SEMANA SANTA 2016 GUATEMALA DOMINGO DE RAMOS 20 DE MARZO JESÚS DE SAN JOSÉ “REY DEL UNIVERSO” PREPARADO POR CLAUDIO OBREGÓN
En casa, el rito comienza a las 3 de la mañana, nuestros vecinos también están presentes
Alfombras de aserrín y otros materiales que honrarán el paso del Señor
Son las 7:30 y la espera ha concluido. Un Ejército de Chirisitos se prepara a ver pasar al Ejército de Romanos. En media hora El Señor estará pasando enfrente de la casa una vez más ¡Que dicha!
Después del paso de interminables filas de Cucuruchos, por fin se vislumbran las increíbles andas del Señor Rey del Universo
Jesús de San José acaba de pasar frente a la casa. ¡Bendícenos Señor!
Familiares y amigos vienen año con año a ver pasar la Procesión. Los jovencitos de ahora eran hace apenas unos años, niños de brazos.
El Cortejo Procesional del Domingo de Ramos continúa su paso por estas calles con la presencia de La Hermandad de Nuestra Señora, La Santísima Virgen de Dolores.
Son las 10:30 de la noche y la Procesión ya ha cumplido 16 horas en su paso por las Calles de Guatemala. Todavía le quedan unas 2 horas y media para regresar al Templo de San José.
De noche las alfombras están iluminadas con velas. Los Cucuruchos que tomaremos el anda esperamos de rodillas la bendición para cargar en hombros al Señor.
Faltan 12 minutos para la media noche y la Procesión acaba de pasar por Candelaria. Le falta 1 hora para llegar a su Templo La marcha que se escucha es : “Camino al Gólgota” de Mario Paniagua Primer Tercio del Siglo XX
Agradeciendo su atención. Dedico éste trabajo que ya lleva 8 ediciones a todos los Guatemaltecos que aman la Semana Santa por una u otra razón. Lo dedico sobre todo a los enfermos y los ancianos que añoran salir a la calle en éstas fechas a revivir los ritos de nuestros antepasados; a los que viven fuera de nuestras fronteras soñando con venir de nuevo a caminar por las calles que cobran una vida extraordinaria en “La Semana Mayor”. También lo dedico a los extranjeros que alguna vez fueron impactados por nuestras tradiciones y que por este medio revivirán sus experiencias en Guatemala. Lo dedico a Ud. que espera año con año este gratificante trabajo. Si Ud. Lo considera oportuno y merecedor, distribúyalo libremente a sus conocidos, mi recompensa está en saber que mucha gente alcanzará a vivir unos momentos esto que los chapines conocemos como “La Semana Santa Guatemalteca”