Descargar la presentación
La descarga está en progreso. Por favor, espere
Publicada porAurora Acuña Ortega Modificado hace 9 años
4
www.escuelasabatica2000.org Si desea una copia de la presentación en PowerPoint visite:
5
Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. La Salvación Es un don de Dios Requirió la muerte de Cristo Cristo libera al hombre del pecado Cristo da la vida eterna Debemos creer en Cristo Cómo ser Salvo
6
Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.
7
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.
8
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.
9
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores?
10
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores?
11
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores?
12
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.
13
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.
14
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.
15
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.
16
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.
17
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.
18
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.
19
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás. ¿Por qué querréis ser castigados aún? ¿Todavía os rebelaréis? Toda cabeza está enferma, y todo corazón doliente. Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite.
20
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás. ¿Por qué querréis ser castigados aún? ¿Todavía os rebelaréis? Toda cabeza está enferma, y todo corazón doliente. Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite.
21
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás. ¿Por qué querréis ser castigados aún? ¿Todavía os rebelaréis? Toda cabeza está enferma, y todo corazón doliente. Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite.
22
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás. ¿Por qué querréis ser castigados aún? ¿Todavía os rebelaréis? Toda cabeza está enferma, y todo corazón doliente. Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite.
23
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador.
24
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador.
25
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Reconocer nuestra necesidad
26
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Reconocer nuestra necesidad
27
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Reconocer nuestra necesidad
28
Cómo ser Salvo Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Reconocer nuestra necesidad
29
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse
30
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse
31
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
32
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
33
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
34
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
35
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
36
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
37
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Y saliendo, predicaban que los hombres se arrepintiesen.
38
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Y saliendo, predicaban que los hombres se arrepintiesen.
39
Cómo ser Salvo Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Y saliendo, predicaban que los hombres se arrepintiesen. Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas
40
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas
41
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas
42
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas
43
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas
44
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Y arrojando las piezas de plata en el templo, salió, y fue y se ahorcó.
45
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Y arrojando las piezas de plata en el templo, salió, y fue y se ahorcó.
46
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Y arrojando las piezas de plata en el templo, salió, y fue y se ahorcó.
47
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:
48
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:
49
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:
50
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:
51
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:
52
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:
53
Cómo ser Salvo Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús
54
Cómo ser Salvo Vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús
55
Cómo ser Salvo Vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús
56
Cómo ser Salvo Vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
57
Cómo ser Salvo Vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
58
Cómo ser Salvo Vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
59
Cómo ser Salvo Vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
60
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
61
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
62
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
63
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
64
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
65
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
66
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
67
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
68
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vé en paz.
69
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel.
70
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel.
71
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel.
72
Cómo ser Salvo Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel.
73
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel.
74
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel.
75
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel.
76
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio? Y Josué estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ángel. Aceptar su vestido
77
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él. Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos Aceptar su vestido
78
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él. Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos Aceptar su vestido
79
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él. Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos Aceptar su vestido
80
Cómo ser Salvo Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él. Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos Aceptar su vestido
81
Cómo ser Salvo Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él. Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos Aceptar su vestido
82
Cómo ser Salvo Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él. Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos Aceptar su vestido
83
Cómo ser Salvo Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Reconocer nuestra necesidad Arrepentirse Reconocer el pecado Sentir tristeza por haberlo hecho Desear sinceramente no pecar mas Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Tener fe en Jesús Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él. Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos Aceptar su vestido Seguir a Jesus
Presentaciones similares
© 2025 SlidePlayer.es Inc.
All rights reserved.