El uso de citas.

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1 El uso de citas

2 ¿Por qué usar citas? En el mundo académico, para sustentar las propias ideas y proyectos, así como para profundizar en el tema que estudia o discutir hallazgos anteriores, con frecuencia uno debe apoyarse en trabajos ajenos que ya han estudiado el mismo tema. Uno puede usar esas creaciones intelectuales de otra persona sin ser acusado de plagio sólo si cumple dos condiciones: (1) Si le da el crédito necesario al autor (2) Si distingue sus propias ideas y frases de las del autor. No otra es la función de las citas.

3 Sistemas de citación Los sistemas de citación o “estilos de citación” existen para que los lectores puedan entender fácilmente las especificaciones de los materiales que utiliza el autor (¿cuáles son los títulos, las editoriales, las páginas, etc.). Y para que este pueda darle a sus fuentes los créditos que merecen y evite así ser acusado de plagio. Existen varios, incluyendo desde los muy específicos (Vancouver para medicina, Harvard para derecho internacional, ASM para computación), hasta otros más generales que pueden ser aplicados a distintas ciencias, y que son los que estudiaremos acá. En particular, MLA y APA, que son internacionales, e ICONTEC, que sólo tiene validez nacional. Los sistemas de citación son como cualquier otra norma del lenguaje (gramatical, ortográfica, etc.). Lo que quiere decir que son una serie de reglas que debemos aprender para que nos entiendan y no nos malinterpreten. Por fortuna, han sido muy depuradas con el paso del tiempo y su uso tiene una lógica que, una vez se capta, simplifica usarlos. El uso de un sistema de citación u otro dependerá del autor y de las exigencias de la publicación o editorial a que quiera someter su obra. Pero existe una regla de oro y es no mezclarlos: un texto debe usar sólo un sistema de citación en toda su extensión. Es decir, no puede comenzar en MLA y terminar en APA. Eso sería como comenzar las frases en español y terminarlas en chino.

4 Contexto para el uso de citas dentro de un texto
Nota: En este taller se dan sistemas de citación que utilizan referencias intertextuales, es decir, que van dentro del texto. Existe otro sistema que es el de las notas al pie, como usan Chicago e Icontec, bajo la cual hay que poner todos los datos del libro la primera vez que se menciona. Pero como este último sistema se considera desactualizado y cada vez menos usado, no se profundizará en él. Primer tipo. Cita directa: Cuando se usa las palabras exactas de otra persona.. Para ello, aparte de dar los datos completos del libro en la bibliografía, hay que poner en el texto mismo que se está escribiendo: La cita entre “comillas” El apellido del autor La página

5 Ejemplos: Chang-Rodríguez observa que muchos “viajeros han escrito libros de elogios a la naturaleza” y que otros “han formulado teorías revolucionarias después de admirar y estudiar la prodigiosa flora y fauna americanas” (13). Es importante y necesario volver a la admiración de épocas anteriores. O: Se observa que muchos “viajeros han escrito libros de elogios a la naturaleza” y que otros “han formulado teorías revolucionarias después de admirar y estudiar la prodigiosa flora y fauna americanas” (Chang-Rodríguez , 13). Es importante y necesario volver a la admiración de épocas anteriores. Segundo tipo. Cita indirecta Cuando el autor utiliza sus propias palabras para exponer una idea ajena. En el caso de la cita indirecta, no se ponen comillas, sino sólo el nombre del autor que se quiere citar antes de enunciar la idea y la página luego de ésta. Ejemplo: Hoy en día se presentan muchas teorías sobre el origen de la raza humana, específicamente de la de los americanos. Nos toca a nosotros determinar qué teoría tiene más validez. Según Chang-Rodríguez, hay dos categorías principales en las cuales caben numerosas ideas sobre el comienzo del ser humano: la autóctona y la migratoria (33).

6 Casos especiales En caso de que el autor tenga más de una obra en la bibliografía, es necesario poner el título o, si este es largo, una parte de él, luego del apellido del autor. Si son varios autores, la primera vez se mencionan todos los nombres, iniciando por el apellido del primer autor y los otros en orden normal (ej: García, Vallejo y Pérez). Luego se pone sólo el nombre del primero y la expresión et al. (García et al.). Cuando se cita la misma obra dos veces seguidas -sin ninguna otra cita entre ellas-, puede usarse la expresión Ibíd. o Ibídem para no repetir los datos del autor y el libro, seguida del número de página (Ej: Ibíd., 18). La expresión Op. Cit. se usa para no repetir todos los datos editoriales de un libro a partir de su segunda citación (Ej: Caravedo, Op. Cit., 28). Pero a menos que se use un sistema de notas al pie en lugar de intertextuales no tiene mucho sentido usarla.

7 Si la cita textual que estamos usando comienza en una página del libro y termina en otra, es necesario poner la página de inicio y la final separadas por un guión, así: Si la cita es sólo parte de una frase en lugar de la oración completa, es necesario marcar que quitamos parte con el símbolo […]. Ej.: Como afirma el himno nacional “[…] el bien germina ya”. (con ello se indica que se usó sólo parte de la oración, ya que se eliminó: “En surcos de dolores”). Se marca igual cuando se citan dos o más oraciones de un mismo párrafo, pero se eliminan las ideas que las separan: “En algún lugar de la Mancha […], no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor”.

8 -Si la cita tiene más de cuatro líneas, lo aconsejable es marcarla de una forma que la distinga del texto central. Para ello se quitan las comillas, se baja un punto al tamaño de la fuente y se le da 2,5 cm. de sangría al lado izquierdo de todo el párrafo citado. Por lo cual quedaría así: Hoy en día vivimos muy apurados pero en épocas anteriores la gente tenía tiempo para apreciar la naturaleza. Chang-Rodríguez observa: ¡Cuántos viajeros han escrito libros de elogios a la naturaleza americana! ¡Cuántos científicos, como Humboldt y Darwin, han formulado teorías evolucionarias después de admirar y estudiar la prodigiosa flora y fauna americanas! (13) Dado esto, podemos concluir que con la modernidad no todo han sido ganancias.

9 CITAS FINALES DE BIBLIOGRAFÍA
Si al final de una obra, el autor coloca sólo las fuentes que usó para su trabajo, el título de esa parte debe ser “Referencias bibliográficas”. Si además de las que usó, coloca un listado más completo de obras escritas sobre el tema, con la intención de que el lector pueda profundizar más en el mismo por su cuenta, se trataría de una “Bibliografía” propiamente dicha. En la guía que se ofrece para fotocopiar, se dan ejemplos de cómo dar esas referencias en tres estilos: MLA, APA e ICONTEC.