Cita con Dios.

Presentación del tema: "Cita con Dios."— Transcripción de la presentación:

1 Cita con Dios

2 Si has conocido algo de lo trascendental que hay en ti,
la muerte te revelará lo que de trascendente hay en el universo.

3 sino un encuentro con Dios,
Entonces la muerte no será más una muerte, sino un encuentro con Dios, una cita con Dios.

4 Podemos encontrar tres expresiones
de lo que es la muerte en la historia de la mente humana.

5 Una expresión es la del hombre corriente que vive apegado a su cuerpo, que nunca ha conocido nada superior al placer del comer y del sexo.

6 Son personas que han vivido siempre en la antesala de su palacio,
sin atreverse nunca, a entrar en él. Creyendo… que es todo lo que hay en la vida.

7 En el momento de morir tratará de aferrase.
Se resistirá a la muerte, luchará contra ella. La muerte se le presentará como su enemigo.

8 Por eso, en todo el mundo, en todas las sociedades,
la muerte ha sido presentada como algo oscuro, diabólico. Se han perdido la plenitud, se han perdido, la dicha de la vida. Esta es la actitud corriente.

9 Hay un segundo tipo de expresión.
Los poetas, los filósofos a veces han dicho que la muerte no es algo malo, que es sólo un descanso, un gran descanso; como un sueño.

10 Es consolador… Pero ellos también están lejos de la verdad.

11 Aquellos que han conocido la vida en su centro más interno, afirman que la muerte es Dios.

12 Que no es solamente un descanso, sino una resurrección.
“¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? No está aquí ha resucitado. Lc 24,5

13 Cuando una persona ha conocido la trascendencia en sí mismo,
la muerte no es más que otra cara de Dios. Entonces, la muerte es una danza en su honor.

14 Toda la vida no es más que una preparación para esta culminación.
A menos que seas capaz de celebrar la muerte misma, recuérdalo, te habrás perdido la vida. Toda la vida no es más que una preparación para esta culminación.

15 Cuando un místico sufí, se estaba muriendo le preguntaron,
«Bayazid, dinos qué es lo que te está sucediendo. El abrió sus ojos y dijo, «Dios me está dando la bienvenida, voy a su encuentro. Adiós».

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