Una intensa y suave acción de gracias se eleva a Dios desde el corazón de quien reza, después de desvanecerse en él la pesadilla de la muerte. Este.

Slides:



Advertisements
Presentaciones similares
10º Domingo del tiempo Ordinario
Advertisements

Este canto litúrgico de acción de gracias está estrechamente vinculado con el Salmo 19: la súplica del pueblo antes de la batalla ha sido escuchada,
Una intensa y suave acción de gracias se eleva a Dios desde el corazón de quien reza, después de desvanecerse en él la pesadilla de la muerte. Este.
“Haced esto en memoria mía”
Recientemente el Papa Benedicto XVI ha urgido, en varias oca- siones, a los cristianos la necesidad de VOLVER A CRISTO, a su Evangelio, a su Camino,
Lectio divina del Salmo dominical
ORAMOS con el SALMO ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
Evangelio según San Lucas
Tiempo Ordinario DOMINGO 13.
Acción de gracias por la curación en peligro de muerte Automático.
Súplica del justo que confía en el Señor Salmo 12 Pase automático.
Lectio divina del Salmo dominical Domingo III de Pascua Hch 5,27b-32.40b-41: Testigos de esto somos nosotros y el Espíritu Santo. Sal 29, a.13b:
T. Ordinario DOMINGO 10 T. Ordinario DOMINGO 10 SALMO (29) SALMO (29) Te ensalzaré, Señor, porque me has librado. Te ensalzaré, Señor, porque me has.
V Señor, ábreme los labios R Y mi boca proclamará tu alabanza V Gloria al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo. R Como era en el principio ahora y siempre.
Lectio divina del Salmo dominical 1Re 17,17-24: Tu hijo está vivo. Sal 29, a.13b: Te ensalzaré, Señor, porque me has librado. Ga 1,11-19:
3º domingo de PASCUA La Liturgia nos invita a reflexionar hoy sobre la IGLESIA. Él acompañará siempre a su Iglesia en la misión, vivificándola con su.
CANTO DE GRATITUD GRUPO FEVIDA. CANTO DE GRATITUD GRUPO FEVIDA.
Cómo rezar el Rosario.
13 Domingo Tiempo Ordinario –B-
CURSO “LA FE DE JESÚS” LO QUE LA BIBLIA ENSEÑA ACERCA DE LA MUERTE
¡Da vida! ¡Disfruta de la vida!.
El Ser humano ante la RELIGIÓN
Jn 13,31-33a Pascua 5 C. 28 abril Comentarios y presentación: M. Asun Gutiérrez. Música: Amor, algo maravilloso.
LLAGAS QUE DAN VIDA. II Domingo de Pascua
XIV domingo Tiempo Ordinario
PENTECOSTÉS Los discípulos de Jesús nos reunimos hoy XIX DEL T.O.
ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
Asunción de la Santísima Virgen María
Pregón de PENTECOSTÉS.
PENTECOSTÉS Los discípulos de Jesús nos reunimos hoy XIX DEL T.O.
PENTECOSTÉS Los discípulos de Jesús nos reunimos hoy XIX DEL T.O.
AL PADRE Y AL HIJO Y AL ESPÍRITU
Conectando con la Gente
XIV domingo Tiempo Ordinario
“Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta?”
Asunción de la Santísima Virgen María
Y CREED EL EVANGELIO CONVERTÍOS. SI VIENES CONMIGO Y ALIENTAS MI FE; SI ESTÁS A MI ¿A QUIÉN TEMERÉ? A nada tengo miedo, a nadie he de temer, Señor, si.
LUNES DE LA IV SEMANA LAUDES. INVOCACIÓN INICIAL V. Señor, abre mis labios R. Y mi boca proclamará tu alabanza V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu.
Meditemos con María el Salmo 112 al venerarla como Madre de Dios
"Tú tienes palabras de vida eterna" DOMINGO XXI T.Ordinario - B
Este Salmo “real” perteneció originariamente al ritual de la entronización de los reyes davídicos. Con gran fuerza poética y en progresión dramática,
Este Salmo “real” perteneció originariamente al ritual de la entronización de los reyes davídicos. Con gran fuerza poética y en progresión dramática,
¡Oh Virgen y Madre de Dios. Yo me entrego por hijo tuyo
ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
El tono de este poema refleja elocuentemente la situación espiritual de los israelitas al término del exilio. ▬ El edicto de Ciro (538 a. C.), que.
Este Salmo “real” perteneció originariamente al ritual de la entronización de los reyes davídicos. Con gran fuerza poética y en progresión dramática,
ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
“Flip Side” Gozo en el sufrimiento.
El salmo de la transformación
Décimo tercer domingo del Tiempo Ordinario
Asunción de la Santísima Virgen María
  Te encuentro en la Palabra, buen amigo Jesús, por eso me gusta escucharla y aprender más de tu vida.  Cuando leo la Biblia, me encuentro contigo.
¡Gracias por la Eucaristía!
Asunción de la Santísima Virgen María
DOMINGO VII DEL TO DOMINGO II DEL T.O. DOMINGO VI DEL T.O.
Este Salmo “real” perteneció originariamente al ritual de la entronización de los reyes davídicos. Con gran fuerza poética y en progresión dramática,
¡Gracias por la Eucaristía!
DOMINGO VIII DEL T.O. ¿PODRÁ UN CIEGO GUIAR A OTRO CIEGO?
¡Gracias por la Eucaristía!
Cómo rezar el Rosario.
▬ El salmo 115 resume perfectamente el sentimiento de Israel en la comida de Pascua, o Seder en la primera noche de la fiesta. ▬ Horriblemente oprimido.
En medio de la soledad y la aflicción (v En medio de la soledad y la aflicción (v. 16), el salmista apela confiadamente a la misericordia divina (v.
5 de mayo 2019 Tercer domingo de Pascua
Exaltación de las virtudes, las obras y la bondad del verdadero justo. Al que observa los mandamientos, Dios le conceda la felicidad ideal para un.
Una intensa y suave acción de gracias se eleva a Dios desde el corazón de quien reza, después de desvanecerse en él la pesadilla de la muerte. Este.
ACCIÓN DE GRACIAS POR LA VICTORIA DEL REY SALMO 20.
En este canto de liberación, Israel agradece al Señor que lo haya salvado de un gravísimo peligro. Varias imágenes se suceden para describir vívidamente.
AREA ARQUIDIOCESANA DE LITURGIA “Celebrar con gozo al Cristo Pascual”
ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
Cómo rezar el Rosario.
Transcripción de la presentación:

