CONSERVANDO A LOS JOVENES DENTRO DE LA IGLESIA
UNA La mitad de los jóvenes que son criados dentro de la iglesia la deja cuando cumplen aproximadamente los 25 años. ALARMANTE REALIALIDAD
¿Por qué los Perdemos? A. Porque nos hemos concentrado en que aprendan las doctrinas de la iglesia, pero no nos hemos interesado en profundizar su relación con el Dios de la iglesia. La mayoría de los muchachos que se marchan, salen con una comprensión bastante buena del mensaje adventista.
¿Por qué los Perdemos? B. Por la indiferencia de los adultos de la iglesia. “Se reporta un y otra vez, que la razón principal por la cual la gente se va de la iglesia, no es doctrinal, sino relacional”. Roger Dudley
¿Por qué los Perdemos? C. Al 50% de los jóvenes que se irán de nuestra iglesia, los habremos perdido en su misma niñez. Proverbios 22:6: “Instruye al niño en el camino que debe seguir, y ni aún en su vejez se apartará de el”. “Instruye al niño en el camino por el que debe seguir, y recórrelo tú con él”.
¿Cómo Evitar que los Jóvenes se Marchen de la Iglesia? A. Fortalecer la relación personal de los jóvenes con Cristo: Nuestra mayor meta es que los jóvenes se conviertan en adultos cristianos maduros.
¿Cómo Evitar que los Jóvenes se Marchen de la Iglesia? B. Que los adultos de la iglesia muestren una actitud amistosa y amorosa hacia ellos.
¿Cómo Evitar que los Jóvenes se Marchen de la Iglesia? C. Que cada joven pueda contar con un mentor: Ser mentor se trata de regalar tu tiempo y recursos a otra persona.
¿Cómo Evitar que los Jóvenes se Marchen de la Iglesia? D. Fortalecer el ministerio de la invitación infantil y juvenil: Involucrar a los niños y jóvenes en todos los aspectos de la vida de la iglesia.
GENERACIÓN PODEROSA JUAN 14:12 “Os aseguro: “El que cree en mí, las obras que Yo hago, él también las hará. Y mayores que éstas hará, porque Yo voy al Padre””.
GENERACIÓN PODEROSA Juan 14:12 “Jamás lograron los hombres resultados más grandes en favor de Dios y de la humanidad que los que puedan lograr en ésta época nuestra, quienes sean fieles al cometido que Dios les ha confiado”. Patriarcas y Profetas Pg. 599.