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La Capilla Presbiteriana de Monte Grande Un análisis de textos y planos para determinar su posible ubicación
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Libro: Colonia de Monte Grande – Introducción – Autora: Cecilia Grierson Los mayores inconvenientes para determinar el lugar exacto de la capilla surgen de lo poco documentado que existe.
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Y lo poco documentado tiene que ver con los propios colonos escoceses
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Sin embargo la importancia principal de la Capilla, surge del texto final de la introducción del libro de Cecilia Grierson. El mismo destaca que el primer documento sobre libertad de cultos fue el “contrato de colonización”, entonces la primera materialización de una capilla no católica de Argentina, fue en Monte Grande.
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Para 1828 había en Monte Grande 514 personas, 31 casas de material, 47 ranchos, 1220 hectáreas de terreno cultivado y cercado, 5185 hectáreas de pasto sin cercar, unas 3750 cabezas de ganado, todo en plena producción. Aunque parezca increíble, en poco más de un año, la sequía, la banca rota producida por la guerra con el Brasil, la indiada y las guerras civiles, arrasaron con esta laboriosa comunidad de escoceses, y se llevaron la fortuna de los Robertson, que terminaron en quiebra. En la década del 30 solo quedaban en Monte Grande unos pocos colonos y la mayoría de los edificios en ruinas. Uno de los edificios que sobrevivió mucho tiempo, fue la residencia construida por Adams para los Robertson, cuya arquitectura, dice el arquitecto De Paula, “constituye un ejemplo interesante de los cánones neoclásicos aplicados a un edificio de índole rural. Su volumetría severa realza la portada central, ornamentada con cuatro pilastras dóricas y un frontis clásico, perfectamente enlazado con el cornisamiento; no hay tejado aparente. Detrás, también con un volumen muy neto, sobresale un alto mirador, con sus azoteas cercadas por pretiles de hierro, con pilares de mampostería en los ángulos. En este desaparecido edificio, Adams, coherente con su formación estilística, logró uno de los mejores ejemplos del neoclasismo mamposteril, tan representativo de la campaña bonaerense de aquel entonces”. Es posible que los Adams no hayan residido nunca en Monte Grande o que hayan abandonado la colonia para instalarse en la ciudad de Buenos Aires mucho antes de su disolución.
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http://buenosairesarquitectura.blogspot.com/2009_10_01_archive.html http://buenosairesarquitectura.blogspot.com/2009_10_01_archive.html Arquitectura de Buenos Aires En febrero de 1825 se firma con el gobierno inglés el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación que dará derecho a los súbditos británicos a practicar su religión pública o privadamente y establecer cementerios, capillas e iglesias, en los sitios que consideren convenientes. Este Tratado es el origen de las arquitecturas y lugares de los "disidentes" para el ejercicio de sus cultos y para enterrar a sus difuntos. En el grupo de escoceses que llegan en 1825 se encontraba el arquitecto Richard Adams que realizó el proyecto de la Catedral Anglicana de Buenos Aires en la calle San Martín de Tours al 200 (inaugurada en 1831), el templo presbiteriano de la calle Piedras (demolido cuando se abrió la Av. de Mayo) y la capilla del Cementerio ubicado en la intersección de las calles Hipólito Yrigoyen, Pasco y Alsina (en ese predio se encuentro hoy la Plaza 1º de Mayo).
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La ciudad a mediados del siglo XIX. Fíjense por ejemplo la zona donde actualmente está el barrio de Palermo, digamos a la derecha y en la zona media mirando desde la costa (se ve la cuenca del arroyo Maldonado sin entubar, claro). Verán también un lugar anotado "Palermo de San Benito" Les agrego el mapa que incluye el dr. arquitecto Alberto de Paula en su estudio sobre los templos "no católicos" en el siglo XIX en la revista Anales del IAA que representa la ubicación de la colonia escosesa de Santa Catalina en la zona sur de la ciudad (Monte Grande).
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