Una intensa y suave acción de gracias se eleva a Dios desde el corazón de quien reza, después de desvanecerse en él la pesadilla de la muerte. Este es el sentimiento que emerge con fuerza en el Salmo 29. Este himno de gratitud posee una gran fineza literaria y se basa en una serie de contrastes que expresan de manera simbólica la liberación obtenida gracias al Señor. De este modo, al descenso «a la fosa» se le opone la salida «del abismo» (v 4); a su «cólera» que «dura un instante» le sustituye «su bondad de por vida» (v 6); al «lloro» del atardecer le sigue el «júbilo» de la mañana (v 6); al «luto» le sigue la «danza», al «sayal» luctuoso el «vestido de fiesta» (v 12).

1. CON ISRAEL 2. CON JESÚS 3. CON NUESTRO TIEMPO La "situación concreta evocada" es esta: un enfermo importante, en peligro de muerte, ha sido curado... Esta situación evoca la experiencia de Israel, que después de la agonía del exilio reencuentra la alegría de la alabanza. El pueblo de Israel consideró esta liberación como una especie de "Resurrección": "me hiciste revivir cuando bajaba a la fosa". 2. CON JESÚS Lo que es apenas una imagen, para Israel, es una realidad maravillosa para Jesús: "Tú me has levantado... Tú me has sacado del abismo... Tú me has hecho revivir..." Me gusta imaginar los primeros instantes de Jesús, cuando salió "de la muerte" para "revivir": una palabra de Pedro lo resume todo: "muerto en la carne, fue vivificado por el espíritu." (1 Pedro 3,18). 3. CON NUESTRO TIEMPO El Misterio Pascual es el corazón de nuestra fe cristiana. Un cristiano no es simplemente alguien que "cree en Dios". Esto lo hacen prácticamente todas las grandes religiones. El carácter específico de nuestra fe cristiana es que nosotros "creemos en Jesucristo muerto y resucitado".

