Las inundaciones y amplios sectores sin luz ni telefonía móvil eran esa noche el resultado de la fuerte tormenta. La Defensa Civil de La Plata instó a los vecinos a no salir de sus viviendas ya que el casco céntrico estaba todo inundado a raíz de la caída de unos 300 milímetros de agua. Más del 50% de la urbe se inundó, y en el día del temporal se registraron un total de 2200 evacuados. El 2 de abril de 2013, la ciudad de La Plata y sus cercanías fueron afectadas por una lluvia continua, que desde las 17 afectaba a las ciudades de La Plata, Berisso y Ensenada.

En la siguiente tabla se muestran los promedios registrados de caída de agua en La Plata por año en las diferentes estaciones, que fueron superados por las precipitaciones que hubo ese día: PrecipitaciónPromedio Verano286.5 mm29.8% Otoño257.8 mm25.8% Invierno171.9 mm16.8% Primavera277.7 mm27.6%

La imagen satelital fue tomada un día después de la inundación por la NASA. Permite ver el avance del agua sobre la ciudad.

La inundación provocó pérdidas por millones de pesos en La Plata. 55 mil casas y comercios fueron afectados por el agua, según un relevamiento que hizo el municipio. Más de la mitad de los vecinos sufrió daños. Los comercios y oficinas afectados por las lluvias perdieron en promedio pesos cada uno, mientras que el daño para cada familia a la que se le inundó la casa asciende a los pesos. El 25 por ciento de los vecinos de La Plata ( personas) se vieron directamente afectados por la catástrofe, mientras que la cifra supera el 55 por ciento de la población del partido si se contemplan los que perdieron un auto o los que sufrieron otro tipo de perjuicios.

Pablo Canziani, investigador principal del Conicet y director del Programa de Estudios Atmosféricos de la UCA, opina que estos fenómenos climáticos se incrementaron desde “Se observa un cambio en el patrón de las lluvias, tanto en su intensidad como en su frecuencia, y es probable que sigan ocurriendo, pero no se puede predecir cuándo”. Además, el radar en Ezeiza alcanza a cubrir sólo un sector de La Plata y se necesitaría un sistema integrado entre Argentina, Uruguay y el sur de Brasil para monitorear correctamente la zona, y llegar a prevenir y manejar mejor este tipo de situaciones. “Hace más de 40 años que no hay en el país inversión en instrumental de observación geofísica, no hay tecnología adecuada y lo que hay no alcanza a cubrir las necesidades”, afirma Canziani. Según el Servicio Meteorológico Nacional, en el momento de mayor intensidad del temporal, la lluvia se concentró sobre el centro de La Plata y no fluyó.

Para Rubén Pesci, arquitecto y presidente de la Fundación CEPA, éste es un aspecto clave del desastre: Casas unifamiliares con jardín fueron reemplazadas en forma progresiva por torres y la densidad pasó de 250 habitantes por hectárea hasta casi Esto contribuyó a impermeabilizar el suelo y colapsó el sistema de infraestructura. - El crecimiento inmobiliario y poblacional no fue acompañado por las necesarias Obras de infraestructura hidráulica. - A ello sumó la ocasión de registrarse en el último día de una prolongada sucesión de días feriados en los que no se realiza la habitual recolección de residuos.

Las unidades académicas de La Plata pusieron en marcha diversos relevamientos sobre lo sucedido. El más importante es el que está llevando adelante la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata, con treinta docentes investigando sobre las causas y consecuencias de la inundación a través de los niveles de agua en cada área afectada. “Los principales causantes de la inundación fueron, por un lado, la magnitud de la lluvia –casi cuatrocientos milímetros de agua en sólo dos horas, una cifra récord– pero también la deficiencia en materia de desagües, que es muy grave. La urbanización en La Plata creció pero no fue acompañada por un plan que los tenga en cuenta” dice Romanazzi, uno de los investigadores. Como experto en hidrología, desde hace más de una década viene trabajando en realizar diagnósticos y recomendaciones para evitar o al menos mitigar tragedias como las que el martes arrasaron a la capital bonaerense.

