LAS TRES GEMAS  En el lejano reino de Albet había un pueblo en el que vivía un muchacho llamado Tidus. Tidus hacia las labores del campo: sacar a pastar.

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2 LAS TRES GEMAS

3  En el lejano reino de Albet había un pueblo en el que vivía un muchacho llamado Tidus. Tidus hacia las labores del campo: sacar a pastar las ovejas junto al ganado. Tidus era pobre, pues apenas tenía para comer, además de que era huérfano, y lo pasaba fatal. Un día la princesa Sora se fue a pasear por el pueblo y se chocó con Tidus. Sora se cayó al suelo  Y Tidus la ayudó a levantarse.  -Lo siento, ha sido culpa mía.-Se disculpó Tidus. -No, yo iba despistada.-Respondió Sora. Durante un momento, se miraron sin decir palabra alguna.

4 -Bueno, me voy.- Dijo la princesa tras un rato. Cuando la princesa estaba todavía al alcance de la vista de Tidus, el cielo se ennegreció y no se veía nada. De repente un rayo cayó en donde supuestamente estaba la princesa Sora. Entonces un grito salió de la oscuridad: -¡¡AAAAAAAAAH!!-Y cuando aclaró el cielo,¡la princesa no estaba! Y en su lugar había una marca de calavera. Tidus se asustó mucho y fue a ver al sabio del pueblo para que le diera consejo. -Mmmmmmm… Una espada deberás lograr y una vez hecho la calavera mucho debes mirar. Para la espada conseguir a al cueva de la luz debes ir.-Respondió el anciano sabio a la pregunta de Tidus

5  Tidus fue a la Cueva de la Luz, el santuario mas antiguo de su pueblo, y en una roca que brillaba como el oro, había una espada clavada. ¡Guauuuuuu!-Exclamó Tidus con admiración, se acercó a la roca, agarró la espada y tiró con todas sus fuerzas. Y entonces, sacó la espada. Una vez que sacó la espada, se marchó corriendo hacia la marca de calavera y cuando llegó se la quedó mirando fijamente. -¿Y que se supone que debo hacer?- Se preguntó a si mismo. De repente la calavera se lo tragó, y Tidus apareció frente a un castillo de colores oscuros

6 Era el castillo de Markus, el malo malísimo de esta historia.Tidus entro por la puerta del castillo y se encontró con un salón encontró con un salón grande, la princesa Sora grande, la princesa Sora convertida en piedra y Markus sentado en un trono. Vio en un pergamino tirado en el suelo que necesitaba tres gemas para descongelar a la princesa y sabía donde había una pues él tenia la 1ª porque cuando se chocó con la princesa se le cayó y se la cogió para dársela en el futuro. En el pergamino también había un mapa con la localización de las otras dos gemas: la 2ª estaba en el laberinto místico y la 3ª… ¡Horror! convertida en piedra y Markus sentado en un trono. Vio en un pergamino tirado en el suelo que necesitaba tres gemas para descongelar a la princesa y sabía donde había una pues él tenia la 1ª porque cuando se chocó con la princesa se le cayó y se la cogió para dársela en el futuro. En el pergamino también había un mapa con la localización de las otras dos gemas: la 2ª estaba en el laberinto místico y la 3ª… ¡Horror! El gran congelamiento de la princesa Sora solo desaparecerá con las 3 gemas: la bella, de la corona de la princesa, la pura, del laberinto místico, y la oscura, del corazón de Markus

7  Estaba en el corazón de Markus.  -Ja ja ja ¿Te impresiona ver a tu princesa convertida en piedra?- Dijo Markus con tono burlón, entonces Markus le lanzó un hechizo a Tidus y este apareció tumbado delante de la marca de calavera. -Bueno, ya que estoy fuera del castillo voy a buscar las gemas.- Se dijo a si mismo Tidus. Pero se dio cuenta de que también necesitaba algo para defenderse. Tidus fue a ver al avaricioso del pueblo y este le dijo: -¡Tengo justo lo que  necesitas, un escudo mágico! Pero te cos- tará 100 rupias.- Y a Tidus se le ocurrió atarle una cuerda a la gema mágica de la corona de la princesa y dársela al avaricioso. Tidus lo hizo y cuando tenia el escudo dio un tirón de la cuerda y se quedó con las dos cosas -Vale, estoy preparado para ir al laberinto místico.- Dijo Tidus, y se puso en marcha

8 Tras mucho caminar llegó a su destino: un laberinto de color azul en el que se escondía la 2ª gema. Al entrar se encontró un pergamino medio chamuscado, en el que ponía: Tidus torció a la izquierda y allí encontró otro pergamino y leyó : esa vez fue a la derecha, se encontró el otro pergamino, lo miró y vio que estaba al revés -Está al revés necesito un espe- jo. ¡Ah claro la espada!- Dijo Tidus, acercó la espada y vió lo que se reflejaba, ponía: cuando miró por el telescopio vio al final del cami- no la 2ª gema mágica, fue recto y la cogió la gema, se marchó al castillo, ahí se encontró que le lanzó un hechizo de nuevo pero Tidus lo contraatacó con la espada El derecho es mal camino si quieres seguir busca otro pergamino. El derecho fue mal ca- mino pues ahora al revés está el pergami- no Ya cerca estás ve por la derecha y por el telescopio mirarás

9  - ¡Remolino de los hechizos!- Tidus empezó a girar con la espada agarrada, se hizo un remolino y el hechizo desapareció dentro. Markus se enfureció y lanzó otro hechizo: -¡¡¡TORMENTA MALIGNA!!! Gritó Markus y de sus manos empezaron a salir rayos negros y morados. Esta vez a Tidus le pesaba mucho la espada, así que se defendió con el escudo mágico. En el punto de impacto se empezaron a proyectar rayos de colores que Tidus dirigió con la espada hacia Markus -¡Es imposible!- Gritó Markus mientras se derretía ante los rayos de colores- ¡Pero si mi castillo siempre a estado rodeado de oscuridad! Pero eso no era así. El corazón valiente de Tidus había atraído al arco iris. Markus explotó y en su lugar sólo quedó una gema de color mo- rado oscuro.

10  - ¡Ya las tengo todas!- Exclamó Tidus, se acercó al hielo que rodeaba a la princesa, puso las tres gemas alrededor del hielo y… ¡clavó la espada en el hielo! En ese momento las gemas proyectaron rayos de colores sobre la espada, que se volvió luminosa, ¡y el hielo se partió en dos, dejando libre a la princesa! Tidus se la llevó a su prado en brazos pues se había desmayado. Cuando se despertó nombró a Tidus su guardián imperial por salvarla. En ese momento el arco iris rodeó a Tidus dotándolo de una armadura

11 FIN