BODAS DE SANGRE FEDERICO GARCÍA LORCA

LA RENOVACIÓN TEATRAL Domina en la escena un teatro de consumo: musical o alta comedia burguesa. Destaca Jacinto Benavente, que alejó las exageraciones melodramáticas y reflejó la ideología burguesa. Se basa en la verosimilitud: los conflictos de los personajes se parecen a los cotidianos y los sentimientos no están exagerados. Destaca Los intereses creados. También se escribe un teatro poético modernista. Solían recrear asunto históricos y usaban un verso sonoro y efectista. Destacan Eduardo Marquina y Francisco Villaespesa.

Teatro El teatro en la época era el principal medio de entretenimiento. Había numerosos autores y obras. Mucha gente vivía de este negocio. El teatro era principalmente comercial, con obras de Benavente o modernistas. Destacan autores como Carlos Arniches, que escribió sainetes de ambiente madrileño donde crea el lenguaje castizo, o los hermanos Quintero, que llevaban a escena una falsa y superficial Andalucía, o Muñoz Seca, famoso por su parodia de los dramas históricos neorrománticos La venganza de Don Mendo. Sin embargo, había una serie de autores preocupados por la renovación de la escena española. Los que consiguieron renovar la escena teatral española fueron Ramón María del Valle-Inclán y Federico García Lorca.

El teatro de Lorca Durante los años veinte se suceden intentos de renovación dramática, pero las agrupaciones teatrales independientes, siempre con dificultades económicas, fueron efímeras. Con el advenimiento de la Segunda República, se propició desde instancias gubernamentales el acercamiento de la cultura a otros medios sociales. Se fundan las Misiones Pedagógicas para llevar la cultura al pueblo. Entre otras cosas, se llevó teatro al pueblo gracias a grupos teatrales surgidos del ámbitos universitario. Uno de esos grupos fue La Barraca, impulsado por Federico García Lorca. Además de poeta, Lorca fue un gran autor dramático. Experimentó con diversas formas teatrales. Su teatro se desarrolla en dos vías diferentes: a) el teatro vanguardista próximo al surrealismo, donde destacan El público y Así que pasen cinco años; b) el teatro realista.

El teatro de Lorca Su teatro realista es más convencional estéticamente. En él el tema general es la marginación social de las mujeres. Bodas de sangre y Yerma son dos tragedias de sabor clásico, en las que Lorca mezcla la prosa y el verso, utiliza coros como en la tragedia griega, maneja elementos simbolistas y alegóricos y emplea recursos para lograr una gran intensidad dramática. La casa de Bernarda Alba es obra cumbre de su arte dramático. En ella aparecen temas habituales de su obra: la libertad frente a la autoridad, las pulsiones eróticas y los instintos naturales enfrentados a normas morales y sociales, la esterilidad y la fecundidad, la frustración vital o la condición sometida de la mujer. Es una reflexión sobre el poder, sobre cómo se interiorizan los mecanismos de poder en la vida privada.

Bodas de sangre Lorca triunfó en el teatro con Bodas de sangre. Su estreno tuvo lugar en marzo de 1933 en Madrid y fue aclamada unánimemente. Bodas de sangre es el primer título de una trilogía trágica sobre la tierra. El autor trataba de rescatar lo mítico de su Andalucía natal. La segunda obra fue Yerma (1934). La tercera no llegó a escribirse.

Bodas de sangre La obra se basa en un suceso real acaecido en Níjar (Almería). Lorca lo leyó en los periódicos y le inspiró el drama. El suceso real se transforma en literatura. En sus manos la tragedia, por medio de la poesía, pasa a ser universal. Lorca buscaba renovar el drama rural, huyendo del realismo (habla de clases rurales) y del idealismo. Refleja un mundo rural primitivo, pero con un enorme lirismo. Busca un teatro que se acerque al gran público, pero alejado de las obras de Benavente o de otros dramaturgos consagrados de la época. Ese teatro debe ser también arte, un teatro simbólico y lírico.

Bodas de sangre Se trata de un drama de honor. Se relaciona así con el teatro clásico. Los personajes están reducidos a instintos primarios. Solo les mueven los celos. Su nombre se reduce al papel que desarrollan en la trama: Novio, Novia, Madre, Padre. Son meros actantes. Sólo Leonardo, motor de la tragedia, tiene nombre propio. Tiene una dimensión mayor. Es un personaje con identidad propia. La obra incluye pasajes líricos. Partes de la obra están en verso. Conectan con el Romancero gitano (1927) y Poemas de Cante jondo (1931) de Lorca.

