Para Salvarte P. Jorge Loring Sexto Mandamiento (Amistad - Noviazgo)

Los Adolescentes Las cosas grandes no se hacen en un día. Necesitan tiempo, preparación, etapas. Antes del noviazgo, conviene que los adolescentes y los jóvenes hayan tratado frecuentemente con jóvenes del otro sexo. Esto es imprescindible para conocerse a sí mismo.

Se basa en la Sinceridad y en la Generosidad. La amistad La amistad es un gran valor; es un afecto puro, desinteresado y recíproco que nace y se fortalece con el trato. Se basa en la Sinceridad y en la Generosidad.

La simulación, el engaño, la traición, son la muerte de la amistad. En la amistad te aceptan como eres y te valoran por lo que eres, comprendiendo y perdonando tus fallos y limitaciones. La amistad favorece la amabilidad, la alegría, la bondad, la sinceridad, la generosidad, etc.

“Quien tiene un verdadero amigo, tiene un tesoro”. El Amigo El amigo no es acaparador y posesivo. Respeta tu libertad y no tiene celos de que compartas tu amistad con otras personas. La amistad que es pasajera, no es verdadera amistad. “Quien tiene un verdadero amigo, tiene un tesoro”.

El flirtear es jugar al amor. El Flirteo El flirtear es jugar al amor. Un ceder al atractivo sensible y sentimental, cultivar un trato superficial, sin hondura, sin intención alguna de casarse. El flirteo es uno de los nombres que se le da a la falsa maniobra de jugar al amor, sin comprometerse.

El flirteo es una mentira. Amar para un rato no es amor. El flirteo puede llevar al matrimonio, pero esto es raro. A lo que lleva es a desvalorizar el sentimiento y a embotar, notablemente, la potencia del amor.

El amor, placer de la juventud Hoy suele decirse que el matrimonio está en crisis. Yo creo que lo que está en crisis es el noviazgo. La juventud se ha lanzado a jugar al amor, ha hecho del amor un placer.

Muchos jóvenes toman el noviazgo como un juego, con ligereza y frivolidad, sólo buscan disfrutar el uno del otro. Cuando encuentran una chica enérgica que rehúsa, aunque les fastidie el momento, la aprecian mucho más. Muchas chicas, por vanidad, procuran despertar el apetito de los chicos.

El sufrimiento de las mujeres Generalmente, el flirteo termina para la chica con muchos sufrimientos; ella es más emotiva. Cuando termina el juego, el hombre se va tan fresco, pero ella, fácilmente, queda destrozada.

“Debes guardar el corazón, defender ese tesoro contra los ladrones”. Lo que caracteriza a la joven es la viveza de su sensibilidad y de su sentimentalismo, es la riqueza de su corazón. “Debes guardar el corazón, defender ese tesoro contra los ladrones”.

La fascinación puede ser engañosa, es hermosa, pero pasará pronto. Durante el estado de enamoramiento los defectos no se perciben, las cualidades se subliman... La mente está equilibrada hacia el objeto del amor. La fascinación puede ser engañosa, es hermosa, pero pasará pronto. Para casarse, es indispensable amarse; para amarse, es preciso conocerse; para conocerse, tratarse; para tratarse, primero hay que encontrarse. Lo esencial reside en el valor humano y cristiano, es decir, su personalidad.

A la chica le halaga el verse deseada sexualmente A la chica le halaga el verse deseada sexualmente. Esto puede inclinarla a ser provocativa, pero debe dominarse. La belleza física es un factor importante y, por eso, debes cuidarla y realzarla con esmero y naturalidad. La belleza femenina atrae a los chicos, pero no es indispensable para casarse. Las muchachas deben ser elegantes, distinguidas, alegres, discretas y cultas.

El pudor de la mujer es una de las cosas que más enamoran. El pudor es la gran muralla que defiende la castidad. Una chica sin pudor pierde la noción de lo que hace, viene la caída fatal que llorará amargamente, y la avergonzará para toda la vida. El mejor regalo de bodas que puede esperar una persona es la virginidad de la pareja con la que se va a casar. Tu novia ha de ser la madre de tus hijos. Trata a tu novia hoy como te gustaría que los demás la traten a ella.

Hay caricias que conducen al acto sexual. Deben evitarse. Una mujer es un amor muy superior: el que culmina en un hogar y en unos hijos. Algunas novias sienten sincero amor para con el hombre que tuvo para ella admiración y respeto. Hay caricias que conducen al acto sexual. Deben evitarse. Un chico que quiere a una chica, busque siempre lo que a ella la engrandece, nunca lo que la envilece. Respeta a tu novia, aunque ella no sepa hacerse respetar, ni defender con su pudor, el tesoro de su pureza.

Si alguien dice que no le importa la infidelidad de su cónyuge, es porque ha dejado de amar. La diferencia entre amor y amistad es que al amigo no le importa compartir con otros a su amigo; pero el amante quiere en exclusiva a la persona amada. Aprende a enamorarte del carácter y de las virtudes del alma, que son estables y son realmente las que hacen digna de estima a una persona.

Las chicas buenas también se quejan de que los chicos prefieren a las ligeras, las frívolas. Si los chicos mostraseis claramente que preferís las buenas, las chicas mejorarían. Sería un excelente apostolado: moralizar a las chicas, mostrando más estima por las que son más virtuosas. En él, la atracción hacia el otro sexo es más carnal; en ella, es más sentimental.

En el noviazgo se impone como necesidad imperiosa la sinceridad. El tiempo del noviazgo es para conocerse mutuamente, para amarse rectamente. El noviazgo es querido por Dios, pues Dios ha hecho el matrimonio indisoluble. Pero debéis ser muy discretos en las manifestaciones de amor, si no queréis manchar vuestras relaciones. En el noviazgo se impone como necesidad imperiosa la sinceridad. El engañar siempre es malo. Los novios deben ser francos, transparentes el uno para el otro.

Deben ponerse de acuerdo en todos los problemas fundamentales. El esfuerzo mutuo de adaptación es una de las mayores alegrías de la vida conyugal. «En general las diferencias de formación y de posición social son obstáculos que impiden llegar en el matrimonio a una completa unión. «El amor vence a la muerte; pero un pequeño defecto desagradable, a la larga, puede vencer al amor».

El carácter ideal es una personalidad comunicativa, amable, jovial, bondadosa y sincera.