LA ORACIÓN

Dios de la naturaleza a un Dios intimo silencioso y sutil Elías Evoluciona desde un

El silencio, la meditación y la contemplación Los grandes medio para la oración

¿Por qué es necesaria la quietud para la oración?

Respuestas: Para dejar que nuestra ser profundo hable (Dios) Para poder reconocer los distintos tipos de sentimientos e ideas que pasan por nuestra mente

Nuestra Mente Por dentro

Necesitamos enfocarnos

Jesús ejemplo de oración Solo en el desierto cuarenta días Pero tú cuando reces entra en tu pieza, cierra la puerta y ora a tu Padre que está allí, a solas contigo. (Mt 6,6)

Dos Maestros que nos ayudarán Padre Ignacio Larrañaga monje franciscano Thich Nhat Hanh Monje Budista Focalizar la atención para estar presentes El abandono, dejar el resultado en las manos de Dios, para lograr la paz

El silencio de Dios ¿En realidad se puede escuchar a Dios? ¿Cómo se qué es Dios quien habla y no es solo mi mente? ¿Cómo identificar su voz?

Este es un problema antiguo Recuerdo los tiempos antiguos, medito todas tus acciones, considero las obras de tus manos y extiendo mis brazos hacia ti: tengo sed de ti como tierra reseca. Escúchame enseguida, Señor, que me falta el aliento. No me escondas tu rostro, igual que a los que bajan a la fosa.

¿Hasta cuándo, Señor, seguirás olvidándome? ¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro? ¿Hasta cuándo sentiré angustia en mi alma y tristeza en mi corazón, día tras día? ¿Hasta cuándo mi enemigo triunfará a costa mía? ¡Señor, Dios mío, mírame y respóndeme!.(sal 13)

A ti te llamo, Señor, Roca mía, no te hagas el sordo Escucha la voz de mi plegaria cuando a ti grito y elevo mis manos hacia tu Templo santo (salmo 28) Señor, no te estés callado, en silencio e inmóvil.(sal 83) Dios de mi alabanza, no te hagas el sordo(sal 109) (Video niños)

Como hacer oración Oración comunitaria: Rezo, canto, grito Oración Individual: Meditación, contemplación

Padre nuestro que estás en el cielo lleno de toda clase de problemas con el ceño fruncido como si fueras un hombre vulgar y corriente no pienses más en nosotros. Comprendemos que sufres porque no puedes arreglar las cosas. Sabemos que el Demonio no te deja tranquilo desconstruyendo lo que tú construyes. El se ríe de ti pero nosotros lloramos contigo: no te preocupes de sus risas diabólicas. Padre nuestro que estás donde estás rodeado de ángeles desleales sinceramente: no sufras más por nosotros tienes que darte cuenta de que los dioses no son infalibles y que nosotros perdonamos todo.