historia Contigo.. Espero Que La Aprecies
Algo si puede cambiar Composición : Ani Díaz S..
MATRIMONIADAS ►Tienes dos opciones en la vida: permanecer soltero y sentirte desgraciado, o casarte y desear estar muerto. ►Casarse es como ir a un restaurante.
By: Mytisha Leach Había una vez, un mujer vieja. Era rica y no querer morir. Haría cualquier cosa ser joven otra vez y vivir su vida de nuevo. Una noche.
Carta de nuestro amigo Jesús....
Miguel-A. “Padre substituto”. Una pareja llevaba varios años de matrimonio, y no había logrado tener familia. Tras consultar con varios doctores, sin.
Helado para el alma.
"El secreto del éxito en la vida del hombre consiste en estar dispuesto para aprovechar la ocasión que se le depare." Benjamin Disraeli Que tengas un.
MIS PEQUEÑOS MENSAJES.
LAS ESTRELLAS DE MAR.
Las Pequeñas Semillitas
Las estrellas de mar Cierto día, caminando por la playa reparé en un hombre que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena y lo lanzaba al mar.
Transcripción de la presentación:

LAS ESTRELLAS DE MAR

Cierto día, caminando por la playa reparé en un joven que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena y lo lanzaba al mar. Hacía lo mismo una y otra vez.

Tan pronto como me aproximé, me di cuenta que el jóven recogía estrellas de mar que las olas depositaban en la arena, y una a una las arrojaba de nuevo al mar.

Intrigado, lo interrogué sobre lo que estaba haciendo, a lo cual me respondió: “Estoy lanzando estas estrellas de mar nuevamente al océano. Como ves, la marea es baja y estas estrellas han quedado en la orilla, si no las arrojo al mar morirán aquí por falta de oxígeno.”

“Entiendo”, le dije, “pero debe haber miles de estrellas de mar sobre la playa. No puedes lanzarlas a todas. Son demasiadas. Y quizá no te des cuenta de que esto sucede probablemente en cientos de playas a lo largo de la costa, ¿no estás haciendo algo que no tiene sentido?”

“¡Para ésta si tuvo sentido!” El jóven sonrió, se inclinó y tomó una estrella marina y mientras la lanzaba de vuelta al mar, me respondió: “¡Para ésta si tuvo sentido!”