El Cid Campeador Siglos XII-XIII

Foto de la izquierda: Reino de Navarra en amarillo (año 1030). Foto de la derecha: Península Ibérica entre 1076 y 1080.

Foto de la izquierda: Corona de Castilla y León en rosa (año 1360). Foto de la derecha: Corona de Castilla en amarillo (año 1400).

El Cid cuenta la historia de Rodrigo Díaz de Vivar, nacido probablemente alrededor de 1043 en Vivar, al norte de Burgos. Hijo de nobles, fue enviado a educarse junto con el príncipe Sancho, hijo de Fernando I, rey de Castilla y León. En 1063, Rodrigo acompañó al príncipe en una expedición contra Graus, ciudad que se encontraba en el reino moro de Zaragoza. Graus era un tributario de Castilla, es decir, le pagaba a Castilla un tributo como muestra de sumisión, y por lo tanto estaba bajo la protección del padre de Sancho. En diciembre del mismo año, el rey Fernando dividió su reino, incluyendo los estados moros que pagaban tributos, entre sus tres hijos.

Después de la muerte de Fernando, Sancho, ahora rey de Castilla, nombró a Rodrigo alférez y le encargó que estableciera la frontera entre Navarra y Castilla. Rodrigo desempeñó el cargo brillantemente, dando así prueba de su acumen militar. Después de esta victoria fue conocido por el nombre de Campeador, que significa “gran guerrero”. Siguen muchas otras batallas y triunfos. Rodrigo gana el respeto tanto de cristianos como de moros. Estos lo llaman Sidi (Cid), título de respeto que significa “señor”.

El acontecimiento que da comienzo al poema es el siguiente: muerto Sancho, el rey Alfonso VI de Castilla y León manda a Rodrigo a cobrar las parias al rey moro de Sevilla. Al volver el Cid a Castilla, se encuentra con que sus enemigos lo han acusado de no entregar todo el dinero. A causa de esta calumnia, el rey destierra al Cid de León y Castilla. Entonces Rodrigo reúne a sus vasallos y parientes, quienes optan por acompañarlo en el destierro. Como es costumbre en la literatura de este período, las emociones se revelan por medio de la imagen concreta. El héroe muestra su tristeza al llorar a lágrima viva. Al pasar el Cid por Burgos, nadie se atreve a ofrecerle asilo por el miedo al rey. El poema nos hace sentir la solidaridad del pueblo con el héroe.

Existen dos teorías sobre los orígenes del poema del Cid: 1. La primera apoya la creación colectiva alrededor de 1140. Según esta hipótesis, el poema, creado por un individuo, va transmitiéndose de una generación a otra y, en el proceso, va modificándose hasta convertirse en una obra anónima y colectiva. 2. La segunda defienda que fue una creación totalmente individual. Se escribió en un monasterio o abadía varios siglos después de ocurrir los acontecimientos, basados en crónicas o leyendas populares. Colin Smith propuso que se escribió en 1207 por Pedro Abad, un clérigo con conocimientos jurídicos, los cuales se manifiestan en el poema. Otros dicen que Pedro Abad fue sólo el copista.