Sermón # 5. La esposa como enamorada, intercesora, y discernidora. Serie “Guiando a mi familia según el plan de Dios”. Sermón # 5. La esposa como enamorada, intercesora, y discernidora. Pastor Yaciel Toledo.

Contenido Orden de Dios para la familia. Deberes de los padres para con sus hijos.

Texto clave 1Co 11:3 Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo.

La esposa es reflejo del amor de Dios 1Jn. 4:19 – 21. Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero. Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano. Jn. 13:35 En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.

La esposa es reflejo del amor de Dios El atender a tu esposo y a la familia debe ser un gozo y reflejar el corazón de una sierva del Señor. Perdona rápidamente, no guardando un registro de los agravios que te han hecho, toma fuerzas de la palabra. Dios también te ha perdonado a ti. Una profunda relación con Dios te dará la capacidad de sobrellavar las circunstancias, ministrar sanidad tu alrededor y mantenerte en integridad. Cuida tus palabras, tienen el poder de la vida y de la muerte, de sanar y también de causas dolor. Pro 18:21 La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos. Utiliza las palabras para alimentar y sanar, nunca para destruir, sembrar duda o preocupación.

La esposa es enamorada y compañera. Ctar. 2:16 Mi amado es mío, y yo suya; el apacienta entre lirios. 1P. 3:3 – 6. Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos, sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios. Porque así también se ataviaban en otro tiempo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios, estando sujetas a sus maridos; como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras habéis venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza.

La esposa es enamorada y compañera. El primer ministerio de la mujer es hacia su esposo, no lo desatiendas. Puedes sin embargo desarrollar cualquier otro ministerio dentro del cuerpo de Cristo, siempre que estés segura que sea de Dios; sin desatender por ello a la familia. Es vital que la mujer de Dios se mantenga arreglada y de apariencia agradable como un honor a su marido y para agradarle a él. (Recuerda que el hombre se llena por la vista) ¡Cuidado!.

La esposa es enamorada y compañera. Aquí no estamos hablando de que seas una modelo y te rijas por lo último de la moda, más bien de tu higiene personal y de no descuidar tu apariencia. Cada mujer tiene los atributos que Dios le quiso otorgar. Úsalos para la gloria de Dios y el agrado de tu esposo. Déjate guiar por el Espíritu Santo de Dios pídele que te enseñe cómo ministrar efectivamente a tu esposo en el área física. Recuerde que el sexo o relación matrimonial es una forma de relajar tenciones, evita el estrés (Excepto cuando se pretende realizar de forma desmedida) y ayuda en la comprensión y compenetración de la pareja. Es decir, que es medicinal.

La esposa es enamorada y compañera. 1Co 7:3 – 5. El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido. La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer. No os neguéis el uno al otro, a no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia.

La esposa es reflejo de la creatividad de Dios. 1Co 12:7 Dios nos enseña que, cuando el Espíritu Santo nos da alguna capacidad especial, lo hace para que procuremos el bien de los demás. Tit. 2:3- 5. Diles a las ancianas que se comporten como personas que aman a Dios. No deben ser chismosas ni emborracharse sino, más bien, ser un buen ejemplo para las mujeres más jóvenes y enseñarles a amar a sus esposos e hijos. También deben enseñarles a pensar bien lo que van a hacer y a ser dueñas de sí mismas, a atender bien a su familia y sujetarse a su esposo. Así nadie podrá hablar mal del mensaje de Dios.

La esposa es reflejo de la creatividad de Dios. Cada mujer tiene dones y talentos únicos. No te compares con otras, más bien permite que Dios desarrolle en ti aquello que realmente eres. Las mujeres reflejan un aspecto muy importante de la personalidad de Dios y es su creatividad. (Capacidad de modificar las cosas y hacer de ello maravillas). Tus dones y talentos deben complementar a los de tu esposo y Viceversa. La pareja debe fluir en armonía aún cuando estén ministrando o trabajando por separado en un momento dado. 1Co 12:25 Así las partes del cuerpo (De la iglesia) se mantienen unidas y se preocupan las unas por las otras.

La esposa es intercesora y discernidora. Ef. 6:18 No se olviden de orar. Y siempre que oren a Dios, háganlo dirigidos por el Espíritu Santo. Manténganse en estado de alerta, y no se den por vencidos. Oren siempre, pidiendo por todos los que forman parte del pueblo de Dios. 1Tes. 5:17 Oren en todo momento. La intercesión de las mujeres de Dios a favor de su esposo y su familia, traen a su corazón una tranquilidad y certeza de cuidado de Dios para con ellos. Usa la autoridad que te ha sido dada por Dios en contra de las fuerzas del enemigo.

La esposa es intercesora y discernidora. Tú eres la principal intercesora a favor de tu esposo, permanece alerta para clamar a Dios por tu hogar en medio de los ataques del enemigo. Pídele a Dios que te de el discernimiento para ser llena de sabiduría a fin de proteger a tu familia de las acechanzas del maligno. Recuerda que tú eres el radar de tu casa. Una mujer desorientada espiritualmente no estará en condiciones de cuidar a su familia de las artimañas del diablo, y ella misma caerá en su lazo (Eva es el mejor ejemplo de la desorientación y sus consecuencias).

La esposa es intercesora y discernidora. 1Jn. 4:1- 3. Queridos hermanos, no les crean a todos los que dicen que tienen el Espíritu de Dios. Pónganlos a prueba, para ver si son lo que dicen ser. Porque el mundo está lleno de falsos profetas. Ustedes pueden saber si una persona tiene el Espíritu de Dios cuando esa persona reconoce que Jesucristo vino al mundo como verdadero hombre. Si alguien dice que esto no es cierto, es porque no tiene el Espíritu de Dios. Más bien tiene el espíritu del Enemigo de Cristo. Ustedes ya habían oído que este espíritu tenía que venir, y yo quiero decirles que ya está en el mundo. Hasta aquí hemos estudiado algunas funciones que convierten a la mujer de Dios en verdadera ayuda idónea para su marido.

Sermón # 5. La esposa como enamorada, intercesora, y discernidora. Serie “Guiando a mi familia según el plan de Dios”. Sermón # 5. La esposa como enamorada, intercesora, y discernidora. Pastor Yaciel Toledo.