Bodas de sangre: Personajes Por lo general, en la obra teatral de Federico García Lorca los personajes femeninos tienen mayor entidad dramática que los masculinos. Cuatro son los personajes esenciales de la tragedia: la Madre, la Novia, Leonardo y el Novio. De todos ellos es la Madre la que desempeña un papel más significativo: es fuerte y constante, paciente ante la adversidad, vive en comunión con sus muertos, ligada a ellos a través del recuerdo y de la llama incombustible del odio hacia la casta enemiga. Se vuelca en ternura con su hijo pero las leyes sociales la impulsan a entregarlo también a la muerte. La Novia es víctima de un conflicto interior importante. Desea mantenerse dentro del equilibrio social del deber, seguir el cauce de las normas de la tradición. Pero el instinto puede más que la razón. Es un personaje pasional. Leonardo es el único personaje con nombre propio. Antagonista frente a la Madre. Él es el encargado de arruinar la última esperanza de la Madre. Leonardo es un personaje atormentado, que la fatalidad y la pasión le arrastran a la destrucción. El papel del Novio está subordinado al de la Madre. Aunque muere, su función no es esencialmente trágica. Frente a Leonardo, que es pasión, el Novio representa el trabajo y la descendencia.

Bodas de sangre: estructura a) En el acto I se plantean los hechos desde tres espacios distintos: la casa de la Madre, la casa de Leonardo y la casa de la Novia. Los tres espacios confluyen en el acto II en un lugar común: la casa de la Novia. b) Los dos cuadros del acto II presentan la situación en dos momentos distintos: antes del casamiento y después de él. En este acto II se plantea el nudo del conflicto. Hasta este acto II el mundo reflejado en la obra es el del plano real. c) En el acto III el mundo real desaparece y surge un mundo sobrenatural: el bosque simbólico con la presencia de personajes alegóricos como la Luna, La Muerte, etc. Tres coros distintos intervienen en este acto III: en el primer cuadro los leñadores comentan la acción e invocan a la divinidad, la Luna y la Muerte presencian la tragedia. En el segundo cuadro aparecen otros dos coros: el de las muchachas y la niña, y el de las mujeres que entonan la elegía final. El poeta, en el último cuadro, nos ha devuelto a la realidad y al espacio creado al comienzo de la obra.

Temas de Bodas de sangre La imposibilidad del amor. En la obra los dos amantes mueren y la Novia al final queda sola, viuda y sin nadie. El destino está marcado y no deja a los personajes estar juntos. Otros temas son la muerte, la infidelidad, la honra, el destino, la naturaleza, el odio y la pasión. Para analizar estos temas hay que partir de la presencia de un doble plano en la obra: por una parte, el plano real que nace del suceso contado en los periódicos; por otro lado, el plano onírico, sobrenatural y surrealista que aparece en el acto III de la obra.

Simbología en Bodas de sangre Un símbolo es un recurso literario que contiene varios significados. El símbolo usa un objeto o acción que significa mucho más que su significado literal. En Lorca, las menciones al blanco significan pureza, pena o tristeza (descripción espacio escénico de la última escena). El verde es la vegetación, la fertilidad y también la fatalidad. El amarillo significa vejez, muerte (Acotación acto I, cuadro I). El rojo es la sangre, la pasión y la muerte. La madeja (como el hilo de las Parcas) significa el ritual de la muerte (canción de las muchachas en el cuadro último del acto 3).

Simbología en Bodas de sangre El bosque es un lugar oscuro. Representa el espacio de la pasión y la muerte (ver Acto III, cuadro I). La Tierra tiene función maternal, es maternidad, pero también es ritual de vida, porque es donde se entierra. El arraigo de la tierra mueve a los personajes. Se ven determinados por ella. La sangre es calor vital y corporal, es vida o muerte, es vehículo de la pasión y del instinto (ver diálogo de leñadores en Acto II, Cuadro II). El caballo (el de Leonardo, donde rapta a la Novia) tiene un sentido de erotismo y virilidad. La corona de azahar es la clausura, el entierro (Acto II, Cuadro II)

Simbología en Bodas de sangre La navaja es el instrumento del sacrificio, el instinto impulsivo del hombre. Aparece muchas veces en la obra. La cruz es el sacrificio, la pasión, la muerte y la religiosidad. La luna, como en el acto III, es la muerte, el acoso de la existencia y la soledad (Cuadro I, acto III, diálogo de los leñadores).