IMPORTANCIA DEL ARREPENTIMIENTO LECCIÓN 8 ARREPENTIMIENTO IMPORTANCIA DEL ARREPENTIMIENTO a) En el Antiguo Testamento relación de Israel con Dios Dt. 30.10: “Cuando obedecieres a la voz de Jehová tu Dios, para guardar sus mandamientos y sus estatutos escritos en este libro de la ley; cuando te convirtieres a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma.”

2 R. 17.13: “Jehová amonestó entonces a Israel y a Judá por medio de todos los profetas y de todos los videntes, diciendo: Volveos de vuestros malos caminos, y guardad mis mandamientos y mis ordenanzas, conforme a todas las leyes que yo prescribí a vuestros padres, y que os he enviado por medio de mis siervos los profetas.” Jer. 8.6: “Escuché y oí; no hablan rectamente, no hay hombre que se arrepienta de su mal, diciendo: ¿Qué he hecho? Cada cual se volvió a su propia carrera, como caballo que arremete con ímpetu a la batalla”. Ez. 14.6: “Por tanto, di a la casa de Israel: Así dice Jehová el Señor: Convertíos, y volveos de vuestros ídolos, y apartad vuestro rostro de todas vuestras abominaciones.”

2 Cró. 7.14: “si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.” b) En el Nuevo Testamento: (1) Nota clave en la predicación de Juan el Bautista Mt. 3.1, 2:”En aquellos días llegó Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado”.

(2) Jesús Mt. 12.41: “Los hombres de Nínive se levantarán en el juicio con esta generación, y la condenarán; porque ellos se arrepintieron a la predicación de Jonás, y he aquí más que Jonás en este lugar. (3) Los discípulos Mr. 6.12: “Y saliendo, predicaban que los hombres se arrepintiesen.” (4) En la Gran Comisión Lc. 24.47: Y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén.

(5) Pedro Hec. 2.38: “Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.” (6) Pablo Hec. 20.21: “Testificando a judíos y a gentiles acerca del arrepentimiento para con Dios, y de la fe en nuestro Señor Jesucristo.” 2 Ts. 2.5: “¿No os acordáis que cuando yo estaba todavía con vosotros, os decía esto?” c) El arrepentimiento es la voluntad de Dios para todo hombre 2 P.3.9: “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”

(1) El mandamiento del Señor Hech. 17.30: “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan” (2) La falla resultará en muerte eterna Lc. 13.3: “Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.” (3) Trae gozo en el cielo Lc. 15.7, 10: 7Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento. 10Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente.

LA FORMA EN QUE EL ARREPENTIMIENTO ES PRODUCIDO Jesús enseñó que los milagros no producen arrepentimiento Mt. 11.20, 21: 20Entonces comenzó a reconvenir a las ciudades en las cuales había hecho muchos de sus milagros, porque no se habían arrepentido, diciendo: 21¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza.

Tampoco el regreso de uno de los muertos podría, en sí mismo, producir arrepentimiento Lc. 16.3O, 31: 30Él entonces dijo: No, padre Abraham; pero si alguno fuere a ellos de entre los muertos, se arrepentirán. 31Mas Abraham le dijo: Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se levantare de los muertos. a) Es un don de Dios Hec. 11.18: 18Entonces, oídas estas cosas, callaron, y glorificaron a Dios, diciendo: ¡De manera que también a los gentiles ha dado Dios arrepentimiento para vida!

2 Tm. 2.25: 25que con mansedumbre corrija a los que se oponen, por si quizá Dios les conceda que se arrepientan para conocer la verdad. Hech. 5.31: 31A éste, Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados. El que piensa que puede vivir por fe y en el mundo y después arrepentirse esta equivocado Heb. 12.16-17: 16no sea que haya algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura. 17Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas.

b) A través de medios instituidos divinamente (1) En relación a los no salvos a) Por medio de creer en la Palabra de Dios Jn. 3.5, 6: 5Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. 6Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.

b) Por medio de la Bondad de Dios Ro. 2,4: 4¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, (autosujeción ante la provocación, ecuanimidad y paciencia) ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento? 2 P. 3.9: 9El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.

(2) En relación al cristiano a) Por medio de la reprobación y disciplina de Dios Heb. 12.6, 10,11: 6 Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo. 10 En efecto, nuestros padres nos disciplinaban por un breve tiempo, como mejor les parecía; pero Dios lo hace para nuestro bien, a fin de que participemos de su santidad. 11 Ciertamente, ninguna disciplina, en el momento de recibirla, parece agradable, sino más bien penosa; sin embargo, después produce una cosecha de justicia y paz para quienes han sido entrenados por ella. Apoc. 3.19: 19Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete.

b) Por medio de una nueva visión de Dios Job 42.5, 6: 5De oídas te había oído; mas ahora mis ojos te ven. 6Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y ceniza. c) Por medio de la reprobación de un hermano 2 Ts. 2.14-16: 14a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo. 15Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra. 16Y el mismo Jesucristo Señor nuestro, y Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia.

FRUTOS DEL ARREPENTIMIENTO a) Una confesión de pecado Lc. 18.13: 13Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Lea 2 Cro. 7.14 b) Una actitud de verdadero arrepentimiento llevará a uno a hacer restitución por lo mal hecho tanto en cuanto sea posible Lc. 19.8: 18Vino otro, diciendo: Señor, tu mina ha producido cinco minas.

c) Por fe. Segundo elemento esencial para recibir la salvación. Juan Calvino: "Cuando Juan Pérez entra por una puerta, ¿quién entra primero Juan o Pérez? De la misma forma es difícil estar seguro cual viene primero, el arrepentimiento o la fe, sabemos que los dos son necesarios." Thiessen: "Como el caso del arrepentimiento, también es en el caso de la fe, la doctrina no recibe la atención que merece. Gran énfasis esta puesto sobre la conducta; el credo del hombre es dicho ser un evento de indiferencia. Sin embargo, la vida del hombre está gobernada por lo que cree, y en la religión por la PERSONA en quien cree."