Teresa de Jesús En Avila 1557-1560 “ Quiso el Señor que viese junto a mí un ángel... Veíale en las manos un dardo de oro largo y al fin del hierro un poco de fuego. Éste me parecía meter en el corazón y me llegaba a las entrañas. Al sacarle, me parecía, las llevaba consigo, y me dejaba toda abrasada en amor grande de Dios” Teresa de Jesús En Avila 1557-1560
Ya toda me entregué y di Y de tal suerte he trocado, Que mi Amado para mí Y yo soy para mi Amado. Que mi Amado para mí Y yo soy para mi Amado.
Cuando el dulce Cazador Me tiró y dejó herida, En los brazos del amor Mi alma quedó rendida.
Y cobrando nueva vida De tal manera he trocado Que mi Amado para mí Y yo soy para mi Amado. Que mi Amado para mí Y yo soy para mi Amado.
Hirióme con una flecha Enherbolada de amor Y mi alma quedó hecha Una con su Creador;
Ya yo no quiero otro amor, Pues a mi Dios me he entregado. Y mi Amado para mí Y yo soy para mi Amado.
efm Poema: Mi Amado para mí Autora: Santa Teresa de Jesús Canta: Grupo Polifónico San Juan de la Cruz Úbeda efm
Fin