EL PERIODO RADICAL EN COLOMBIA Con el nombre de radicales pasó a la historia del siglo XIX una generación de políticos, periodistas y escritores que gobernó al país durante un período aproximado de veinticinco años, que corren entre la promulgación de la Constitución de 1863 y el fin del segundo período presidencial de Rafael Núñez, que se cierra con la entrada en vigencia de la Constitución de 1886.
Hasta 1880 en el país solo había liberales y conservadores Hasta 1880 en el país solo había liberales y conservadores. A partir de esta fecha el partido liberal se divide en dos grupos. Uno encabezado por Núñez, partidario de hacer reformas a la Constitución de 1863 y de darle un giro a algunos aspectos de la política como las relaciones con la Iglesia, buscando para ello la colaboración de la opinión conservadora. Otro, el sector gobernante que aceptando la posibilidad de hacer reformas a la Constitución defendía la gestión política y la obra de gobierno realizada por los liberales. Al grupo de Núñez, se le llamó «moderados». A los que estaban en el gobierno, se les dio el nombre de «radicales».
Los presidentes que tuvo Colombia en ese período duraban en el poder dos años, circunstancia que, permitía ver en la presidencia de la República caras nuevas y, por otra, no permitía que los presidentes desarrollaran una obra coherente que dejara una huella notable de su gestión presidencial. Pero, a pesar de este aspecto, el período radical tiene unas características muy propias y homogéneas. Los radicales defendieron la independencia del Estado colombiano y la oficialización de la educación, y tuvieron como eje constitucional la Constitución de Rionegro, la cual simbolizó la plenitud del ideario liberal. El "radicalismo" era el gran defensor de las libertades individuales en términos absolutos, y en consecuencia, el promotor del liberalismo económico o "laissez faire".
Hasta 1880 en el país solo había liberales y conservadores Hasta 1880 en el país solo había liberales y conservadores. A partir de esta fecha el partido liberal se divide en dos grupos. Uno encabezado por Núñez, partidario de hacer reformas a la Constitución de 1863 y de darle un giro a algunos aspectos de la política como las relaciones con la Iglesia, buscando para ello la colaboración de la opinión conservadora. Otro, el sector gobernante que aceptando la posibilidad de hacer reformas a la Constitución defendía la gestión política y la obra de gobierno realizada por los liberales. Al grupo de Núñez, se le llamó «moderados». A los que estaban en el gobierno, se les dio el nombre de «radicales».
PRESIDENTES DEL PERIODO RADICAL (1863-1886) Manuel Murillo Toro 1861- 1864 General Santos Acosta Castillo1867-1868 General Santos Gutiérrez Prieto1868-1870 General Eustorgio Salgar1870-1872 Santiago Pérez Manosalva1874-1876 Aquileo Parra1876-1878 General Julián Trujillo1878-1880Rafael Nuñez1880-1882 Francisco Javier Zaldúa1882 Clímaco Calderón1882 José Eusebio Otálora1882-1884 Ezequiel Hurtado1884
CARACTERISTICAS DEL PERIODO RADICAL ECONOMÍA: Al haberse establecido leyes librecambistas, Colombia se integró al mercado internacional como un país exportador de materias primas y como importador de productos terminados. Durante el período radical, los gobiernos se preocuparon por estimular esta economía y por esta razón se vio la necesidad de construir vías de comunicación que hicieran posible el traslado de los productos desde las zonas productoras hasta los puertos fluviales y marítimos. Durante la década de 1860 los esfuerzos se concentraron en la construcción de carreteras. El principal producto de exportación durante el período radical fuel el tabaco. También se exportaba oro, quina o añil.
El café, aunque ya se cultivaba en algunas regiones del occidente del país, no era todavía un producto exportable. La decisión sobre qué producto debía exportarse se tomaba teniendo en cuenta las necesidades del mercado internacional. El producto por excelencia para exportarse era el tabaco. La economía se desarrollaba hacia afuera y casi no existía ningún avance económico en el interior. Se fortalecieron los grupos regionales de terratenientes y comerciantes a quienes el Estado solicitaba préstamos a fin de solucionar su caótica situación económica. A la crisis económica se sumó el descrédito del Gobierno Central y la caída de las ventas del tabaco a partir de 1876.