Lectio divina del Salmo dominical Is 43,16-21: Mirad que realizo algo nuevo y apagaré la sed de mi pueblo. Sal 125,1-2ab.2cd-3.4-5.6: El Señor ha estado.

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Transcripción de la presentación:

Lectio divina del Salmo dominical Is 43,16-21: Mirad que realizo algo nuevo y apagaré la sed de mi pueblo. Sal 125,1-2ab.2cd : El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres. Flp 3,8-14: Por Cristo lo perdí todo, muriendo su misma muerte. Jn 8,1-11: El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra. Domingo V de Cuaresma Año C: La Misericordia de Dios lo hace todo nuevo.

El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.

Cuando el Señor cambió la suerte de Sión, nos parecía soñar: la boca se nos llenaba de risas, la lengua de cantares.

El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.

Hasta los gentiles decían: «El Señor ha estado grande con ellos.» El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.

El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.

Que el Señor cambie nuestra suerte, como los torrentes del Négueb. Los que sembraban con lágrimas cosechan entre cantares.

El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.

Al ir, iba llorando, llevando la semilla; al volver, vuelve cantando, trayendo sus gavillas.

El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.

Lectio Ahora leemos el salmo entero, despacio… SALMO 125 (126) 1 Cuando el Señor cambió la suerte de Sión, nos parecía soñar: 2 la boca se nos llenaba de risas, la lengua de cantares. Hasta los gentiles decían: "El Señor ha estado grande con ellos". 3 El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres. 4 Que el Señor cambie nuestra suerte, como los torrentes del Négueb. 5 Los que sembraban con lágrimas, cosechan entre cantares. 6 Al ir, iba llorando, llevando la semilla; al volver, vuelve cantando, trayendo sus gavillas. Si quieres escuchar este salmo en hebreo, su lengua original, pincha aquí.

Lectio ¿Qué lugar ocupa este salmo en el salterio? Según el P. Ramón Ribera, monje de Montserrat, y otros estudiosos, el orden de los salmos no se debe al azar sino que hay toda una estructura interna.

Nuestro salmo se encuentra en la segunda parte del salterio, dedicado a las alabanzas a Dios, formada por los libros: 4º: salmos º: salmos y 5º: salmos Lectio ¿Qué lugar ocupa este salmo en el salterio? Salmo 125: Dios, alegría y esperanza nuestra. Dentro del quinto libro, este salmo pertenece a un conjunto de salmos denominados de “peregrinación o graduales” (salmos ) porque eran los salmos que los judíos recitaban y cantaban cuando iban de peregrinación y subían a Jerusalén.

Lectio ¿Qué dice el texto? El salmo 125 es una acción de gracias con una súplica incorporada. Podemos leerlo como en tres tiempos: vv. 1-3: como algo ya sucedido: la vuelta del destierro de Babilonia u otra salvación no precisada. vv. 4: como súplica futura y deseada: la vuelta a la tierra no fue tan idílica como se pensaba. Por ello se emplea la expresiva imagen de los “torrentes del Négueb” que de la noche a la mañana, con las primeras lluvias, pasan de ser cauces secos a torrentes impetuosos que llenan de verdor sus márgenes. vv. 5-6: como una actitud cotidiana henchida de esperanza en el futuro: a pesar de las lágrimas, debido a las dificultades presentes, si perseveramos, Dios las trasformará en risas y cantares.

Meditatio : Lo propio de este paso es meditar qué me dice a mi el texto. Esto es algo muy personal por ello aquí para ayudar a esta meditación relacionamos el salmo con las lecturas del domingo. Cuando el Señor cambió la suerte de Sión, nos parecía soñar. Hoy, este salmo lo podemos parafrasear con el evangelio: “Cuando el Señor Jesús cambió la suerte de la adúltera, a ésta le parecía soñar.” Su suerte, humanamente hablando, estaba echada: apedreada por adúltera. Había pecado y esto no lo podía negar, pero la Misericordia es lo que viene a cambiar: “No he venido a llamar a justos sino a pecadores.” ¿De qué nos alegramos, cuál es el tema de nuestros cantares? ¡Abrámonos al sueño maravilloso a que Dios nos invita para hacerlo realidad!

La boca se nos llenaba de risas, la lengua de cantares. Cuando reconocemos nuestra pobreza y nos aceptamos simple y llanamente como somos, nuestra vida se transforma en gozo y descubrimos la Presencia del Señor en nuestras vidas que todo lo renueva y nos da un corazón que ve: “Mirad que realizo algo nuevo, ya está brotando, ¿no lo notáis?

Al ir, iba llorando, llevando la semilla; al volver, vuelve cantando, trayendo sus gavillas. La semilla y la espiga granada, símbolos de una muerte fecunda y de una vida redimida. Corramos hacia la Pascua, olvidando lo que queda atrás y lanzándonos hacia delante, confiados en que el Señor nos hará volver con las manos llenar de gavillas.

Oratio ¿Qué me hace decirle a Dios este salmo, la liturgia de este domingo? Te damos gracias, Señor porque nunca te cansas de perdonar, de darnos una nueva oportunidad, de cambiar nuestra suerte trocando nuestras lágrimas en cantares. Amén.

Contemplatio Miro y me dejo mirar… En esto los Padres de la Iglesia son maestros… «Sólo dos se quedan allí: la miserable y la misericordia… Dejan sola a aquella mujer con su gran pecado en presencia de aquel que no tenía pecado. Y como ella le había oído decir: “el que esté sin pecado que arroje contra ella la piedra el primero”, temía ser castigada por aquel en el que no podía hallarse pecado alguno. Pero el que había alejado de sí a sus enemigos con las palabras de la justicia, clava en ella los ojos de la misericordia.» (S AN A GUSTÍN, Tratado sobre el Evangelio de Juan, 33, 5-6).S AN A GUSTÍN

¡Que se alegren los que buscan al Señor! Actio ¿Qué me hace vivir el Señor a partir de esta Palabra? Es el momento de la “obediencia de la Fe”…