El Fruto del Espíritu “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley” (Gálatas 5:22-23).

La vida cristiana comienza cuando con un corazón sincero, nos acercamos a Dios con fe para cumplir las condiciones del Evangelio Jesús mandó a Sus discípulos a hacer más discípulos cristianos, “bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19)

Juan 15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. Y Pablo registró que los cristianos habían sido sepultados juntamente con Cristo para nacer a una nueva vida, nuevos destinos y nuevas responsabilidades. ¿Cuál es la responsabilidad de aquella persona que ha entrado a través de las puertas abiertas del cristianismo para encontrar y vivir una vida nueva? Rom 7:4 “Así también vosotros, hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.”

El Fruto Jesús no fue un agricultor, pero muchas de sus enseñanzas tenían que ver con la agricultura. Entonces, no es una sorpresa que Pablo usara el mismo simbolismo para hacer referencia a la vida cristiana

Pablo hizo referencia en forma singular al “fruto” del Espíritu Obras de la Carne vs Frutos del Espíritu

Se puede dividir generalmente el fruto del Espíritu en tres partes: La primera parte (amor, gozo y paz) La segunda parte (paciencia, benignidad y bondad) Y la tercera parte (fe, mansedumbre y templanza) Un Fruto: *Produce según su género *Crece dada las condiciones adecuadas

…del Espíritu El fruto que el cristiano debe producir no tiene una naturaleza humana, sino tiene su origen en el Espíritu El Espíritu produce fruto en la vida cristiana a través de la semilla de la Palabra (Lucas 8:11) Luc 8:11 “Esta es, pues, la parábola: La semilla es la palabra de Dios.”

…del Espíritu Jesús indicó en Mat 13:23 “Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.” Juan 15:2,3 “Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado.”

…del Espíritu Col 1:9,10 “Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual, para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios;”

…del Espíritu 2Ti 3:16,17 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.”

¡Toda semilla tiene su proceso y debe ser regada! No podemos plantar unas semillas de manzana y al otro día esperar a tener un árbol lleno de manzanas Por eso, no podemos esperar a tener estos atributos de un día a otro

¡Toda semilla tiene su proceso y debe ser regada! ¿Qué sucedería si planto una semilla, pero no la riego ni cuido? ¿Cómo alimento o fortalezco esta semilla para que dé fruto?

“Por sus frutos los conoceréis” Si no se mucho de botánica, pero veo una pera que cuelga de la rama de un árbol ¿Qué será aquel árbol? De la misma manera, se puede identificar a los cristianos por medio de sus frutos. Mat 7:16,17 “Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.”

“Por sus frutos los conoceréis” Por otra parte, se ha declarado una sentencia para quienes no estén llevando fruto Juan 15:2 “Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará…” Versículo 6 “El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden.”

Conclusión Muchos hemos tomado una sabia decisión, obedecer al plan de Dios para salvación, pero esto no queda solamente ahí, también es necesario como hijos de Dios llevar frutos que den a conocer QUÉ SOMOS. El fruto del Espíritu no es solo una de ellas, no se trata de elegir la que más me gusta, el fruto del Espíritu son todas ellas

Es muy probable que no conseguiremos tener esas cualidades de un día a otro, esto tiene su proceso Fortalezcamos esta semilla plantada en nuestros corazones y permitamos que nuestro Dios las fortalezca mediante oración, estudio, cantos, meditación, cosas espirituales. Recuerde que un manzano no da peras