Descargar la presentación
La descarga está en progreso. Por favor, espere
Publicada porJulián Medina Gil Modificado hace 9 años
2
Ciclo C
3
Una vez más recordamos que nuestra religión no se basa principalmente en doctrinas y acciones, sino en una persona, que es Dios hecho hombre para salvarnos: Jesucristo.
4
Hoy el evangelio nos habla de quién es Jesucristo y qué debemos hacer para seguirle.
5
Jesús se lo va a preguntar a los apóstoles; pero primero se lo preguntamos a Él: ¿Quién eres tu?
6
¿Quién eres tu? Automático
7
Quiero saber, Jesús, quién eres tu.
8
¿Eres un Dios? ¿Eres un hombre?
9
Quiero saber, Jesús, quién eres tu. Hacer CLICK
10
Jesús, antes de decirles en qué consiste su mesianismo, quiere saber lo que piensan los apóstoles. Así dice la mayor parte del evangelio de hoy.
11
Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó: "¿Quién dice la gente que soy yo?“ Ellos contestaron: "Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas." Él les preguntó: "Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?“ Pedro tomó la palabra y dijo: "El Mesías de Dios.“ Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie. Y añadió: "El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día."
12
sólo dijeron la parte buena, lo que decían las personas sencillas y buenas: que era un profeta. Ellos debían saber la opinión de muchos fariseos: que Jesús era un borracho y comilón y hasta un blasfemo. Los apóstoles aquí fueron respetuosos;
13
Sería interesante saber lo que dice la gente hoy sobre Jesús. Hay de todo. Hay muchos que no son cristianos y tienen un gran concepto sobre Jesús. Hay algunos, que se tienen por cristianos y tienen un gran concepto, pero no admiten que sea Dios.
14
Jesús les pregunta a los mismos apóstoles: “Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?“
15
San Pedro es el valiente que, en esta ocasión como en otras, lleva la voz cantante y responde: “El Mesías de Dios”. Otro evangelista afirma que lo dijo inspirado por Dios; pero ¿Se daría cuenta de lo que significaba el ser Mesías?
16
Jesús en ese momento les prohibió que lo dijesen a nadie. Y lo prohibió terminantemente. La razón es porque aún no entendían qué significaba ser Mesías, según la mente de Jesucristo.
17
Los apóstoles entendían por entonces al Mesías en el sentido de grandeza terrena, quizá hasta de forma guerrera. Hubiera sido un gran problema si lo comienzan a divulgar.
18
Jesús les dice que el Mesías tendrá que padecer, siendo perseguido y muerto por los principales del pueblo, aunque pronto resucitará. Se lo repitió otras veces. Ellos no lo entendieron hasta que Jesús resucitó.
19
Quizá respondemos con alguna fórmula aprendida de memoria. Lo importante es preguntarnos: ¿Qué es Jesús para mi? ¿Qué representa Jesús en mi vida? También hoy Jesús nos pregunta a cada uno de nosotros quién es Él.
20
Es interesante cuando en alguna reunión de cristianos nos hacemos esas preguntas y se quiere responder con sinceridad. Especialmente en reuniones con jóvenes se escuchan bonitas respuestas: Jesús es como un amigo, que no está lejano sino que nos acompaña y siente en sí nuestros problemas.
21
Cristo es nuestro hermano y compañero, Automático
22
Cristo es el amigo siempre fiel.
23
Cristo es el que sacia nuestra hambre,
24
Cristo es el que apaga nuestra sed. Hacer CLICK
25
Claro que, gracias a Dios, hay muchas personas, unas dentro de conventos y otras en su vida de familia, quienes con gran alegría responden que Jesús es “el Todo”, es la paz, es la esperanza y es la realidad por el amor. Es la personificación del amor de Dios.
26
Esto es lo que queremos hoy al responder a la pregunta: que Jesús sea lo máximo, que sea la totalidad del ser y de la alegría, porque
27
Cristo, Tu eres plenitud, mi plenitud está en Ti. Automático
28
Cristo, Tu eres plenitud, mi plenitud está en Ti.
29
Tu eres mi plenitud
31
y vosotros alcanzáis la plenitud en Él.
32
Cristo, Tu eres plenitud, mi plenitud está en Ti.
33
Cristo, Tu eres plenitud, mi plenitud está en Ti.
34
Hacer CLICK
35
Podemos decir que ahora sabemos algo más de Jesús. Pero no basta sólo con proclamarle que sea el Todo para nosotros. Esto significa que habrá que seguirle. Mas ¿Qué debemos hacer para seguirle?
36
Jesús, ya sé de Ti, algo de tu ser. Automático
37
¿Qué quieres de mi?
38
Mas yo quiero saber qué rumbo seguir,
40
Di qué he de esperar, qué senda elegir, por qué he de luchar.
41
Tu ayúdame, pues no quiero más dudar ni temer. Hacer CLICK
42
Hoy Jesús, al final del evangelio, pone unas condiciones para seguirle. Y dice el evangelista que esto no se lo dijo sólo a los apóstoles, sino a todos los que estaban por allí.
43
"El que quiera seguirme, que se niegue a sí mismo, cargue con su cruz cada día y se venga conmigo. Pues el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa la salvará."
44
Seguir un poco a Jesús es un poco difícil; seguir mucho a Jesús es muy difícil. Pero a ello debemos tender y en seguir a Jesús debe consistir nuestra felicidad.
45
No es fácil, porque hay que negarse a sí mismo. No sólo negar muchas cosas materiales, que no nos convienen, sino apetencias que nos pueden parecer dignas: fama, salud, dinero… No es quitar por quitar, sino para tener OTRA clase de vida.
46
En esta vida todos tenemos cruces, los buenos y los malos, aunque sea muy difícil saber quiénes son buenos o malos. La diferencia esencial está en la manera de llevarla.
47
Seguir a Jesús es cargar con la cruz de cada día, pero yendo con Jesús, siguiendo sus mandatos. De pronto, cuando menos lo esperamos, esa cruz se hace suave y sentimos el influjo del Resucitado.
48
Si queremos ser discípulos de Jesús, el Mesías, debemos estar dispuestos a padecer injurias y persecuciones, por ser cumplidores del evangelio y seguidores de Cristo. Después, y muchas veces aquí, sentiremos que somos discípulos y seguidores del Resucitado.
49
Por eso Jesús comienza a explicar a los discípulos y a otras personas que en la nueva fundación o Iglesia el más grande no va a ser quien tenga más poder o cualidades humanas, sino el que esté dispuesto a perder su vida para darla en provecho y salvación de los demás.
50
Termina hoy Jesús el evangelio de este día con una especie de juego de palabras. Parece un contrasentido el perder la vida para ganarla. Es difícil entenderlo; pero los santos lo entendieron muy bien.
51
Automático Si amas tu vida la perderás,
52
Y si la aborreces te salvarás.
53
Si quieres seguirme ven,
54
pero negando tu cuerpo.
55
Toma contigo tu cruz
56
y, en ti, estoy viviendo.
57
Si buscas las cosas del mundo,
58
pierde mi vida tu cuerpo.
59
Si buscas tan sólo mi vida,
60
entro yo en ti por entero.
61
Si amas tu vida la perderás,
62
y si la aborreces te salvarás.
64
Pero la salvó, y con creces, unida a su Hijo Resucitado. Que ella interceda para que nosotros podamos estar en la Gloria. AMÉN
Presentaciones similares
© 2025 SlidePlayer.es Inc.
All rights reserved.