Tema V PREPARANDONOS ANTES, DORANTE Y DESPUES DE SER PAPÁ Y MAMÁ

Objetivo: Oración inicial. Descubrir la importancia de estar preparados para ser papá y mamá antes, durante y después de concebir. Oración inicial.

ILUMINACION BÍBLICA 1 Samuel 1,9-18. Tras haber comido y bebido en Siló, Ana se levantó.- El sacerdote Eli estaba sentado en su silla, contra la jamba de la puerta del santuario de Yahvé, Estaba llena de amargura y oró a Yahvé llorando sin consuelo, he hizo este voto: « ¡Oh Yahvé Sebaot! Si te dignas mirar la aflicción de tu sierva y acordarte de mí, no olvidarte de tu sierva y darle un hijo varón, yo lo entregaré a Yahvé por todos los días de su vida y la navaja no tocará su cabeza*». Mientras ella prolongaba su oración ante Yahvé. Eli observaba sus labios. Ana oraba para sus adentros; sus labios se movían, pero no se oía su voz. Eli creyó que estaba ebria y le dijo: «Hasta cuándo va a durar tu embriaguez? i Echa el vino que llevas!». Pero Ana le respondió: « No señor, soy una mujer acongojada; no he bebido vino ni cosa que embriague, sino que desahogo mi alma ante Yahvé, No juzgues a tu sierva como una mala mujer, hasta ahora solo por pena y pesadumbre he hablado.« Ella dijo:« Que tu sierva halle gracia tus ojos.» Se fue la mujer por su camino, comió y no pareció ya la misma.

Gn 17,1-9 Cuando Abram tenía 99 años, se le apareció Yahveh y le dijo: "Yo soy El Sadday, anda en mi presencia y sé perfecto. Yo establezco mi alianza entre nosotros dos, y te multiplicaré sobremanera." Cayó Abram rostro en tierra, y Dios le habló así: "Por mi parte he aquí mi alianza contigo: serás padre de una muchedumbre de pueblos. No te llamarás más Abram, sino que tu nombre será Abraham, pues padre de muchedumbre de pueblos te he constituido. Te haré fecundo sobremanera, te convertiré en pueblos, y reyes saldrán de ti. Y estableceré mi alianza entre nosotros dos, y con tu descendencia después de ti, de generación en generación: una alianza eterna, de ser yo el Dios tuyo y el de tu posteridad. Yo te daré a ti y a tu posteridad la tierra en que andascomo peregrino, todo el país de Canaán, en posesión perpetua, y yo seré el Dios de los tuyos." Dijo Dios a Abraham: "Guarda, pues, mi alianza, tú y tu posteridad, de generación en generación

Reflexión común: Dios, ha creado al hombre y mujery les ha llamado a la misión degenerar, custodiar y proteger la vida humana de manera libre y responsable. La fecundidad es el fruto y el signo del amor conyugal, el testimonio vivo de la entrega plena y recíproca de los esposos. El amor conyugal debe estar abierto a una nueva vida (Concilio Vaticano II, Gaudium et spes 50 y Humanae Vitae 11) y para evitar graves problemas en cuanto a este cometido de transmitir responsablemente la vida, he ahí la importancia en prepararse, en conocer la doctrina autentica acerca de la regulación de la natalidad, propuesta en el Concilio Vaticano II y en la Encíclica Humanae Vitae.

1.-Antes de la concepción. 2.-Una vez concebido. 3.-Una vez nacido. Creemos muy necesario que la pareja debe prepararse para recibir un nuevo hijo, antes de su concepción, durante el embarazo y después de su nacimiento. Proponemos estas ideas: 1.-Antes de la concepción. 2.-Una vez concebido. 3.-Una vez nacido.

ASIMILACIÓN Y COMPROMISO ¿Recuerdas cómo te preparaste a la concepción de algunos de tus hijos? ¿Cambiarías algo ante un futuro hijo? ¿Cómo has vivido tu último embarazo (papá y mamá)? ¿En qué mejorarías ante un posible nuevo embarazo? ¿Qué factores de riesgo identificas en tu familia? ¿Cómo los vas a sanar? ¿Conoces personas o instituciones que te pueden ayudar? ¿Qué podríamos sugerir y realizar para que las nuevas generaciones de jóvenes se preparan mejor para la paternidad y la maternidad?

Oración por la familia: Dios, de quien proviene toda paternidad en el cielo y en la tierra: Padre, que eres amor y vida, haz que cada familia humana que habita en nuestro suelo, sea por medio de tu hijo Jesucristo, "nacido de mujer" y mediante el Espíritu Santo, fuente Caridad Divina, un verdadero santuario de vida y amor para las nuevas generaciones. Haz que tu gracia guíe los pensamientos y las obras de los cónyuges, para el bien propio y de todas las familias del mundo. Haz que las jóvenes generaciones encuentren en la familia un fuerte sostén humano, para que crezcan en la verdad y el amor. Haz que ei amor, reforzado por la gracia del Sacramento del Matrimonio, se manifieste más fuerte que cualquier debilidad o crisis que puedan padecer nuestras familias. Te pedimos por: (Peticiones de los participantes)