“En 2007 ya habíamos hecho informes sobre el estado de las cuencas, sobre las obras que se necesitaban en caso de grandes lluvias, se había determinado que había muchos problemas de desagües en la cuenca del Arroyo del Gato –el curso de agua que forma parte del río Santiago y atraviesa San Carlos, Ringuelet y Tolosa, los barrios más afectados por la inundación–, Pero esos estudios no tuvieron eco en la práctica. Pareciera que es necesario padecer muertes para ver que esto es un tema”, indicó el académico.

El intendente de La Plata, Pablo Bruera, dispuso la exención de la tasa municipal para los vecinos afectados por la catástrofe climática del 2 de abril. Desde la Municipalidad de La Plata prometieron que habrá fondos girados por el Ministerio de Planificación Federal para la reparación de viviendas. Fuentes del municipio que conduce Pablo Bruera dijeron que se dispusieron 20 centros para asistir a los evacuados: 6 en el casco urbano de la capital bonaerense, 5 en Tolosa, 4 en Villa Elvira, 2 en Ringuelet, 2 en Los Hornos y 1 en City Bell. El gobernador bonaerense dispuso un operativo de seguridad especial para la noche del miércoles, debido al temor por posibles robos y saqueos en viviendas y comercios.

Según Scioli el Ministerio de Salud bonaerense dispuso un operativo sanitario muy amplio para la cobertura de los barrios más afectados, como Tolosa, Villa Elvira, La Loma, Ringuelet y Los Hornos. El ministro de Salud, Alejandro Collia, anunció que se dispuso un refuerzo del plan de vacunación contra la gripe y la hepatitis a los afectados por el temporal. Scioli dijo que "la situación es muy compleja y la más grave está concentrada en el barrio platense de Tolosa, donde cayeron más de 320 milímetros de agua en poco más de 2 horas" Durante una conferencia de prensa en el Ministerio de Seguridad y Justicia bonaerense, remarcó: "Nunca se ha visto algo igual, por eso a la gente la ha sorprendido de la peor manera y no han tenido tiempo algunos a escapar de esta trampa fatal por el semejante volumen de agua que cayó en tan poco tiempo".

En la misma línea que la Casa Rosada, el gobernador bonaerense anunció una serie de medidas para intentar mejorar los ingresos de los damnificados por la inundación en La Plata. Anunció que se dispondrá de créditos o subsidios para asistir financieramente a los damnificados por la catástrofe y duplicará los haberes de mayo y junio a los jubilados afectados que cobren la mínima. La medida abarcaría a más de jubilados y pensionados. La presidenta Cristina Kirchner también prometió beneficios para aquellos que cobran la Asignación Universal por Hijo, la asignación familiar y el seguro de desempleo. La Presidenta dijo que esas medidas alcanzarán a más de 153 mil personas, con una inversión de 400 millones de pesos. Cristina decretó tres días de duelo por las trágicas inundaciones registradas en la Ciudad de Buenos Aires, La Plata y el Conubarno bonaerense.

La perspectiva del anuncio de las autoridades responsables tiene alguna contraposición con la realidad de las calles platenses, donde no se percibe una movilización de recursos humanos, de vehículos u otro aporte oficial, y la protesta de los vecinos por la morosidad del auxilio se incrementa por la impaciencia y el daño irreparable. Quince mil platenses se concentraron frente a la Municipalidad de esta ciudad para reclamar el juzgamiento de los responsables políticos por la inundación que provocó la muerte de más de 52 personas. Los manifestantes, muchos de ellos víctimas de la brutal inundación del 2 de abril pasado, protestaron con fuerza y en especial contra el intendente Pablo Bruera, que hizo un papelón al anunciar por Twitter que estaba ayudando a los inundados de aquel día cuando en realidad estaba de vacaciones en Brasil. La falta de previsión ante la catástrofe fue una de las cuestiones que más indignó a los manifestantes que llegaron en familia. También se vieron muchos jubilados. La movilización se produjo en un territorio devastado por la tragedia. Estuvieron en la calle, con el peso de una reconstrucción que será larga.

