1- LOS CONCEPTOS BÁSICOS DE LA NUEVA MUSEOLOGÍA Definición. Objeto de estudio. Concepto de patrimonio. Museo. Definición e historia. Museo tradicional y museo contemporáneo. Funciones. Tipos de museo.
¿Qué es la museología? ICOM: Es la ciencia del museo; estudia la historia y razón de ser de los museos, su función en la sociedad, sus peculiares sistemas de investigación, educación y organización, la relación que guarda con el medio ambiente físico y la clasificación de los diferentes tipos de museo.
Definición: ciencia del museo. Objeto de estudio: objeto propio y específico, tanto material como formal: el museo. Objeto patrimonial – cultura material a través del objeto. Es una ciencia autónoma, porque posee los tres elementos: a- histórico: capacidad de expresión y referencia a hechos reales. b- teórico: le permite explicar de forma global contenidos y comportamientos parciales, enunciar principios normativos y emitir juicios de valor estimativo. c- práctico: capacidad de obtener resultados adecuados a través de su técnica, la museografía, y del con- curso interdisciplinario de otras ciencias. Es una ciencia social y de acción.
Los parámetros de la Nueva Museología: (M.Maure)
La historia del museo: La palabra museo significa “casa de las musas”. En la Grecia clásica, las musas eran las diosas inspiradoras de la música, la poesía, las artes y las ciencias. Eran hijas de Zeus y de Mnemósine, diosa de la memoria. El poder que se les atribuye con más frecuencia es el de traer a la mente del poeta mortal los sucesos que ha de relatar, así como otorgarle el don del canto y darle elegancia a lo que recita. Musaeus: legendario filósofo, poeta, músico, historiador; según algunos, maestro de Orfeo. Se cree que fue enterrado en la Colina de las Musas (hoy, Colina de Filopappo), en Atenas, en el mismo lugar donde, tiempo después, se erigió el monumento a Filopappo, cónsul romano.
La colina de Filopappo o “Colina de las Musas” en Atenas: La cárcel de Sócrates La Acrópolis vista desde Filopappo
Las primeras colecciones de arte las encontramos en los peristilos de los templos antiguos. Delfos, la ciudad de los oráculos, se gloriaba de poseer un tesoro de esta especie repartido en tantas salas como diversos pueblos había; el templo de Juno en Samos y la Acrópolis estaban llenos de obras maestras del arte. Los sucesores de Alejandro Magno se esforzaron en reunir esculturas de todas clases. Con ellas hacían más ostentosas sus marchas de triunfo y además las empleaban en el embellecimiento de sus capitales: el arte, en estas ocasiones, daba vida y movimiento al cuadro. Roma siguió este ejemplo. Las imágenes de los dioses de los pueblos vencidos formaron parte del cortejo del vencedor y vinieron en el mismo lugar que los prisioneros. Entre los emperadores romanos, Nerón hizo venir de Delfos 500 estatuas para adornar su palacio imperial. Todo esto, sin embargo, no formaba aún lo que llamamos hoy un museo. Los edificios públicos y los palacios estaban adornados con mucho gusto. El arte se mezclaba allí con la naturaleza viva.
Los museos comenzaron siendo templos: su propio nombre en griego los identifica como "templos de las musas"; y fueron templos donde se guardaban objetos valiosos, los tesoros de los dioses ("thesauroi"); su dimensión pública era solamente religiosa. La dimensión pública de los que sostuvieron los romanos estaba sin embargo teñida de publicista: en ellos se exhibían (en templos, termas y pórticos), los botines de guerra arrancados a los enemigos; los de Isis o Serapis, fueron así autenticas y magnificas colecciones de arte egipcio. El coleccionismo recibió, por iguales razones, un gran espaldarazo en Bizancio; de Constantino se ha dicho que solo tiene parangón en la historia con Napoleón Bonaparte, en relación con su afición por el coleccionismo.