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Mensaje 19/07/15 – PEIBFM – Mañana Tema: Puerta de las Aguas Texto: Texto: Nehemías 3:26 / 8:1,3,16 / 12:37

Tema: Puerta de las Aguas 7ª La puerta de las Aguas 3:26 Y los sirvientes del templo que habitaban en Ofel restauraron hasta enfrente de la puerta de las Aguas al oriente, y la torre que sobresalía.

Tema: Puerta de las Aguas Nehemías 8:1,3,16 1 y se juntó todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el escriba que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual Jehová había dado a Israel. 3 Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el mediodía, en presencia de hombres y mujeres y de todos los que podían entender; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley. 16 Salió, pues, el pueblo, y trajeron ramas e hicieron tabernáculos, cada uno sobre su terrado, en sus patios, en los patios de la casa de Dios, en la plaza de la puerta de las Aguas, y en la plaza de la puerta de Efraín.

Nehemías 12:37 Y a la puerta de la Fuente, en frente de ellos, subieron por las gradas de la ciudad de David, por la subida del muro, desde la casa de David hasta la puerta de las Aguas, al oriente.

Tema: Puerta de las Aguas 7ª La puerta de las Aguas 3:26 Y los sirvientes del templo que habitaban en Ofel restauraron hasta enfrente de la puerta de las Aguas al oriente, y la torre que sobresalía.

1ª REVELACIÓN – Ceremonia de las aguas a) Sacar el Agua 1ª REVELACIÓN – Ceremonia de las aguas a) Sacar el Agua. B) Inmersión en el Agua A. Juan 7:37-38 37 En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. 38 El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.

1ª REVELACIÓN – Ceremonia de las aguas b) Inmersión en Agua

1ª REVELACIÓN – Ceremonia de las aguas b) Inmersión en Agua (Juan 3:3-8) 3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. 4 Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer? 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. 6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. 7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo. 8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.

1ª REVELACIÓN – Ceremonia de las aguas b) Inmersión en Agua

1ª REVELACIÓN – Ceremonia de las aguas b) Inmersión en Agua (Romanos 6:1-4) 1¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde? 2 En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él? 3 ¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? 4 Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.

2ª REVELACIÓN – “El Agua y la Palabra” (Efesios 5:25-27) 25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, 26 para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, 27 a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.

3ª REVELACIÓN – “La Cámara Avtinus”

3ª REVELACIÓN - La Cámara Avtinus El incienso representa la oración. (Salmo 141:2) Suba mi oración delante de ti como el incienso, el don de mis manos como la ofrenda de la tarde. (Apocalipsis 8:3-4) 3 Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de oro; y se le dio mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro que estaba delante del trono. 4 Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos.

JESÚS Señor, levanto mi oración a ti, como incienso que asciende hasta el Cielo, sabiendo que Tú me escuchas. Me acerco a Ti con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, teniendo mi corazón purificado de mala conciencia y mi cuerpo lavado con agua pura. Te doy gracias por Tu Palabra, porque con ella me limpias para prepararme como Tu Novia. Purifícame, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve. Esconde tu rostro de mis pecados, y borra todas mis iniquidades. Crea en mí un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.