LA C IUDAD D E GRACIASPORFAV OR

Un día el Señor Pocoloco tenía que ir a llevar unos juguetes a la ciudad de Graciasporfavor. Cosquillas le pidió que lo llevara en su maletín pero el Señor Pocoloco no estaba muy convencido puesto que la ciudad de Graciasporfavor era un tanto especial.

- Llévame contigo, yo quiero ir de viaje, adem á s hace mucho, muchos días que no me llevas de viaje. Decía Cosquillas. Tanto, tanto insistió que el Señor Pocoloco lo colocó en su maletín con los dem á s juguetes.

Cuando llegaron el Señor Pocoloco fue a repartir unos juguetes y Cosquillas se fue a dar un paseo por la ciudad. Cosquillas paseo y paseo por toda la ciudad y no entendía porque el Señor Pocoloco decía que era especial, pues para el era una ciudad como todas.

Después de andar y andar le entró mucha hambre y le pregunto a una Señora : ¡Eh ! oiga, ¿dónde hay una cafetería? - Querr á s decir por favor le respondió la Señora con una sonrisa. - No, dijo Cosquillas contrariado. - Como usted no me lo dice se lo preguntaré a ese niño. - ¡Eh tú chava ! l ¿dónde hay una cafetería? - Querr á s decir por favor, respondió el niño con una sonrisa. - ¡Corchos ! Dijo Cosquillas. ¿Qué pasa en este pueblo, son todos muy raros

- Bueno cogeré un taxi que seguro que me lleva. - ¡Eh ! usted taxista, pare, pare. Cosquillas agitaba sus largos brazos y gritaba pero el taxista paso de largo gritando :” por favor, por favor ” - ¡Corchos ! ¿Por qué no para?, bueno seguiré andando.

De repente oyó una voz que decía : “ Gracias por haberme elegido para caminar ” - Esto es demasiado pensó Cosquillas y echo a andar y a andar hasta que decidió descansar en un banco. Pero el banco se echo hacia atr á s y Cosquillas se pegó un buen tortazo.

- ¡Corchos ! ¿Qué le pasa a este banco? Y al á rbol, también se ha movido y el sol se ha escondido y las flores se van. ¿Por qué se van todos? ¿Qué pasa en esta ciudad? - Esto es muy pero que muy extraño. Dijo Cosquillas. De repente sus amigos los duendes Miércoles y Luna Llena aparecen sonrientes. - ¿Qué hacéis aquí?. Preguntó Cosquillas - Hemos venido a comprar gracias y por favores. - Gracias y por favores, no entiendo nada. - Esta ciudad es la m á s educada del mundo y cuando un niño o una niña empiezan a hablar, en el país de la plastilina le regalamos gracias y por favores para que sepa como pedir las cosas y agradecer lo que reciben.

- Ahora lo entiendo todo. Muchas gracias amigos y por favor si veis al Señor Pocoloco decirle que le espero aquí sentado si el Señor Banco hace el favor de dejarme sentar. - Por supuesto, contestó el banco. - Muchas gracias, respondió Cosquillas.

Y c olorin colorado Cosquillas s e sentó a c omer rosquillas