En La Plata hubo entre 2002 y 2010 cuatro inundaciones importantes, una más devastadora que la otra. Hubo numerosos planes, competentes proyectos, pero ninguno prosperó por mezquinos intereses o desvíos de fondos para iniciativas que daban más réditos en las urnas. Grandes inundaciones en La Plata (2002 a 2013) Enero 2002 Marzo 2005 Febrero 2008 Abril 2013 Marzo 2010 Casi 80 milímetros en una hora. Más de 70 mil personas refugiadas en centros oficiales. Se le presentó al intendente Julio Alak un plan de obras hídricas, con alcantarillado y desagües que tenía como eje la cuenca del arroyo El Gato. La propuesta no se llevó a cabo. Arrasó con los hogares de 90 mil personas. Alak inauguró el “Conducto aliviador” Sólo se concretó la primera etapa. 90 mil evacuados y un muerto. Para ese entonces ya gobernaba el actual intendente, Pablo Bruera. Se presenta un informe que advertía lo que podría ocurrir y alertaba sobre la urbanización descontrolada. El agua tapó gran parte de Ensenada. Una vez más, especialistas advierten lo que puede llegar a suceder, pero no son escuchados. El 55% de la plata es afectado por la inundación. Más de 53 muertos evacuados registrados

La Gendarmería y el Ejército, de acuerdo con el informe de las autoridades, contribuyen con el traslado de agua y otro tipo de ayuda. Las donaciones tras el temporal en La Plata llegan desde varias provincias del interior, y hasta de otros países. Diferentes organizaciones sociales, políticas, deportivas y de la Iglesia abrieron sus puertas para colaborar con los afectados. El Papa Francisco puso a disposición de la arquidiócesis de La Plata la suma de 50 mil dólares para ayudar a los damnificados por el trágico temporal que sufrió La Plata. En cualquiera de los centros se reciben alimentos no perecederos, colchones, sábanas, frazadas, ropa, medicamentos, toallas, elementos de limpieza e higiene, pañales, leches en polvo y todo lo que se pueda acercar.

Se creó una página en internet y usuarios en redes sociales donde la gente afectada pide ayuda específica de lo que necesita; por ejemplo publica que por favor le donen un colchón, sábanas y comida a una determinada dirección.

“ Llegamos de trabajar a las seis de la tarde y ya estaba lloviendo desde las cuatro. Fueron pasando las horas y veíamos crecer el nivel del agua en la calle muy rápidamente, hasta alcanzar un metro de altura. Llegó al punto en que, en cuestión de minutos, empezó a entrar a la casa, aproximadamente a las ocho. Más tarde cortaron la luz, en plena crecida. Gracias a que nuestra vivienda esta en un nivel más alto que el resto, solo alcanzó los cuarenta centímetros, aunque al resto de los vecinos en la cuadra les llegó al metro. En ese momento comenzamos a proteger los electrodomésticos poniéndolos sobre la mesa, la mesada; la ropa en el estante más alto del armario… Y nos sentamos en la mesada de la cocina a esperar a que baje un poco el agua. Cuando disminuyó el nivel de ésta estuvimos toda la noche tratando de terminar de sacarla con ayuda de baldes y escobas. Al otro día era todo barro, salimos a la calle y había causado destrozos, parecía que había pasado un tornado. A los vecinos se les habían partido los techos, sacaban muebles de sus casas… La verdad es que nos sentimos muy afortunados, comparando con otras situaciones en gran parte de la ciudad.” Alejandro Velázquez y Claudia Molina, Residentes de La Plata desde el 21 de marzo de 2011