El Espíritu Santo en el envío de Misioneros Daniel Pelozo

Introducción 4 veces en el libro de Hechos aparece la expresión “El Espíritu Santo dijo” ¿Qué hubiese pasado si no hubiese hablado el Espíritu Santo? ¿Qué hubiese pasado si el siervo no hubiese escuchado y hablado?

El Espíritu Santo dijo a Felipe – Hechos 8: El eunuco iba leyendo Isaías 53:7-8 Él venía del templo, de un gran culto volvía vacío de Dios. Los judíos todavía no entendían el mensaje era también para los gentiles. Volvía sin conocimiento de Dios, pero con una copia de las Escrituras. En medio de este panorama el espíritu Santo habla a Felipe para darle el mensaje a un solo hombre El eunuco no hubiese regresado y predicado a Etiopía. Así obra Dios. La iglesia de Etiopía inició en un pequeño arroyito a la vera del camino que conduce a Gaza.

El Espíritu Santo dijo a Pedro – Hechos 10:19-20 Cornelio era un centurión - romano a cargo de 100 hombres. Era Comandante de la cohorte denominada “ la Italiana” Era un semi prosélito del judaísmo – aceptaba y practicaba el judaísmo pero no la circuncisión. Varón justo, temeroso de Dios, de buen testimonio, (22) recibió instrucciones de un ángel para hacer venir a Pedro. Qué hubiese sido de Cornelio si Pedro no obedecía el mandato de Dios. No hubiese recibido el Espíritu Santo Los apóstoles no se hubieran dado cuenta de que el evangelio era para todas las naciones. Tal vez nosotros no estuviéramos aquí.

El Espíritu Santo dijo a la Iglesia – Hechos 13:1-3 Aquí inicia lo que podríamos llamar “Los Hechos del Apóstol Pablo” – Pablo pasa a ser el protagonista del libro de Hechos. Eran de una iglesia poderosa. Con profetas y maestros Con ministración y manifestaciones espirituales. Una iglesia sensible a la voz de Dios ¿Qué hubiese sucedido si desoía la vez del Espíritu Santo de apartar a Saulo y Bernabé? No estaríamos nosotros. No hubiese existido Timoteo y casi todo el Nuevo Testamento.

El Espíritu Santo dijo a Pablo – Hechos 21:11-14 Agabo era un reconocido profeta (11:28) que predijo un gran hambre en la tierra. Se cumplió en tiempos del emperador Claudio – Según Flavio Josefo, esto ocurrió en el año 46 d.C. Aparece diciendo que Pablo sería encadenado al ir a Jerusalén. Ellos no querían dejarlo partir pero Pablo les dice: “Estoy dispuesto aún a morir por la causa de Cristo” ¿Qué hubiese sucedido si Pablo no aceptaba el desafío de ser encarcelado? No existirían las hermosas epístolas como la de Filipenses, escrita por Pablo en sus prisiones.

Qué pasa si no respondemos ¿Cuántos paganos se irían al infierno? El espíritu Santo ve cosas que nosotros no vemos: Un hombre leyendo las Escrituras, que yo no veo. En cada ocasión en que el hombre respondió al llamado de Dios, debió dejar su statu quo para ir a lo inseguro. Felipe estaba en su Gran campaña Pedro estaba cómodo esperando el almuerzo representando a la iglesia de Jerusalén, dejó todo para ir a orar por unos gentiles. Pablo fue a predicar a los gentiles y se jubiló en una prisión. Epafrodito – ¡nadie le pone ese nombre hoy a su hijo! – expuso su vida en servicio, se las jugó por Cristo.

Qué pasa si no respondemos El ministerio es una escalera hacia abajo, lavando los pies de los discípulos El camino del ministerio es menguar para que Cristo crezca. Nunca el Espíritu Santo habló a un perezoso. Todos estaban trabajando en algo. Tenemos que reconocer que el Espíritu Santo habla hoy y le dice diferentes cosas a diferentes personas y a veces dice diferentes cosas a las mismas personas, libres o en cárceles Habla o Dios…háblame…