Te ensalzaré, Señor, porque me has librado y no has dejado que mis enemigos se rían de mí.

Señor, Dios mío, a ti grité, y tú me sanaste Señor, Dios mío, a ti grité, y tú me sanaste. Señor, sacaste mi vida del abismo, me hiciste revivir cuando bajaba a la fosa.

Tañed para el Señor, fieles suyos, dad gracias a su nombre santo; su cólera dura un instante; su bondad, de por vida; al atardecer nos invita el llanto; por la mañana, el júbilo.

Yo pensaba muy seguro: "no vacilaré jamás" Yo pensaba muy seguro: "no vacilaré jamás". Tu bondad, Señor, me aseguraba el honor y la fuerza; pero escondiste tu rostro, y quedé desconcertado.

A ti, Señor, llamé, supliqué a mi Dios: "¿qué ganas con mi muerte, con que yo baje a la fosa?

¿Te va a dar gracias el polvo, o va a proclamar tu lealtad ¿Te va a dar gracias el polvo, o va a proclamar tu lealtad? Escucha, Señor, y ten piedad de mí; Señor, socórreme".

Cambiaste mi luto en danzas, me desataste el sayal y me has vestido de fiesta; te cantará mi alma sin callarse. Señor, Dios mío, te daré gracias por siempre.

ALTIBAJOS DEL ALMA Quiero descubrir mis estados de alma ante ti, Señor, y ante mí mismo, que bien lo necesito. Quiero aprender cómo tratarme a mí mismo cuando estoy de buen humor y cuando estoy de mal talante, cómo capear mi optimismo y mi pesimismo, cómo reaccionar ante la alegría espiritual y el desaliento humano. Vivo a merced de mis sentimientos. Cuando me siento alegre, todo parece fácil, la virtud se hace natural, el amor brota espontáneo, y concibo una firme seguridad de que así ha de ser ya siempre en mi vida. Tú que me conoces bien, Señor, has puesto estas palabras en mis labios al invitarme a recitar el Salmo: «Yo pensaba muy seguro: no vacilaré jamás». Sí, esa era mi falsa confianza. Yo creía que no volvería a vacilar jamás. Bien equivocado estaba, y bien pronto lo iba a verificar. Tu Salmo continúa como lo hace mi vida: «Pero escondiste tu rostro y quedé desconcertado». Volvía estar peor que antes. No valgo para nada; no aprenderé nunca; después de tantos años, vuelvo a estar como cuando empecé. Cuando me va mal, me desespero, me olvido de que antes me había ido bien y me convenzo de que ya nunca volverá a sonreírme la vida; y cuando me va bien, me olvido también de que antes me ha ido mal, y presumo con seguridad absoluta que ahora ya siempre me irá bien, que no hay nada que temer y que la batalla está ya ganada para siempre. Me falla la memoria, y eso me multiplica el sufrimiento. Esa es mi oración: Que cuando me vaya bien, me acuerde de que antes me ha ido mal; y que cuando me vaya mal, confíe que pronto me volverá a ir bien. Entonces si que «te daré gracias por siempre, Señor, Dios mío».

Padre amante, Dios clementísimo, no permitas que nuestros enemigos se rían de nosotros: como sacaste la vida de tu Hijo del abismo y le hiciste revivir cuando bajaba a la fosa, cambia así también nuestro luto en danzas y, si en el atardecer de este siglo nos visita el llanto, haz que por la mañana de tu retorno nos visite el júbilo y en él vivamos, por los siglos de los siglos. Amén.