Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren. Jn. 4,24 ADORACIÓN
Mi espíritu está exaltado. Mi corazón, trémulo de amor, ha entrado en adoración. Mi alma se regocija en ti; saber que estás alrededor de mí,que como escudo Me has rodeado, Hace que el gozo que con tu salvación me has dado, se acreciente Como una inmensa ola dentro de mí.
Tú me has amado. Y es tan grande ese Amor que en mí has Derramado, Que de mis iniquidades te has olvidado Y en el fondo Del mar, misericordioso, las has escondido.
Con tu diestra Me has sostenido Cuando hacia el abismo infernal Con prisa avanzaba, Y como un ave a sus Polluelos Me guardaste bajo Tus alas; Y en princesa, ¡hija del Rey! Me has convertido.
Tus palabras de amor para mí Me llenan de júbilo Inefable, Y me colma tu amor Incomparable Cuando me llamas: Paloma mía, Hermosa mía. Me dices que soy La niña de tus ojos.
Me dices: eres mía. Yo te redimí. Y palpitante de amor Ante ti, En tu dulce Presencia Postrada,de hinojos, Me derramo en Adoración Y entono para ti Canción, Mientras me sumerjo En la ternura De tus ojos. fin