Misa de acción de gracias por "los curetas" de Monzón
El cardenal Antonio Cañizares dijo que "el sacrificio de "los curetas" de Monzón (Jordán y Nadal), y benedictinos no fue estéril porque no hay quien pueda destruir el amor. Se fiaron de Dios y se ha manifestado en ellos, y ahora son estímulo e intercesión para nosotros. La Iglesia no puede olvidar a los mártires ya que su sangre es semilla de futuro, de amor y de vida, además de alegría para la propia Iglesia y para España. Dios estaba con ellos y por eso hoy -por ayer- damos gracias. Todos dieron testimonio de su fe, pidieron perdón y perdonaron. Amaban a su patria. Más de medio millar de fieles, sacerdotes, monjes de Leyre y Montserrat, del Verbo Divino, monjas de la Orden de Belén del Monasterio de Sijena, benedictinas, Cabildo catedralicio de la diócesis, y sacerdotes de la misma, familiares de los beatos y autoridades asistieron a la celebración, en la que los cantos fueron acompañados por la Coral Montisonense
FIRMA EN EL LIBRO DE ORO DE LA CIUDAD El cardenal Cañizares, invitado por la alcaldesa, Rosa María Lanau, estampó su firma en el Libro de Oro de la ciudad, resaltando que "Monzón puede sentirse orgulloso de tener como intercesores a "los curetas", que sirvieron maravillosamente a la noble ciudad de Monzón hasta dar su vida. Mis mejores deseos y bendición para Monzón por intercesión de sus beatos mártires". FIRMA EN EL LIBRO DE ORO DE LA CIUDAD El cardenal Cañizares, invitado por la alcaldesa, Rosa María Lanau, estampó su firma en el Libro de Oro de la ciudad, resaltando que "Monzón puede sentirse orgulloso de tener como intercesores a "los curetas", que sirvieron maravillosamente a la noble ciudad de Monzón hasta dar su vida. Mis mejores deseos y bendición para Monzón por intercesión de sus beatos mártires".
Emocionantes fueron los momentos en los que Cañizares recibió las ofrendas, entre ellas un paño rojo y una palma verde que se colocaron sobre las arquetas con los restos de los beatos. La palma verde la portaba Francisco Banzo, una de las personas que convivió con "los curetas " y testificó en el proceso para su beatificación. El cardenal incensó las arquetas de Jordán y Nadal colocadas al pie del Altar, y al final de la misa fueron trasladadas al lugar de su reposo definitivo al pie del nuevo retablo tallado en maderas nobles por un grupo de artistas voluntarios de Monzón nuevo Resaltar asimismo que estuvieron presentes los obispos de Almata (Kazajistán), José Luis Mumbiela (hijo de Monzón), y el de Teruel, Carlos Escribano, también muy ligado a Monzón desde su niñez. 14/04/ :23:04