El Betis Fútbol Club ofreció copa de su triunfo al Señor del Gran Poder de Sevilla Jesús del Gran Poder es obra de Juan de Mesa (1620). Se encuentra en Basílica del Gran poder (Plaza de San Lorenzo).
Me pareció bien bello, hermoso y además, muy significativo que un Equipo que ha tenido que enfrentarse de forma aguerrida y hasta fuerte con otros equipos, tenga la sutileza de llevar la Copa al Señor del Gran Poder en Sevilla.
Pero más emocionante. fue observar a toda una. multitud de fanáticos y Pero más emocionante fue observar a toda una multitud de fanáticos y seguidores de este Equipo que le acompañaron. La plaza de San Lorenzo se quedó pequeña. Era una mezcla de fe, agradecimiento a Dios con ese estar con ellos, su equipo, por el cual lo habían dado todo.
La nota de prensa decía: La nota de prensa decía: Con dos ramos de claveles rojos para colocar ante la imagen del Cristo y con la Copa llevada entre el portero Toni Prats y el centrocampista Juan José Cañas, los miembros del Betis llegaron a las inmediaciones de la iglesia y se desplazaron a pie por la cercana calle Conde de Barajas.
La ceremonia contó con la presencia del cardenal de Sevilla, Carlos Amigo Vallejo. Quien a viva voz les dijo: "Ustedes no han ganado una copa, ustedes se han ganado el corazón de muchas personas, han hecho felices a muchas familias", agregó "que venga muchas veces al Señor del Gran Poder a traerle muchos trofeos".
Los jugadores, en medio de la emoción, subieron al camarín del Señor del Gran Poder para besar el talón de la imagen. Este beso no era aquel que se le da a la copa cuando se recibe el día que se obtiene el triunfo. Es un beso de silencio, de reflexión y de una mirada que queda en el corazón y para siempre.
Dios se ha querido quedar entre nosotros Dios se ha querido quedar entre nosotros. Por eso, la imagen del Señor del Gran Poder, es una respuesta al amor de Dios que no escatimó esfuerzo para ofrecer a su hijo en la cruz.
Debo decir … Que toda devoción a una imagen es un acto de culto público que ayuda a acercarnos más a Dios. Que la imagen del Señor del Gran Poder de Sevilla nos demuestra que por mucha fama o prestigio se tenga, Dios ocupa el mejor lugar de cualquier corazón. Todo cristiano está llamado a adorar solamente a Dios. Cuando se encuentra frente a una imagen la venera, es decir, la respeta y la valora porque en ella está un misterio del amor de Dios a la humanidad. P. Marcelo