Un día estaba Dios pensando en cada uno de sus hijos
Y pensó especialmente en los de segundo grado del Hogar...
Cada uno con sus dones y cualidades...
Y pensó en darles algo pero qué...juguetes?...
Ya se, les daré la felicidad
Envuelta en una hermosa caja
Para que se alegren mucho al recibirla
Dentro de ese regalo pondré muchas cosas: primero que todo pondré el amor
Después pondré un planeta hermoso...
árboles que les den frutos...
Enséñame a ser agradecido Contigo y con los demás, a Cuidar lo que me has dado y Ser así el hijo que tú esperas. Te doy garcias por todas las Cosas que me has dado y te Ruego que cada día, cuidando Con amor lo que me has dado, Pueda destapar y disfrutar el Regalo que me has dado: la felicidad.